Pedro Almodóvar recibirá un Premio Donostia en San Sebastián por su "extraordinaria aportación al cine"
- El director manchego recibirá el galardón el 26 de septiembre, antes de la proyección de La habitación de al lado
- La actriz Tilda Swinton, protagonista de la película, será la encargada de entregarle el premio
El director, guionista y productor Pedro Almodóvar recibirá el jueves 26 de septiembre un Premio Donostia en la 72ª edición del Festival de San Sebastián. La entrega del galardón honorífico, que reconoce la aportación extraordinaria del homenajeado al mundo del cine, tendrá lugar en el Auditorio Kursaal previa a la proyección de su última película, La habitación de al lado / The Room Next Door, su primer largometraje en inglés, protagonizado por Tilda Swinton y Julianne Moore, que competirá por el León de Oro en el próximo Festival de Venecia. Precisamente, será Swinton quien le entregue el premio sobre el escenario.
La trayectoria de Pedro Almodóvar, que incluye más de una decena de cortos, algunos de gran proyección internacional como La voz humana (2020), estrenado en el Festival de Venecia, o Extraña forma de vida (2023), presentado en Cannes, y casi una treintena de largometrajes, está avalada por más de 170 premios y más de 200 nominaciones. Entre los reconocimientos figuran dos Oscar, dos Globos de Oro, siete premios de la Academia de Cine Europeo, cinco Bafta, cuatro Cesar, cinco Goyas y dos David de Donatello. Ha sido galardonado en los festivales de Cannes, Berlín, Venecia y San Sebastián, y homenajeado en el MOMA. También ha recibido reconocimientos como el Premio Jean Renoir, ha sido escogido para la David Lean Lecture y nombrado doctor honoris causa en Harvard y Oxford, y ha sido merecedor de la Medalla de Oro de las Bellas Artes de Estados Unidos, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes de España, el Premio Príncipe de Asturias de las Artes o la Orden de Caballero de la Legión de Honor Francesa.
Además de su talento artístico y su reconocible estilo visual –su personalidad se evidencia desde la dirección de arte hasta la banda sonora–, el cine de Pedro Almodóvar sobresale por la escritura de los personajes femeninos, la dirección actoral, la audacia en la aproximación a temas como el universo LGTBIQ+, la religión, el sexo, las adicciones o la memoria histórica, y su compromiso político, que le ha llevado a posicionarse públicamente contra conflictos bélicos o los discursos de la extrema derecha.
Almodóvar en el Festival de San Sebastián
Pedro Almodóvar visitó por primera vez el Festival de San Sebastián en 1980 con su primer largometraje, Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón, que compitió en la sección Nuevos Realizadores. También fue proyectada en Barrios y Pueblos y, 24 años después, en 2004, fue recuperada en la retrospectiva Incorrect@s. Con su siguiente película, Laberinto de pasiones (1982), compitió en la Sección Oficial.
Artxiboa, el archivo histórico del Festival de San Sebastián, da fe de estas visitas. De 1980 figura una fotografía del cineasta con Blanca Sánchez y Olvido Gara (Alaska) en el estreno de Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón, así como una nota manuscrita para autorizar que su película se proyecte en Barrios y Pueblos, que llevaba la programación del Festival de San Sebastián a localidades del País Vasco y Navarra. De 1982 data una imagen a su llegada al Teatro Victoria Eugenia junto a las actrices Marta Fernández Muro y Cecilia Roth. De 1993 destaca la fotografía con Rossy de Palma, Bibi Andersen y Loles León en el Paseo de la República Argentina, año en el que el Festival recupera en Zabaltegi el debut del cineasta al margen del circuito comercial, Folle, folle, fólleme, Tim (1978) en el marco del homenaje que le rindió el Festival bajo el nombre La noche Almodóvar. También pudieron verse algunos fragmentos de Kika, que estaba en fase de postproducción.
En 1995 Almodóvar regresa a la Sección Oficial con La flor de mi secreto, que fue proyectada fuera de concurso. Ese mismo año, la retrospectiva El bazar de las sorpresas recuperó su cortometraje Trailer para los amantes de lo prohibido (1985). A partir de entonces, buena parte de sus películas han formado parte de la programación del Festival, tras su paso por festivales como Cannes y Venecia, en la sección de Made in Spain: Carne trémula (1998); Todo sobre mi madre (1999), que recibió el Gran Premio Fipresci en San Sebastián; Hable con ella (2002); La mala educación (2004), que inauguró Cannes; Volver (2006), que también recibió en San Sebastián el Gran Premio Fipresci; Los abrazos rotos (2009), Los amantes pasajeros (2013), Julieta (2016) o Dolor y gloria (2019), por citar algunas de las más significativas.
Su presencia en San Sebastián ha estado ligada también a la productora El Deseo, que fundó en 1986 junto a su hermano Agustín y que, además de producir su filmografía, ha apoyado películas que han sido seleccionadas en la sección Horizontes Latinos como El último verano de la Boyita (2009) o en la sección Perlak de San Sebastián: Relatos salvajes (Premio del Público a la mejor película europea, 2014), El clan (2015) o El ángel (2018), cuya presentación coincide con la última visita de Almodóvar al Festival. Este año también figura como productor de Ramón y Ramón, de Salvador del Solar, que se proyectará en Horizontes Latinos.
Además de presentar películas, Almodóvar ha apoyado con su presencia al Festival de San Sebastián asistiendo a la celebración del 50º aniversario del certamen (2002) o entregando el Premio Donostia a Al Pacino (1996), Woody Allen (2004) y Antonio Banderas (2008). En 2024 será él quien lo reciba de manos de la actriz Tilda Swinton, protagonista del corto La voz humana (2020) y de su última película, La habitación de al lado / The Room Next Door.
"Mi carrera empezó en San Sebastián el año 1980 y desde entonces con o sin película he vuelto al festival muchas veces. Y siempre lo he disfrutado muchísimo. Le he entregado el premio Donostia a Al Pacino, Woody Allen y Antonio Banderas. En este año me lo entregan a mí, lo cual me llena de alegría y agradecimiento. De verdad, es un honor. San Sebastián es una de las ciudades donde se celebra el cine con mayor entusiasmo. Más que nunca, en estos momentos, necesitamos de la complicidad de los espectadores, y de su presencia en las salas. Es un sueño asistir a un festival como este, donde las salas de cine están siempre llenas", ha declarado el cineasta.