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Israel ataca en toda la Franja de Gaza y mata a al menos 22 palestinos pese a las conversaciones de tregua

  • El Ejército israelí dice que sigue atacando el enclave para eliminar cohetes y armamento en varias localidades
  • Tres miembros de la misión de paz de la ONU en el Líbano resultan heridos tras una explosión cerca de su vehículo

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Israel bombardea toda la Franja pese a las negociaciones para una tregua

El Ejército israelí ha atacado la madrugada de este domingo el norte, centro y sur del enclave palestino de Gaza, causando al menos 22 muertos, entre los que se encuentran unos diez niños, en el bombardeo de viviendas, según fuentes palestinas. Todo ello, tras los ataques del sábado al centro de la Franja, con 15 muertos, y al sur del Líbano, con diez, y mientras continúan las negociaciones entre los mediadores para intentar llegar a un alto el fuego.

De los fallecidos en Gaza este domingo, al menos cuatro se encontraban en el campamento norteño de Yabalia, creado por la ONU en 1948 para albergar a desplazados. Allí aviones israelíes bombardearan dos apartamentos, ha informado la agencia palestina Wafa, que asegura que los equipos de rescate siguen buscando a víctimas entre los escombros.

Además una madre y sus seis hijos han muerto en la ciudad de Deir el Balah, en el centro de la Franja de Gaza, en un ataque israelí contra una casa ubicada al sur de la ciudad; y cuatro palestinos —entre ellos una mujer y una niña— han muerto al este de Jan Yunis, cuando una vivienda ha sido bombardeada, según fuentes palestinas.

Otras siete personas, incluidos tres niños, han perdido la vida en un ataque de aviones de combate israelíes contra una torre residencial en el campamento de refugiados de Nuseirat, centro, , ha indicado Al Jazeera, cuya retransmisión está censurada por ley en Israel.

Asimismo, las tropas terrestres del Ejército de Israel incursionaron por primera vez este domingo en Deir al Balah, una ciudad del centro de la Franja de Gaza de donde fueron evacuados los residentes el viernes pasado. "El equipo de combate de la Séptima Brigada amplió la actividad a las afueras de Deir al Balah", ha indicado el Ejército en un comunicado.

Los ataques también continúan en Líbano. La misión de paz de la ONU en este país (FINUL) —de la que España es partícipe— ha asegurado en un comunicado que tres de sus miembros han resultado heridos leves por una "explosión" cerca de su vehículo, que iba identificado como parte de la misión de Naciones Unidas en el sur del Líbano. La misión ha aclarado que "todos los miembros de la patrulla regresaron sanos y salvos a su base" y ha señalado que están "investigando el incidente", sin dar más detalles ni mencionar las nacionalidades de los miembros afectados o los posibles responsables.

Israel dice que elimina cohetes y armamento en varias localidades

Según el Ejército, las tropas israelíes de la división 98 continúan operando tanto en Deir el Balah como en Jan Yunis, para destruir lanzadores de cohetes y armamento, incluidos granadas explosivos y Kalasnikovs. Además, en Rafah (sur), han asegurado haber eliminado "por encima y bajo tierra" a unos 20 milicianos en el último día, según un comunicado castrense divulgado este domingo. El Ejército, asimismo, ha confirmado la muerte de dos altos cargos de Hamás en la ciudad cisjordana de Yenín

Durante más de diez meses, y alcanzando ya los 40.099 palestinos muertos, según el balance de este domingo de Hamás, Israel continúa su ofensiva en la Franja de Gaza, haciendo caso omiso de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que ordenó que evitara un genocidio en su ofensiva militar en Ráfah.

Además, hay al menos 10.000 palestinos desaparecidos bajo los escombros y más de 92.500 heridos. En total, casi dos millones de personas de toda la Franja de Gaza han sido forzosamente desplazadas sin un lugar seguro al que huir. Del lado israelí, el ataque del 7 de octubre de Hamás dejó 1.200 muertos y más de 200 personas fueron secuestradas, de las que varias decenas siguen en poder de este grupo palestino islamista.  

Las partes enfrían el optimismo de Biden para la tregua

El secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, ha llegado este domingo a Israel como parte de los esfuerzos diplomáticos para llegar a un alto el fuego en la Franja. Estados Unidos presentó el viernes una propuesta para un acuerdo de alto el fuego en Gaza después de dos días de conversaciones en Doha, pero Hamás rechazó las "nuevas condiciones" israelíes.

Los mediadores -Estados Unidos, Qatar y Egipto- anunciaron la reanudación de las conversaciones la próxima semana en El Cairo, tras la presentación, de un nuevo compromiso con vistas a la "aplicación" de una tregua. Preguntado el sábado sobre ello al pie del avión presidencial, el presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que era optimista, pero las partes han enfriado las palabras del mandatario y han asegurado que aún hay diferencias. 

Hamás continúa reivindicando que lo tratado en la última reunión de Doha, a la que no acudió de manera directa, no cumpliría con la propuesta original y que da pie a nuevas demandas israelíes con la complicidad estadounidense. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha dicho, por su parte, que su país está "negociando, no cediendo" ante Hamás y ha instado a ejercer presión sobre el grupo islamista y no sobre Israel. "Estamos llevando a cabo negociaciones muy complejas cuando del otro lado está una organización terrorista asesina, desinhibida y recalcitrante", ha dicho, al comienzo de una reunión con su Gabinete.

Entre los puntos del acuerdo se establecería que el Ejército israelí mantendría una "presencia reducida" en el corredor de Filadelfia -la frontera entre Gaza y Egipto- y no tendría que retirarse de forma completa de la Franja, ha indicado a EFE una fuente de alto rango de Hamás, bajo condición de anonimato. Sobre la gestión del paso fronterizo de Ráfah, que conecta la Franja de Gaza con Egipto, explica que pasaría a manos de la Autoridad Palestina, pero "bajo una supervisión israelí" que no se especifica. Además, Israel "podría supervisar a los desplazados que regresaran a sus hogares en el norte de Gaza y cruzaran el corredor de Netzarim" — con el que a raíz de la guerra Israel separa el norte del sur de Gaza y que supone uno de los mayores escollos—, pero no da detalles sobre cómo se llevaría esa supervisión.