Recuperan todos los cuerpos del yate de lujo hundido en Sicilia y sigue la búsqueda de un desaparecido
- Las autoridades investigan las causas del naufragio de este velero que ha dejado ya seis muertos
- Expertos navales han quedado sorprendidos por el hundimiento de una nave prácticamente "insumergible"
Los equipos de emergencia italianos han logrado recuperar al quinto de los cinco cuerpos localizados el miércoles tras el naufragio del velero de lujo Bayesian frente a la costa de Sicilia durante una tormenta. Los cadáveres fueron hallados por los rescatistas en el casco de la nave y cuatro de ellos fueron recuperados y trasladados ese mismo día a hospitales de la ciudad de Palermo. Ahora, las autoridades italianas buscan a un sexto desaparecido y creen que es solo cuestión de tiempo su localización.
Fue el lunes cuando se produjo el hundimiento de este velero de 56 metros de eslora, que llevaba a 22 personas a bordo, 10 tripulantes y 12 pasajeros, de las cuales 15 fueron rescatadas con vida. Este miércoles, las autoridades italianas interrogaron a su capitán, James Catfield, uno de los supervivientes del hundimiento que respondió a las preguntas de los fiscales de la ciudad italiana de Termini Imerese. Ninguno de los cuerpos ha sido todavía oficialmente identificado.
El cuerpo recuperado esta mañana ha sido identificado como el magnate británico Mike Lynch, propietario de la embarcación y cuya esposa fue una de las supervivientes. El multimillonario habría invitado a pasar unas vacaciones en Sicilia a algunos amigos, tras su victoria judicial en un caso de fraude en la venta de sus empresas al gigante informático Hewlett Packard.
"Uno de los barcos más seguros del mundo"
Giovanni Constantino, director general de Sea Group, conglomerado al que pertenece el astillero Perini, fabricante del Bayesian, ha declarado ante los medios italianos que la nave hundida se corresponde con "uno de los barcos más seguros del mundo", prácticamente "insumergible". Constantino ha atribuido los hechos a una "cadena de errores humanos" que permitió la entrada de agua en la nave.
Citando datos del sistema de seguimiento automático del yate y basándose en las imágenes disponibles, el director general del grupo aseguró en la noche del miércoles que transcurrieron 16 minutos desde que el viento empezó a golpear el yate y este empezó a llenarse de agua hasta que finalmente se hundió.
Operaciones complicadas
Las operaciones de búsqueda han sido complicadas debido a la profundidad y la estrechez de la zona en la que se han llevado a cabo los trabajos de rescate. El velero yace a 50 metros de profundidad y los submarinistas, con poca autonomía, han tenido que descender de dos en dos por un máximo de 12 minutos, según informa el Cuerpo de Bomberos en un comunicado.
Los fiscales de Termini Imerese han abierto una ahora investigación para esclarecer las causas del naufragio, que ha desconcertado a los expertos navales italianos por las características de una embarcación que debería haber sido capaz de soportar tales condiciones climáticas.