Trump celebra su primer mitin al aire libre tras el intento de atentado protegido por cristales antibalas
- El uso del cristal antibalas forma parte del plan que el Servicio Secreto ha aprobado para incrementar la seguridad del candidato
El expresidente estadounidense y candidato republicano en las elecciones de noviembre, Donald Trump, celebró este pasado miércoles su primer mitin al aire libre con una seguridad reforzada desde el intento de atentado del pasado julio. El escenario elegido fue la ciudad de Asheboro, en el estado clave de Carolina del Norte, donde Trump estuvo protegido por láminas de cristales antibalas.
Pese a las medidas extra de seguridad, en un momento de su intervención abandonó levemente ese espacio protegido para ir a abrazar a una mujer del público que se había sentido indispuesta.
El acto estuvo centrado en la seguridad nacional y lo aprovechó para alegar que Estados Unidos era más fuerte bajo su mandato y para subrayar que guerras como la de Ucrania no habrían sucedido de seguir él en el poder: "Mi actitud nos mantenía fuera de las guerras. Yo paraba guerras con llamadas de teléfono", dijo.
Trump repitió su denuncia de que el actual presidente, Joe Biden, y la vicepresidenta y candidata demócrata a la presidencia, Kamala Harris, están llevando a Estados Unidos "al precipicio de la III Guerra Mundial". Igualmente, incidió en la promesa de erigir en EE.UU. una Cúpula de Hierro, como la defensa antiaérea israelí.
"Ayudamos a Israel y otros países. [El expresidente] Ronald Reagan la quiso hace muchos años. Tenía razón, pero entonces no teníamos la tecnología adecuada. Hoy contamos con una tecnología increíble. Otros países la tienen y este país debería tenerla", sostuvo.
El uso del cristal antibalas forma parte de un plan del Servicio Secreto
El magnate neoyorquino, de 78 años, resultó herido en una oreja el pasado 13 de julio después de que un joven le disparara en un mitin en Butler (Pensilvania). El agresor se encontraba en un tejado de un edificio situado fuera del recinto en el que se celebraba el acto político y, antes de ser abatido por las fuerzas del orden, mató a una persona del público e hirió a otras dos.
La entonces directora del Servicio Secreto estadounidense, Kimberly Cheatle, acabó dimitiendo diez días después por los errores en la seguridad en ese encuentro y después de haber afirmado que ese intento de asesinato supuso el "mayor fallo operativo" de la agencia "en décadas".
La semana pasada se supo que el Servicio Secreto ha aprobado un plan para incrementar la seguridad de Trump que incluye el uso de pantallas de vidrio blindado. Normalmente, esas láminas a prueba de balas solo se proporcionan a los presidentes y vicepresidentes cuando se considera necesario en apariciones al aire libre.
La demócrata Harris encabeza las intenciones de voto con un 46,6%
La comparecencia de Trump de este pasado miércoles, la primera que tiene lugar con ese nuevo dispositivo, se enmarca en una intensa semana de campaña en la que él y su candidato a vicepresidente, el senador J.D. Vance, intentan contrarrestar el foco mediático que se cierne sobre la Convención Nacional Demócrata de Chicago, que ha oficializado la candidatura de Harris a la Casa Blanca.
Trump y su equipo acudirán estos días a cuatro estados clave: Pensilvania, Míchigan, Carolina del Norte y Arizona, en los que se centrarán en cuestiones cruciales para los conservadores de cara a las presidenciales del 5 de noviembre, como la inmigración, la seguridad o la economía.
De momento, Harris encabeza las intenciones de voto con un porcentaje del 46,6%, 2,9 puntos más que Trump, según la media de sondeos efectuada por la web FiveThirtyEight.
"Van a mentir como demonios para ganar las elecciones porque no tienen límites", dijo este pasado miércoles Trump refiriéndose al bando demócrata. "Si nosotros no ganamos vamos a tener un problema muy grande como país. Ya lo estamos, pero yo lo voy a arreglar", concluyó.