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Los ataques israelíes dejan una veintena de muertos en Gaza y Hamás pide "aumentar la resistencia" en Cisjordania

  • Israel ha atacado la ciudad de Gaza, Deir al Balah y Jan Yunis
  • La ONU advierte de que la última evacuación ordenada por Israel se produce en "condiciones peligrosas"

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Guerra en Gaza: los últimos ataques israelíes dejan 20 muertos
Un hombre llega al hospital Nasser de Jan Yunis con un niño en brazos tras un ataque israelí. Bashar TALEB / AFP

Los ataques israelíes sobre la Franja de Gaza en las últimas horas han dejado al menos una veintena de muertos. Los bombardeos se han concentrado principalmente en el norte y centro de la Franja, según fuentes palestinas y de la Defensa Civil.

Desde el 7 de octubre, Israel ha matado ya al menos a 40.476 palestinos en Gaza, un 70% mujeres y niños, y 93.647 han resultado heridos. Aquel día, Hamás y otras milicias palestinas atacaron el sur de Israel, matando a 1.200 personas y secuestrando a 140, de las que más de un centenar fueron posteriormente liberadas durante una tregua.

Mientras, las conversaciones para una posible tregua continúan en El Cairo, pero sin avances.

Una veintena de muertos en los últimos bombardeos

Al menos cuatro cuerpos han sido recuperados entre los escombros durante la noche, después de un bombardeo en el barrio de Tufah, al este de la ciudad de Gaza, según un comunicado de las autoridades de defensa civil. En el mismo barrio, los equipos médicos han encontrado los cadáveres de seis personas de dos familias, entre ellas una niña y tres mujeres, después de que un ataque con misiles contra un apartamento.

Otras siete personas, incluidas niños y mujeres, han muerto en el bombardeo de un apartamento en la torre Hadil, en el campamento de Maghazi en el centro de Gaza, según ha informado la agencia palestina Wafa. La artillería israelí también ha atacado las zonas orientales de la ciudad de Deir al Balah, en el centro de la Franja según la misma fuente.

En la zona sur han muerto cinco gazatís en el campamento de refugiados de Jan Yunis, de acuerdo con la información de la Defensa Civil.

Evacuación "peligrosa", según la ONU

La ONU ha advertido de que la última orden de evacuación de los militares israelíes en se ha producido con poca anticipación y "en condiciones peligrosas". La zona afectada, en Deir al Balah, incluye un campo de refugiados, centros médicos, una planta desalinizadora, pozos y una instalación clave de almacenamiento de ayuda.

Se trata de la décimo sexta evacuación ordenada por el Ejército israelí en diez meses de guerra, que ha reducido la "zona segura" a solo el 11% de toda la Franja, donde se acumulan más de un millón de desplazados.

"Deberían traer barcos, así la próxima vez que orden a la gente que se vaya, podremos saltar a ellos. La gente está ahora en la playa, junto al mar", ha declarado a Reuters Aya, de 30 años, una desplazada de la ciudad de Gaza que ahora vive con su familia en Deir al Balah.

"Todos los días dicen que las negociaciones progresan, que un acuerdo está cerca, y luego todo cae como el polvo. ¿Saben los negociadores que cada día más familias son barridas por los bombardeos israelíes? ¿Comprende el mundo que cada día nos cuesta más vidas?" se ha preguntado Aya en una conversación mediante mensajes.

La ONU suspendió este lunes sus operaciones humanitarias cuando preveía comenzar a vacunar a 640.000 niños contra la polio, después de haberse detectado al menos un caso y declararse la alerta sanitaria por esta enfermedad, erradicada en el enclave hace una década.

Hamás llama a aumentar la "resistencia" en Cisjordania

Mientras, en Cisjordania Hamás ha hecho un llamamiento a "escalar la resistencia" contra la ocupación israelí después del ataque del lunes en Tulkarem que costó la vida a cinco personas, entre ellas dos menores.

"Su sangre pura no será en vano, sino que será un incentivo para la escalada de la resistencia y la continuación de sus operaciones heroicas", ha declarado Hamás en un comunicado en su web.

El Ejército israelí atacó con un dron el campo de refugiados de Nur Shams de Tulkarem, en el norte de Cisjordania, matando a cinco personas, dos de ellas menores de edad. El objetivo, según Israel, eran milicianos palestinos. Además, colonos israelíes mataron a tiros a un palestino en Wadi Rahal, situado al sur de Belén.