Cisjordanos denuncian que el Ejército israelí detiene a menores palestinos sin pruebas ni cargos
- La familia de un joven relata a TVE su detención sin motivo a manos de las Fuerzas israelís
- Tel Aviv lleva a cabo la mayor operación militar en décadas en el enclave palestino
En las afueras de Ramala, en Cisjordania, vive Sohei, un arquitecto palestino, y su familia. Su vida, asegura a TVE, cambió de repente cuando el pasado 21 de agosto irrumpieron en su casa 12 soldados israelíes en vehículos militares que preguntaban por el menor de sus cuatro hijos.
"Querían a toda costa encontrar su iPhone", relata el padre del joven Ammar. "Pero mi hijo no tiene iPhone porque es un niño de 14 años", asegura.
Fue entonces cuando los agentes entraron en su vivienda y comenzaron a revolver entre sus cosas. Buscaron en cajones, armarios, sacaron libros y se llevaron al menor detenido.
"Le esposaron y le detuvieron. Insistían en encontrar su teléfono", cuenta Sohei, quien asegura que ninguno de sus hijos tiene contacto con milicianos. Denuncia, además, que los militares israelíes detienen a niños y adolescentes sin prueba alguna. Ammar permanece desde entonces en situación de detención administrativa sin cargos.
El pasado 28 de agosto las Fuerzas Armadas israelíes iniciaron en Cisjordania la mayor operación militar en décadas. Hasta la fecha, los militares han matado a al menos 34 personas en una operación que, según Israel, se lleva a cabo para desarticular a las milicias de Hamás y la Yihad Islámica en Yenín y Tulkarem. Sin embargo, además de supuestos milicianos, también ha habido varias víctimas sin relación aparente con los grupos armados.
Hay 250 menores en cárceles israelíes
Las organizaciones humanitarias están cada vez más preocupadas por la actual situación en Cisjordania, donde, en los últimos días, la violencia y las detenciones han ido en aumento. Entre los detenidos hay 250 menores palestinos en prisiones israelíes, 41 de ellos en "detención administrativa". El más pequeño tiene 14 años.
Desde la Fundación Addameer, que se ocupa de supervisar la situación de los presos palestinos, denuncian que Israel encarcela a personas sin presentar pruebas en contra. Lo hacen también, advierten, con menores, que pueden permanecer meses retenidos.
"Solo por el hecho de que hayan posteado algo o haber hecho algún comentario en redes sociales pueden ser acusados de incitar a la violencia y ser retenidos", explica a TVE la abogada Jenna Abuhasna, de la Fundación Addameer.
Mientras tanto, en casa de Ammar, su familia aún no sabe cuál es la razón ni qué pruebas tienen para que el pequeño de la familia siga en la cárcel.