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Hospital Nacional de Parapléjicos: un recorrido en imágenes por sus 50 años de historia

  • Desde su inauguración, el 7 de octubre de 1974, el centro ha abordado las lesiones de una manera integral
  • Combina una labor terapéutica y clínica con el estudio de la médula espinal, y por él han pasado más de 35.000 pacientes

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Deporte adaptado en el Hospital Nacional de Parapléjicos.
El deporte es actualmente uno de los ejes en los que se basa la rehabilitación de las lesiones medulares. EFE / ÁNGELES VISDÓMINE

El Hospital Nacional de Parapléjicos, ubicado en la ciudad de Toledo, cumple medio siglo de vida, y en este tiempo se ha convertido en un referente en el tratamiento de la lesión medular. Desde su inauguración, el 7 de octubre de 1974, han pasado por sus instalaciones más de 35.000 pacientes, que han recibido una atención integral.

El centro fue inicialmente gestionado por la Seguridad Social, luego por el antiguo INSALUD y, con las transferencias en materia sanitaria de 2002, el Gobierno de Castilla-La Mancha asumió su titularidad, aunque actualmente su ámbito de actuación es el de centro de referencia nacional especializado en lesión medular espinal.

Los entonces príncipes don Juan Carlos y doña Sofía, en la inauguración del Hospital de Parapléjicos.

Los entonces príncipes don Juan Carlos y doña Sofía, firman en el libro de honor durante la inauguración.

Inspirado en la filosofía de Ludwig Guttmann

El Hospital Nacional de Parapléjicos se inspiró en el National Spinal Injuries Center de Reino Unido, creado en 1944 por Ludwig Guttmann, un neurocirujano judío de origen alemán que tuvo que huir del Tercer Reich nazi justo antes de que comenzase la II Guerra Mundial. El objetivo del doctor Guttmann era mejorar la esperanza de vida de los soldados con lesión medular e integrarlos de nuevo en la sociedad. Su innovador enfoque, que abordaba las lesiones de manera integral, logró aumentar la esperanza de vida de estos pacientes y su independencia. Ludwig Guttmann, reconocido como el padre de los Juegos Paralímpicos, visitó Toledo para la inauguración del centro en 1974. “Este es el sueño de mi vida hecho realidad”, aseguró.

Ludwig Guttman, en la inauguración del Hospital Nacional de Parapléjicos.

Sir Ludwig Guttman, con traje oscuro, posa junto con el primer equipo facultativo del Hospital de Parapléjicos, en 1974. ARCHIVO HNP

La práctica deportiva es uno de los principales ejes en ese concepto de rehabilitación integral con el que trabaja el Hospital de Parapléjicos, heredado de Guttmann. Muchos de los deportistas que han participado en los Juegos Paralímpicos, como los que se están celebrando en París, han pasado por el centro. Una de ellas es Gema Hassen-Bey, que participó en cinco citas consecutivas, desde Barcelona 1992 hasta Pekín 2008, en las que logró tres medallas de bronce para España en espada.

Gema Hassen-Bey y la reina Sofía.

La niña Gema Hassen-Bey entrega un ramo de flores a la reina Sofía durante la inauguración de hospital. ARCHIVO HNP

Recientemente, el Hospital Nacional de Parapléjicos ha recibido la certificación de Centro de Tecnificación Deportiva para personas con discapacidad. En este tipo de centros, los deportistas pueden desarrollar su carrera desde sus inicios hasta su consolidación como profesionales de alto nivel, además de poder compatibilizar la práctica deportiva con la formación académica.

Más de 700 profesionales

En el Hospital de Parapléjicos trabajan actualmente más de 700 profesionales con un objetivo común: reducir las limitaciones derivadas de las lesiones medulares. Por ello, el hospital cuenta con un equipo multidisciplinar, compuesto por médicos de distintas especialidades, personal de enfermería y celadores, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, logopedas, psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales... 

Inauguración del Hospital Nacional de Parapléjicos.

Enfermeras y pacientes, en el gimnasio principal del centro, durante el acto de inauguración del Hospital Nacional de Parapléjicos. ARCHIVO HNP

Durante este medio siglo de existencia, entre los numerosos hitos del hospital destaca la instalación de los primeros marcapasos diafragmáticos —que ayudan a estimular la respiración en pacientes con problemas de ventilación— y la realización de las primeras operaciones de la mano tetrapléjica. También, la creación de una unidad de sexualidad y reproducción asistida, así como la puesta en marcha de avanzadas tecnologías para la rehabilitación, o la creación de una unidad de salud mental.

Boda en el Hospital Nacional de Parapléjicos.

Boda de un paciente en el Hospital Nacional de Parapléjicos. ARCHIVO HNP

Los talleres ocupacionales han ocupado un lugar destacado desde el nacimiento del hospital. Una parte importante de los esfuerzos de la plantilla se centra en ese momento crucial que todos los pacientes tendrán que afrontar tarde o temprano: abandonar el centro y reintegrarse en la vida que dejaron atrás con la lesión. En la actualidad, el hospital cuenta con una unidad de terapia ocupacional compuesta por 15 terapeutas, 3 celadores, 3 auxiliares y 2 técnicos que ayudan a los pacientes a recuperar o sustituir la funcionalidad perdida y poder llegar a ser lo más independiente posible en su vida diaria.

Orientación profesional para los pacientes del Hospital Nacional de Parapléjicos.

Orientación profesional para los pacientes. Arreglar radios y televisores fue una de las salidas más demandadas. ARCHIVO HNP

Ciencia y tecnología, de la mano

Los avances científicos en neuroplasticidad, sumados a la introducción de nuevas tecnologías, han revolucionado la práctica asistencial de los pacientes con lesión medular. El Hospital de Parapléjicos apoya gran parte de su trabajo en esta combinación de ciencia y tecnología, mediante aplicaciones como la robótica, la realidad virtual, la electroestimulación, la neuromodulación o los dispositivos con interfaz cerebro-máquina (sistemas que establecen una comunicación directa entre el cerebro y un ordenador).

Dentro de esta aplicación conjunta de ciencia y tecnología, la terapia robótica tiene un protagonismo especial en el centro, con la utilización de tres sistemas de entrenamiento Lokomat, dos de ellos para adultos y uno para niños. Estos dispositivos son exoesqueletos que ayudan a simular una marcha normal en pacientes que no pueden caminar, estimulando el cerebro y los músculos a través de repeticiones constantes.

Lokomat infantil en el Hospital Nacional de Parapléjicos.

la terapia robótica tiene un protagonismo especial, con la utilización de tres sistemas de entrenamiento Lokomat, dos de ellos para adultos y uno para niños. EFE / ISMAEL HERRERO

Investigación científica

El Hospital de Parapléjicos también se ha convertido en un referente internacional en la investigación de la lesión medular. El centro combina una labor terapéutica y clínica con el estudio científico de la médula espinal, y en este terreno también ha conseguido importantes logros en los últimos años. La unidad de investigación se creó en 2001, y desde entonces ha diversificado las líneas de estudio. En la actualidad, en sus laboratorios trabajan 13 grupos, integrados aproximadamente por un centenar de científicos, que abordan áreas como el restablecimiento de los circuitos neuronales, la preservación del tejido nervioso o el crecimiento de las fibras nerviosas dañadas.

En lo relativo a la investigación clínica que se desarrolla en el hospital, esta se puede dividir en tres grandes áreas interrelacionadas: evaluación de la lesión medular y búsqueda de biomarcadores; diseño de nuevas herramientas terapéuticas y desarrollo de ensayos clínicos para hacer llegar a los pacientes el fruto de ese trabajo. 

Investigación médula espinal en el Hospital Nacional de Parapléjicos.

El Hospital de Parapléjicos combina una labor terapéutica y clínica con el estudio de la médula espinal. CARLOS MONROY / HNP

60.000 metros cuadrados

Desde 1974, el Hospital Nacional de Parapléjicos ha cambiado tanto interior como exteriormente, ampliando sus instalaciones y también sus competencias. En 2014, duplicó su superficie, hasta los más de 60.000 metros cuadrados actuales, con la incorporación de 180 nuevas camas —ahora cuenta con 222—, además de 23 nuevas consultas con servicios de rehabilitación, neurología, psiquiatría, psicología, unidad del dolor o reproducción asistida. También se añadió una nueva UCI, un nuevo servicio de radiología digital y un nuevo bloque quirúrgico.

Hospital Nacional de Parapléjicos.

Vista aérea del Hospital Nacional de Parapléjicos, ubicado junto al río Tajo. CARLOS MONROY / HNP