Trump encargará a Musk dirigir una comisión de eficiencia del gasto del Gobierno si es elegido

• El candidato asegura que delegará la economía el país en la visión del magnate
• En EE.UU. ya existen componentes del Gobierno que identifican estas cuestiones, como la Oficina de Rendición de Cuentas

Donald Trump habla en Nueva York el 5 de septiembre de 2024 David Dee Delgado / AFP

El candidato republicano a la presidencia y expresidente de EE.UU., Donald Trump ha fichado al magnate Elon Musk para liderar la comisión de eficiencia gubernamental. Este anuncio forma parte de la preparación del candidato republicano para la posible la victoria en las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre.

Trump ha asegurado en un mitin en Nueva York que delegará la economía el país en la visión del CEO de Space X y X. En esta misma intervención ha prometido reducir drásticamente el impuesto de sociedades para las empresas que fabriquen en el país, establecer zonas de "baja tributación" en terrenos federales donde se animaría a las empresas constructoras a edificar nuevas viviendas, y crear un fondo soberano.

Implantar una comisión de eficiencia gubernamental

Esta ha sido la primera vez que Trump ha hecho pública su intención de implantar una comisión de eficiencia gubernamental y también que Musk habría accedido a liderarla. El multimillonario también había dicho en un podcast el 19 de agosto que había mantenido conversaciones con el expresidente sobre la comisión y que estaría interesado en formar parte de ella. "Estoy deseando servir a Estados Unidos si surge la oportunidad", ha escrito el jefe de Tesla en X el jueves, asegurando que "no hace falta sueldo, ni título, ni reconocimiento".

Sin embargo, el único detalle que ha dado Trump sobre la operación ha sido su intención de crear un plan para eliminar el "fraude y los pagos indebidos" en los seis meses siguientes a su constitución. "Crearé una comisión de eficiencia gubernamental encargada de llevar a cabo una auditoría financiera y de rendimiento completa de todo el Gobierno federal", ha anunciado.

Sin embargo, en EE.UU. ya existen componentes del Gobierno que identifican estas cuestiones, como la Oficina de Rendición de Cuentas del Gobierno, una agencia de vigilancia encargada de investigar el gasto federal.

Aunque Trump ya había dicho que quería reducir el tipo impositivo de las empresas al 15%, hasta ahora no había vinculado ese tipo al mantenimiento de la fabricación dentro del país. También ha solicitado la creación de un fondo soberano para financiar grandes proyectos de infraestructuras. Ha añadido que rescindirá los fondos no gastados relacionados con la Ley de Reducción de la Inflación de 2022, uno de los logros legislativos emblemáticos del actual presidente, el demócrata Joe Biden.

El republicano ha declarado que emitirá "una declaración de emergencia nacional" en un intento de ayudar a que los nuevos proyectos energéticos superen más fácilmente los obstáculos burocráticos.

Visiones económicas opuestas a las de Harris

Su plan de vivienda difiere drásticamente del de la vicepresidenta Kamala Harris, la candidata demócrata, que ha propuesto crear un crédito de 25.000 dólares para los compradores de su primera vivienda. El plan de Harris ha sido criticado por los republicanos y algunos economistas que afirman que el crédito hará subir los precios de la vivienda.

Durante su campaña electoral, Trump ha culpado con frecuencia a Harris de la subida de los precios de los productos de consumo diario durante el mandato del presidente Joe Biden.

El asesor principal de política de Harris, Brian Nelson, ha dicho que la agenda económica de Trump "haría estallar la deuda nacional", al tiempo que dispararía la inflación y acabaría con el empleo.

Por otra parte, el plan de Trump para explotar tierras federales está en el punto de mira de los ecologistas, y no está claro cuánta demanda de vivienda habría en las zonas rurales donde se encuentra la mayor parte de las tierras federales.

Muchos economistas creen que las políticas económicas esbozadas por Trump reducirán el crecimiento y elevarán la inflación. Pero también señalan que, para aplicar gran parte de su programa político, los republicanos necesitan mantener el control de la Cámara de Representantes y arrebatar el Senado a los demócratas.

La propuesta de Trump suscitó el rechazo de Everett Kelley, presidente de la Federación Estadounidense de Empleados del Gobierno, sindicato que representa a unos 750.000 trabajadores federales. Acusó a Trump y a Musk de querer destripar la función pública y sustituir a los trabajadores despedidos por aliados, creando instituciones al servicio de los partidos y no del Estado.