El recelo de los líderes territoriales por la financiación en Cataluña marca el Comité Federal del PSOE
- Sánchez ha prometido más recursos para "todas las comunidades" en pleno malestar por la singularidad concedida a Cataluña
- Montero defiende en el Senado que el acuerdo se rige por "la solidaridad" mientras ERC avisa ante cualquier incumplimiento
Si es una financiación "singular" o un "concierto" catalán depende de quién hable del tema, pero lo que está claro es que levanta recelos tanto fuera como dentro del PSOE. El partido celebra este sábado un Comité Federal que, aunque tiene como punto del día convocar oficialmente el Congreso Federal de noviembre, estará marcado por la financiación autonómica, una cita en la que los líderes territoriales pueden exponer sus discrepancias e incertidumbres.
El presidente del Gobierno y secretario general del partido, Pedro Sánchez, defendió el miércoles en el inicio del curso político que el nuevo sistema de financiación autonómico será "más justo" y tendrá en cuenta las "peculiaridades" de cada territorio. También prometió, sin concretar cómo, que "todas y cada una de las comunidades" recibirán más recursos y que "duplicará" los recursos del fondo de compensación interterritorial. Pero sus palabras no han disipado todos esos recelos que critican que la reforma de la financiación autonómica se haya acometido de forma bilateral con una comunidad, y no "todos a una", como reclamaba el PP el viernes.
El presidente Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, único líder socialista que gobierna una autonomía con mayoría absoluta, se ha mostrado siempre crítico con el acuerdo, que llegó a tachar de "obsceno" y "bochornoso". "Un grave atentado a la igualdad", dijo. Más allá de García Page, fuentes de la dirección socialista explican a RTVE que dan por hecho que este sábado habrá otras intervenciones críticas en el Comité.
Uno de ellos será previsiblemente el líder del PSOE en Aragón, Javier Lambán. La Comisión Ejecutiva Regional del PSOE que lidera fue la primera federación que rechazó, por unanimidad, el pacto fiscal alcanzado por el PSC y ERC, y exigieron establecer un sistema de financiación "sin privilegios" para ningún territorio.
Desde Extremadura, su líder al frente de los socialistas, Miguel Ángel Gallardo, llegó a pedir a Sánchez que convocara el Consejo de Política Federal para "dialogar" y "definir" una postura sobre este asunto. En una entrevista publicada el viernes en El País, Gallardo reconocía que les pilló "muy de sorpresa" el acuerdo y ve "elementos de preocupación". Asimismo, confesó que ha echado en falta "diálogo" y "reflexión". "Cuando se trasladan divergencias públicamente es porque no ha habido ese espacio", añadía.
“Cuando se trasladan divergencias públicamente es porque no ha habido ese espacio“
Otro de los líderes socialistas crítico, que estará ausente en el Comité por cuestiones de agenda, es el presidente de Asturias. Adrián Barbón compareció ante los medios tras conocerse el pacto para adelantar que no aprobarían "nada" que fuera contra los intereses de Asturias. "Si se hace una salida del régimen común, nosotros no lo vemos".
Montero defiende el acuerdo y niega que sea un "cupo"
Frente a las críticas dentro del partido, la defensa ha venido de la mano de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Ha negado que se trate de un "cupo" o un "concierto", denominación que sí le dan desde ERC, cuya senadora Sara Bailac ha advertido de "consecuencias" si no se cumple de forma "íntegra".
En la apertura del curso político el sábado pasado desde Sevilla, la ministra ya aseguró que otros territorios también pueden acceder a una financiación singular como la concedida a Cataluña, un guiño a los suyos y a las críticas de la oposición.
El mismo día y a la misma hora que el presidente comparecía este miércoles para calmar los ánimos con sus explicaciones sobre el nuevo modelo de financiación, María Jesús Montero hacía lo propio en el Senado, obligada por la mayoría absoluta de la que el PP dispone en la Cámara Alta. Allí reiteró que el acuerdo se rige por el principio de "solidaridad" y arremetió contra los 'populares' por su "populismo fiscal y deslealtad institucional".
Su intervención fue una defensa férrea del pacto con ERC que hizo posible la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat de Cataluña, pero, según aseguro posteriormente el presidente del Senado, Pedro Rollán, en RNE, no dejó lo suficientemente "claro" la "letra pequeña".
Lo que se sabe del pacto de financiación
El texto del acuerdo otorga a la Generalitat de Cataluña la capacidad de que "gestione, capte, liquide e inspeccione todos los impuestos", una tarea que recaería sobre una Agencia Tributaria Catalana que habría que crear.
Esta institución sería también la encargada de desviar al Estado la cantidad correspondiente por los servicios que este presta a Cataluña, así como el monto por la solidaridad con otros territorios.
Lo primero, según el borrador, se calcularía a través de un porcentaje de participación en los tributos, lo segundo se establecería de manera "explícita" y "transparente". Esta solidaridad, no obstante, estaría limitada por el llamado principio de ordinalidad, esto es, "siempre" que el resto de comunidades autónomas "lleven a cabo un esfuerzo fiscal también similar".
Salvador Illa, que fue investido presidente con los votos de ERC tras pactarse este sistema de financiación "singular", será otra de las voces del Comité socialista que defienda el acuerdo. Ha reiterado en varias ocasiones que no vulnera el principio de solidaridad. "Cataluña no quiere ser más que nadie, pero tampoco menos", zanjó el jueves.
El vicepresidente del Congreso, Alfonso Gómez de Celis, ha confirmado en una entrevista en RNE que en el Comité de este sábado se hablará de financiación "para tener un Estado del bienestar sólido y fuerte" y aunque reconoce que en estas citas "siempre se espera una gran ebullición", los socialistas saben "estar a la altura de las circunstancias".