¿Quién ganó en el debate? La agudeza y tranquilidad de Harris desconcertó a un enfadado Trump
- Los gestos y el lenguaje corporal de la vicepresidenta fueron su principal arma contra el expresidente
- Según la cadena estadounidense CNN, Harris triunfó en el debate frente a Trump
Donald Trump y Kamala Harris se vieron por primera vez cara a cara en un debate entre los dos principales candidatos a la Casa Blanca. Fueron 90 minutos repletos de ataques personales mutuos, pero la vicepresidenta tuvo la iniciativa y el exmandatario republicano se mostró a la defensiva durante la mayor parte del tiempo.
En su discurso, Harris menospreció la asistencia a los mítines de Trump —apuntando directamente a su ego—, lo que puso nervioso al expresidente, y logró poner sobre la mesa casi todos los éxitos más relevantes del mandato del actual presidente, Joe Biden. Cuestiones que el propio Biden no pudo abordar en su catastrófico debate con el magnate neoyorquino que marcó el fin de su carrera hacia un segundo mandato.
La vicepresidenta centró el debate en los juicios contra Trump, el asalto al Capitolio, los elogios del expresidente a dictadores, la violencia racista en Charlottesville y el derecho al aborto, entre otros asuntos.
Irónicamente, Trump sufrió los mismos problemas que Biden en su debate de julio: no pudo definir la estrategia de su oponente y fue incapaz de exponer un plan sólido para el futuro de Estados Unidos. En varias ocasiones, el expresidente contestó a las preguntas disgustado y acusó a su contrincante de plagiar el plan económico de Biden.
Asimismo, el candidato republicano cuestionó a la vicepresidenta —a quien acusó de ser "marxista"— por su posición en relación con el aborto, intentando acorralarla y planteándole si aprobaría una legislación que permitiera a las mujeres interrumpir un embarazo en el tercer trimestre.
Según una encuesta publicada por la cadena CNN entre votantes que observaban el debate, un 63% de los 605 participantes aseguró que Harris tuvo una mejor intervención en el debate, frente a un 37% que opinó que Trump fue el mejor de los dos.
Una muestra de lo bien que le fue en el debate a la candidata demócrata es que los republicanos se han quejado de la orientación de las preguntas de los moderadores de la cadena ABC News y también el hecho de que, nada más terminar, el equipo de Harris se mostrara dispuesto a celebrar un segundo encuentro con Trump.
Hablamos con Jose Antonio Gurpegui del Instituto Franklin.
- hola muy buenos días.
Encuesta CNN 63% gano Kamala 37% TRUMP
Kamala Harris supo llevarse a su terreno a Trump.
-¿cómo lo valora?
- Ha sido más positivo para Kamala Harris.
Si se ven las relaciones más allá de lo que son las relaciones de
euforia,
vemos por ejemplo la reacción de los demócratas,
que piden ya un nuevo debate,
porque saben que les ha ido bien.
La reacción de Donald Trump,
es decir yo pensaba que iba a enfrentarme,
contra 13 en referencia a los 2 presentadores que le han corregido.
Más allá de eso,
quien ha conseguido su objetivo,
sin ser definitivo,
ha sido Kamala Harris.
ninguno de los 2 ha logrado,
cambiar la intención de voto,
de quienes ya lo tenían decidido.
Fuera republicano o demócrata ninguno de los 2 ha conseguido hacer
cambiar de opinión,
en ese sentido lo tenía muy claro,
pero sí que hay unas bolsas de votantes,
que son los que van a decantar la elección,
hacia un lado u otro punto que son los indecisos,
y por otra parte el 35%,
de republicanos que votaron y que no son muy por Trump.
Kamala Harris les ha podido llegar más que el propio Donald Trump.
Ese gesto al entrar,
acercarse y darle la mano.
Va más allá de la mera cortesía.
Es una especie de símbolo muy estudiado,
de yo voy a entenderme con usted.
voy a ser la presidenta de todos los norteamericanos.
Soy la presidenta del futuro en tanto tú eres el presidente del
pasado.
Donald Trump intentaba equiparar a Kamala Harris con Y baiden.
-Kamala Harris se ha llevado a Donald Trump a su terreno en
numerosas ocasiones.
Es verdad que iban diciendo cosas salteadas.
Los gestos y las miradas,
Kamala Harris siempre le miraba a él.
Donald Trump miraba a los presentadores.
El terreno de enfrentamiento siempre ha favorecido a Donald Trump.
-Kamala Harris sabía que iba a ser un debate de pantalla partida.
El debate de Biden fue desastroso,
entonces ella,
miraba a Donald Trump continuamente.
sonreía más abiertamente.
No podía hablar pero por sus gestos decía muchas cosas.
cuando Donald Trump ha mencionado,
y luego ha sido rectificado por uno de los moderadores,
y decía que en Springfield estaban desapareciendo perros y gatos,
y que los inmigrantes ilegales se los estaban comiendo.
Los gestos de Kamala Harris eran muy significativos.
Ella tenía un gesto más relajado.
ha empezado un poco nerviosa.
Le faltaba un poco de oxígeno a principio.
Ese saludo muy estudiado,
creo que le ha creado o no se sin nervios,
pero sin poca detención.
Donald Trump no ha mirado a Kamala Harris en ningún momento,
con un gesto más serio.
Ha sido más Donald Trump en este debate que en el anterior debate,
mucho más vehemente.
en algunos casos incluso elevando el tono.
y con este gesto de enfado.
y muy a la defensiva.
-¿cree que habrá otro debate y si pueden cambiar las reglas?
- Hay una Comisión de debates en Estados Unidos,
que en el anterior no pudo actuar.
Una comisión que reglamenta los debates.
en el anterior debate no pudieron actuar porque ninguno de los 2
candidatos,
era todavía el candidato oficial de partido.
Con lo cual no se aplicaron esa.
ahora se ha seguido con las mismas reglas que el anterior punto no sé
si en el futuro habrá más debates.
Es uno de los temas que se está hablando continuamente.
La primera reacción de los demócratas es pedir otro debate,
eso es porque les ha ido bien.
Están cuidando mucho todas las apariciones de Kamala Harris,
tanto los medios de comunicación,
le han cuidado mucho su exposición pública,
como mítines.
Yo creo que va a depender,
como le vaya en las encuestas a Donald Trump.
Si ve que está bajando mucho en las encuestas,
probablemente,
quiera entrar en otro debate,
a ver si puede recuperar puntos y siguen en empate técnico,
Kamala Harris ayer estaba un punto por delante,
de Donald Trump,
eso es un empate técnico,
probablemente no haya debate.
Dependiendo de cómo vayan los pronósticos,
habrá o no habrá debates en un futuro.
-finalizaba el debate,
y pocos minutos después,
espaldarazo de Taylor Swift a Kamala Harris.
Hablamos de una cantante con millones de seguidores.
Esto puede abrir la veda para que el resto de artistas,
empiezan a apoyar a Kamala Harris,
y desestabilice más a Donald Trump.
-ha sido significativo porque Donald Trump,
en un montaje,
dijo que los seguidores de Taylor Swift le apoyaban.
Es muy llamativo la influencia que pueda tener una cantante,
en una campaña electoral.
leí en un periódico,
que podemos hablar de un 0,5 % o de un punto.
Lo que suponía el apoyo de que yo soy.
y sobre todo se trata de candidatos jóvenes,
que suelen votar demócrata,
pero suelen quedarse en casa.
los seguidores y las seguidoras de Taylor Swift,
son gente especialmente joven,
en un porcentaje muy elevado,
que normalmente se quedaban en casa.
Y esto puede definirles a adoptar otra decisión.
Cualquier bolsa de votos,
por unos miles o decenas de miles de votos,
puede decantar estados clave.
Por un candidato o por otro punto y decidir quién será el candidato
presidencial.
-muchas gracias por atendernos.
-encantado de estar en vuestro programa.
-vamos con la previsión del tiempo.
José Antonio Gurpegui, director del Instituto Franklin de la Universidad de Alcalá de Henares, considera que en el debate "le ha ido mejor a Kamala Harris".
"Ninguno de los dos ha logrado cambiar la intención de voto de quienes lo tenían decidido, fueran demócratas o republicanos, pero hay bolsas de votantes que son los que en definitiva van a decantar la elección: los indecisos y el 33% de republicanos que votaron a Haley y que no son precisamente muy pro-Trump, y a los que Harris ha podido llegar más", comenta en una entrevista en el Canal 24 Horas.
Por su parte, el profesor de Comunicación Social y Persuasión de la Universidad Oberta de Cataluña, Lluis Pastor, también cree que el debate "lo ha ganado Harris". "Si jugáramos sobre 10, le daría un 6 a Harris sobre 4 de Trump, pero es que no lo ha ganado por más porque se le ha escapado", asegura en RNE.
"Es muy difícil debatir con Trump porque no debate sobre el mismo mundo. Es muy complicado que llegues a puntos para mostrar los errores de tu adversario", añade.
Harris, tomando la iniciativa desde el primer momento
El debate comenzó con la vicepresidenta estadounidense acercándose a su rival, a quien estrechó la mano —prácticamente obligando al candidato republicano a hacerlo— y presentándose: "Kamala Harris", dijo. Era la primera vez que Harris y Trump se veían en persona.
Durante los 90 minutos del debate, Harris se mostraba con energía y ofreciendo una visión positiva del futuro, mientras Trump miraba con el ceño fruncido y realizaba críticas señalando que Estados Unidos era un país en decadencia.
A Gurpegui le parecen llamativos los gestos de los candidatos durante el debate, como el de Harris al acercarse para dar la mano y presentarse a Trump, "un símbolo muy estudiado de ‘voy a entenderme también con los trumpistas y voy a ser la presidenta de todos los americanos’".
Según el director del Instituto Franklin de la Universidad de Alcalá de Henares, la candidata también "miraba a Trump continuamente, fruncía el ceño, con sus gestos decía muchas cosas", aunque opina que "en su primera intervención le faltaba oxígeno".
que ha estado más a la defensiva de lo que suele ser habitual.
Ha sido la primera vez que los dos se veían las caras
y ha sido un debate encendido.
kamala Harris sabía que se la jugaba.
Hace solo mes y medio que es candidata
y ha decidido venderse a los estadounidenses
como el futuro frente al pasado,
como una fiscal frente a un delincuente convicto
1 mujer de clase trabajadora,
frente a un millonario que sólo se preocupa de sí mismo,
es la vicepresidenta de un gobierna impopular,
y no le ha dedicado tiempo a defender la gestión,
sino presentar sus propias propuestas,
a Donald Trump le hemos visto enfadado,
ha insultado a Kamala Harris,
y ha dicho que si ella llega a la Casa Blanca va destruir el país,
en esta sala después del debate,
hemos hablado con congresistas y asesores y gobernadores,
entre los demócratas el ambiente era muy diferente,
al que vimos después del debate,
aquí estaban retóricos,
los republicanos han defendido a su candidato,
y piden a los estableces que se fije más en sus políticas.
Veremos cómo influye este debate.
Mismas normas que en el debate de junio.
Pero una imagen distinta para empezar.
Kamala Harris se acerca a Trump y le da la mano.
"Soy Kamala Harris", se presenta.
Es la primera vez que se veían en persona.
Sin discurso inicial de los candidatos,
salía el primer tema:
el que más preocupa según las encuestas a los estadounidenses.
"¿Está mejor la economía que hace 4 años?"
Kamala no ha contestado...
se ha presentado como la hija de una familia de clase media
y como la única con un plan para esa gente.
Trump, en cambio, como hizo contra Biden,
ha centrado su discurso económico en la inmigración.
"Afroamericanos, hispanos...
vienen aquí para ocupar nuestros puestos de trabajo", ha dicho.
Califica la suya como una de las mejores economías
de la historia.
Y promete, volverá a hacerlo, incluso mejor.
Más allá de las palabras y los insultos.
A ella, marxista...
A él, delincuente...
lo gestual ha marcado el debate.
Kamala, siempre mirándolo.
Él, con la vista puesta al frente, hacia los dos presentadores.
Precisamente ellos han protagonizado
otro de los momentos.
Cuando han intervenido, hasta en dos ocasiones
para desmentir a Donald Trump.
En esta ocasión, después de que el expresidente
hablará de migrantes
que se comen a las mascotas de los vecinos en Springfield
y en Ohaio.
Las dos guerras, Gaza y Ucrania, han tenido su espacio.
Kamala Harris ha defendido el derecho de Israel a defenderse,
pero dice, la guerra tiene que terminar ya.
Con un alto el fuego y la solución de dos estados.
Trump la ha acusado de odiar a Israel
y que con ella como presidenta,
el país, en dos años desaparecería del mapa.
Con él, insiste....
"Rusia nunca habría invadido Ucrania".
Con los dos minutos finales de cada candidato
terminaba, el que para muchos analistas,
será el debate más importante de la historia en EE.UU..
Esta vez sin darse la mano como al inicio
y con un apoyo público minutos después del debate,
el de Taylor Swift a Kamala Harris.
Por el contrario, Trump, según Gurpegui, "no ha mirado a Harris en ningún momento". "Ha tenido un gesto mucho más serio. Ha sido más Trump que con Biden, más vehemente, elevado el tono y con gesto de enfado. Muy a la defensiva en varias ocasiones", asevera.
En la misma línea, la investigadora principal de Estados Unidos y Relaciones Transatlánticas del Real Instituto Elcano, Carlota García Encina, cree que Harris "ha tomado la iniciativa desde el primer momento". "Lo más relevante ha sido ese lenguaje corporal, acercarse, estar mirándole durante todo el debate, mientras Trump ha decidido —o ha sido aconsejado— no hacerlo", asegura.
"Harris ha mirado a los moderadores, se ha dirigido a la audiencia. Ha sabido estar, ha transmitido esa autoridad que tiene que transmitir alguien que va a ocupar la Casa Blanca. Ha transmitido la fortaleza de ser un commander in chief (comandante en jefe), que es quien está en la Casa Blanca y eso ha quedado muy en evidencia", recalca.
Las mentiras, la base del discurso de Trump
La intervención de Trump en el debate ha estado repleta de desinformación. El expresidente republicano ha afirmado que los demócratas apoyan la ejecución de bebés después de su nacimiento. "Ahora quieren realizar operaciones transgénero a inmigrantes ilegales que están en prisión. Esto es un liberal de izquierda radical", dijo Trump en otro momento del debate.
También afirmó que el crimen "ha disminuido en todo el mundo, excepto" en Estados Unidos, o que Harris es responsable de la violencia política dirigida en su contra. "Probablemente, recibí una bala en la cabeza por las cosas que dicen de mí", aseguró en referencia a su fallido intento de asesinato durante un mitin.
Pero tal vez ningún otro tema se ha comentado más que los rumores a los que se refirió en el sentido de que los inmigrantes haitianos están robando y comiéndose mascotas en la población de Springfield, en el estado de Ohio. "En Springfield se están comiendo a los perros. La gente que llegó se está comiendo a los gatos. Se están comiendo las mascotas de la gente que vive allí", aseguró.
"La base del discurso de Trump es la mentira, porque en la lógica de los grupos cerrados de las redes, de los grupos que no tienen porosidad a otro tipo de informaciones, la mentira funciona", indica Pastor. "Trump quiso trasladar la lógica de sus mítines, la lógica de las redes, al debate. Si no se ponen freno en los debates a este tipo de mentiras, puede que muchos estadounidenses las sigan creyendo", añade.
A diferencia de los debates anteriores, los moderadores han desempeñado un papel fundamental de verificación de datos de forma instantánea, algo que García Encina define como "un elemento muy positivo". Entre otras cosas, los moderadores afirmaron que habían consultado con la Policía de Springfield y confirmaron que la noticia de que los inmigrantes se comieran a las mascotas era un bulo.
"Esto ha sido bastante importante. De hecho, hubo un momento en el que parecía que Trump estaba debatiendo contra dos personas: el moderador y Harris", comenta.
¿Habrá otro debate?
Hasta ahora, el equipo de campaña de Harris había evitado responder si aceptaría participar en otro debate presidencial. Sin embargo, casi inmediatamente después de que terminara el de este martes, el equipo de la candidata demócrata solicitó que se celebrara otro antes de los comicios.
"Bajo las luces brillantes, el pueblo estadounidense pudo ver la elección que deberá hacer en otoño en las urnas: entre avanzar con Kamala Harris o retroceder con Trump", ha dicho la jefa de campaña de la candidata demócrata, Jen O’Malley Dillon. "La vicepresidenta Harris está lista para un segundo debate. ¿Donald Trump también?", preguntaba.
Por su parte, Trump afirmó en declaraciones a los periodistas que Harris solo quería una revancha porque "perdió" en el primer debate. "Yo tengo menos disposición a hacerlo, porque tuvimos una gran noche. Ganamos el debate", ha dicho en una llamada telefónica con el programa 'Fox and Friends'.
"La primera reacción de los demócratas ha sido pedir otro debate, eso es que les ha ido bien, y están cuidando muchísimo todas las apariciones de Harris, tanto en medios de comunicación como mítines, etc.", indica Gurpegui.
"Va a depender de cómo le vaya las encuestas a Trump, si baja mucho seguramente quiera entrar en otro debate. Si siguen en empate técnico, Harris estaba un punto por delante y eso es un empate técnico, probablemente no haya debate", añade.
El apoyo de Taylor Swift a Harris, un punto a favor
Tras el debate, la cantante estadounidense Taylor Swift —que cuenta con 284 millones de seguidores en la red social Instagram—, ha anunciado su apoyo a la candidata demócrata para las presidenciales.
Lo ha hecho después de que hace unos días Trump publicara en su cuenta en Truth Social imágenes generadas con Inteligencia Artificial que mostraban a la artista de 34 años y sus seguidores apoyando al magnate neoyorquino.
"Esto me llevó a la conclusión de que necesito ser muy transparente sobre mis planes reales para esta elección como votante. La forma más sencilla de combatir la desinformación es con la verdad", ha señalado en un texto acompañado de una foto con un gato y firmado como "mujer con gato sin hijos". Se trata de un gesto sarcástico en respuesta a unas declaraciones del candidato a vicepresidente republicano, J. D. Vance, en las que menospreciaba a las mujeres que tienen gatos, pero no tienen hijos, en referencia a Kamala Harris.
"Es sorprendente la influencia que puede tener una cantante en las elecciones. Hasta 0,5 o un punto, puede significar el apoyo de Swift para un candidato, según algunos medios", señala Gurpegui". "La votación va a ser tan ajustada que cualquier bolsa de votos puede decantar estados claves como Pensilvania, Georgia o Michigan", añade.
A pesar de que todo apunta a que la vicepresidenta ha sido la gran vencedora de este debate, la historia de las elecciones en Estados Unidos indica que los candidatos que triunfan en los cara a cara, no siempre ganan las elecciones. Tanto a Trump en 2016 como a George W. Bush en 2004 se les declaró perdedores en los debates, pero finalmente fueron los que lograron llegar a la Casa Blanca.