El Arzobispado de Burgos presenta la demanda de desahucio contra las monjas de Belorado
- La medida llega cuatro meses después de que las entonces hermanas clarisas decidieran separarse de la Iglesia Católica
- El Arzobispado señala que las exreligiosas carecen de título legal para habitar los inmuebles
El Arzobispado de Burgos ha presentado este lunes la demanda de desahucio contra las exreligiosas del Monasterio de La Bretonera, en Belorado, cuatro meses después de que las entonces hermanas clarisas decidieran separarse de la Iglesia Católica, según informa la archidiócesis en un comunicado.
La demanda ha sido presentada por los servicios jurídicos en el juzgado Briviesca con el objetivo de que las "exreligiosas abandonen el Monasterio".
"Tras la investigación previa canónica, y tras agotar los recursos que les invitaban a reconsiderar su salida de la Iglesia católica, el pasado 22 de junio se declaró la excomunión y expulsión de la vida consagrada de las diez hermanas que se habían adherido al cisma. Como consecuencia, a partir de ese momento, dichas exreligiosas carecen de título legal para habitar los inmuebles pertenecientes a los monasterios que ocupaban", argumenta el Arzobispado en la nota.
La Iglesia ha destacado que ha sido "prudente" dando un tiempo de espera tras el que, "comprobado que no ha habido ningún intento de reconsideración" por parte de las monjas, "los servicios jurídicos han procedido a interponer la demanda correspondiente".
El arzobispo, por otra parte, ha informado de la denegación de la inscripción en el registro del Ministerio del Interior de las asociaciones que las exreligiosas habían constituido para transformar en asociaciones civiles las entidades canónicas de los monasterios que se niegan a abandonar.
Muestra su preocupación por el estado de salud de las monjas
El comisario pontificio, en nombre de la comisión gestora de los monasterios de monjas clarisas situados en Belorado (Burgos), Orduña (Vizcaya) y Derio (Vizcaya), todos ellos afectados por este cisma, ha expresado su preocupación por el estado de salud y cuidados de cinco de las religiosas renuentes, todas ellas de avanzada edad.
En el momento en que así sea necesario, según las mismas fuentes, la comisión gestora está preparada para atenderlas en colaboración con sus familiares y con la Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu.
Por último, la Iglesia de Burgos ha vuelto a manifestar "su disposición a ayudar en el camino de retorno a la comunión eclesial" de las exreligiosas, "donde serían acogidas con delicadeza y misericordia, a imagen de la parábola del hijo pródigo".
Las monjas manifestaron su abandono de la Iglesia Católica el pasado mes de mayo para pasar a la tutela de Pablo de Rojas y su 'Pía Unión Sancti Pauli Apostoli', cuyo fundador fue excomulgado en 2019, pero permanecieron encerradas en el convento de Las Clarisas de Belorado.