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Biden y Harris llaman a Trump por primera vez tras el presunto intento de atentado en Florida

  • La Fiscalía asegura que "no escatimará recursos" en la investigación
  • El suceso vuelve a sembrar dudas sobre la labor del Servicio Secreto estadounidense

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Biden y Harris llaman a Trump por primera vez tras el presunto intento de atentado en Florida
Las autoridades investigan las motivaciones del principal sospechoso. GETTY IMAGES NORTH AMERICA GETTY IMAGES NORTH AMERICA

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris se han puesto en contacto con Donald Trump, según ha informado la Casa Blanca. Es la primera vez que ambos llaman al expresidente y candidato republicano tras el supuesto intento de asesinato del domingo.

Harris, en una breve conversación, le ha expresado a Trump su "agradecimiento" por saber que estaba a salvo. La Casa Blanca también ha señalado que Biden llamó al expresidente para transmitirle un "sentimiento similar" al de Harris.

La Fiscalía "no escatimará recursos" en la investigación

El fiscal general estadounidense, Merrick Garland, ha prometido una investigación en la que "no escatimará recursos" en torno al presunto intento de asesinato contra el expresidente Trump en Florida, según ha recalcado este martes. El anuncio se ha producido el mismo día en que el gobernador republicano Ron DeSantis ha confirmado el comienzo de una investigación estatal.

Garland ha señalado que la división de seguridad nacional del Departamento de Justicia desempeñará un papel central en la investigación, una aseveración que deja entrever la presentación de cargos adicionales y más serios respecto a los dos relacionados con posesión de armas de fuego que por el momento afronta el sospechoso, Ryan Wesley Routh.

El Departamento de Justicia, y en especial el FBI, trabaja codo a codo con las dependencias locales en la investigación, ha comentado el fiscal general durante un evento en la sede del Departamento de Justicia, en Washington. "Todos trabajaremos juntos para determinar incansablemente la responsabilidad en este asunto", ha agregado Garland.

Este mismo martes, el gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, ha firmado una orden ejecutiva que autoriza a la Fiscalía estatal a iniciar su propia investigación, que incluso podría derivar en la formulación de cargos estatales por intento de asesinato para Routh, quien se mantiene detenido y el lunes tuvo su primera comparecencia en un tribunal federal. 

Escrutinio al Servicio Secreto estadounidense

Las autoridades investigan las motivaciones de Routh, que mostró desilusión hacia el actual candidato republicano, Donald Trump, a través de sus publicaciones en redes sociales. Routh merodeó alrededor del club de golf donde se encontraba Trump durante doce horas, y el FBI está tratando de confirmar si sabía que este iba a jugar ese día.

El Servicio Secreto, encargado de la seguridad del expresidente, no inspeccionó el perímetro del club antes de su salida, lo que ha aumentado el escrutinio hacia la agencia. El presidente Biden y el líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, han abogado por más recursos para este organismo. Schumer también ha propuesto incluir fondos adicionales en un próximo proyecto de ley.

Por su parte, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, ha elogiado al Servicio Secreto por neutralizar la amenaza y ha advertido sobre el entorno amenazante actual. Routh fue arrestado poco después de abandonar la escena, donde dejó un rifle de asalto, mochilas, una cámara GoPro y una bolsa con comida, antes de que pudiera disparar al expresidente republicano.

El pasado domingo Ryan Wesley Routh, un hombre de 58 años con antecedentes, se aproximó al campo de golf de West Palm Beach, Florida, en el que estaba jugando el magnate neoyorquino armado con un rifle AK-47 con mira telescópica. El hombre fue detectado por los agentes, que realizaron varios disparos, y le detuvieron posteriormente.

El FBI ha confirmado que lo sucedido se está investigando como un aparente "intento de asesinato".

El incidente ha ocurrido cerca de dos meses después de que Trump sobreviviera a un tiroteo en un mitin en Butler, Pensilvania, en el que el candidato republicano resultó herido de bala en una oreja y uno de sus seguidores murió.