Gisèle Pelicot califica a sus agresores de "degenerados" y asegura que "el perdón no existe" para los violadores
- El imitador de Dominique Pelicot se reconoce como un "violador criminal" en el juicio
- Las violaciones de Maréchal hacia su mujer tuvieron lugar en una decena de ocasiones entre 2015 y 2020
Gisèle Pelicot ha asegurado este miércoles que "el perdón no existe" para los violadores, negándose al mismo tiempo a aceptar que su ahora ex marido y uno de sus principales cómplices se arrepintieran de haber hecho daño a la mujer que amaban.
"Estos hombres son unos degenerados. Cometieron una violación", ha declarado Pelicot, de 72 años, ante el tribunal después de que su ex marido Dominique y el cómplice, Jean-Pierre Marechal, prestaran declaración este martes y miércoles respectivamente.
El juicio contra Dominique Pelicot y otros 50 hombres acusados de violar a su esposa en la ciudad de Aviñón, en el sur de Francia, ha conmocionado al mundo. El caso también ha desencadenado protestas en toda Francia en apoyo de Gisèle Pelicot, que se ha convertido en un símbolo de la lucha contra la violencia sexual.
"Cuando ven a una mujer durmiendo en su cama, ¿a nadie se le ocurre hacerse una pregunta? ¿No tienen cerebro?", se ha preguntado la mujer.
"Me he sentido humillada mientras he estado en esta sala. Me han llamado alcohólica, conspiradora del señor Pelicot", ha recalcado, añadiendo que su vida había quedado “destrozada” durante 10 años.
El imitador de Dominique se autodenomina "violador criminal"
Como un "violador" y un "criminal se ha reconocido este miércoles, Jean-Pierre Maréchal, el discípulo de Domninique Pelicot que, como él, drogó a su mujer para poder violarla y ofrecerla para que también otros hombres abusaran sexualmente de ella.
Estas declaraciones llegan justo un día después de que el principal acusado de este macrojuicio se hubiese catalogado a sí mismo como un violador. Ahora, Maréchal vuelve a repetir los actos de Pelicot, insistiendo en que es "un violador criminal" que cometió "actos innobles".
El imitador ha contado que conoció a Pelicot en la plataforma de encuentros coco.fr, ahora cerrada por los múltiples delitos que se han descubierto. Según ha relatado desde el banquillo de los acusados, se conectó "por casualidad" cuando consultaba sitios pornográficos y le llamó la atención una ventana emergente. Dominique Pelicot le propuso violar a su mujer, Gisèle, algo que supuestamente rechazó porque "no podía violar a una mujer que no fuera la suya".
Tal y como ha contado Maréchal, cuando su interlocutor supo que estaba casado "le convenció para drogar" a su mujer y de esa manera poder abusar de ella. "Si no hubiera conocido a Dominique Pelicot, nunca habría pasado al acto", ha asegurado el acusado.
Las violaciones de Maréchal hacia su mujer tuvieron lugar en una decena de ocasiones entre 2015 y 2020. Su marido le administraba somníferos para dormirla y violarla, siguiendo las indicaciones de Pelicot, que participó con él en los abusos. Sin embargo, el discípulo ha explicado que de la decena de veces que Maréchal drogó a su mujer, solo en cuatro o cinco los ansiolíticos tuvieron un efecto lo suficientemente fuerte como para dejarla inconsciente porque, según ha dicho, tenía miedo de darle una dosis excesiva.
Aparentemente, las violaciones cesaron un día en el que Pelicot estaba en casa del matrimonio para abusar de la mujer de Maréchal y esta se despertó. Aunque su marido le dio diferentes excusas sobre la situación, no le acabaron de convencer, según cuentan los medios franceses. Sin embargo, ella no fue más allá y ni siquiera después de que el juicio acaparase toda la atención mediática del país, ha querido denunciar y constituirse en acusación particular, como sí ha hecho Gisèle Pelicot.
Se transmitían videos en directo
En la vista de este juicio celebrado en la ciudad francesa de Aviñón, ambos acusados han reconocido que se habían trasmitido videos en directo de las violaciones que cada uno grababa por su parte. Una versión que encaja con el modus operandi de Pelicot, que durante una década documentó y guardó todas las violaciones a Gisèle en archivos de su ordenador.
De hecho, el principal acusado fue detenido en un primer momento por haber grabado debajo de las faldas a varias mujeres en un supermercado en septiembre de 2020. Luego, las autoridades francesas descubrieron todo lo que guardaba en su disco duro.
Todos estos vídeos grabados de su propia mujer serán retransmitidos en la tarde del miércoles en la sala del juicio frente a Pelicot y los otros 50 hombres implicados en la trama. Ha sido la propia Gisèle quien ha confirmado a los medios la proyección de estos vídeos. La víctima ha pedido que no se retransmitan las fotos y vídeos en sala anexa, ni que sus hijos estén presentes en el momento de la reproducción.
Ambos piden perdón a sus víctimas
Jean-Pierre Maréchal ha dicho estar arrepentido de los abusos a los que sometió a su propia mujer. "Lamento mis actos, quiero a mi esposa", ha señalado. "He hecho mal a mi ella, es muy grave", ha respondido.
La declaración también se ajusta a la que ha dado su mentor. En la sesión del martes, Pelicot ha dicho: "Soy culpable de lo que hice". También, ha reconocido que Gisèle "no se merecía esto" y le ha pedido perdón. Dominique ha dicho que se siente "avergonzado de si mismo". Es una pequeña victoria para Gisèle que decidió hacer público el juicio y mostrarse ante los medios, determinada a que "la vergüenza cambiara de bando".