El abogado de Edmundo González asegura que no se le "autorizó" a acudir a la embajada española en Venezuela

• El opositor ha admitido que "firmó bajo coacción" un documento en el que reconocía la victoria de Maduro
• La defensa considera que el documento "está viciado en su consentimiento" y es "jurídicamente nulo"

24 horas RNE - El abogado de González Urrutia asegura que no fue convocado a la embajada de España en Venezuela

El abogado del opositor venezolano Edmundo González Urrutia, José Vicente Haro, ha afirmado que no fue convocado a la embajada de España en Venezuela con su cliente, quien aseguró este miércoles que "firmó bajo coacción" un documento en el que reconocía la victoria del actual presidente, Nicolás Maduro, en las elecciones presidenciales.

González Urrutia ha admitido que, antes de salir de Venezuela, firmó un documento presentado por representantes del Gobierno chavista bajo la amenaza de que si no lo hacía se tendría que "atener a las consecuencias".

En una entrevista en 24 horas de RNE, Haro ha explicado que "no fue autorizada la asistencia de un abogado", una decisión que ha criticado dada la relevancia jurídica y las implicaciones que tenía el texto a firmar.

Haro, que considera que el documento "está viciado en su consentimiento" y es "jurídicamente nulo", ha argumentado que una persona debería tener "la libertad y la mente clara para considerar determinadas propuestas", pero que en el caso de su cliente no se le permitió contar con asesoría jurídica.

Asimismo, ha detallado la urgencia en la que sucedió todo, ya que incluso la hija mayor de Edmundo González, que permanece en Caracas, "no pudo ni siquiera despedirse de su padre". "La esposa de don Edmundo tuvo que hacer la maleta en un lapso de dos horas en una situación apremiante", ha recalcado.

Dice no saber "con precisión" qué papel jugó el embajador

Preguntado por quién fue la persona que permitió el acceso de los altos cargos chavistas a la embajada, el abogado ha considerado que fue el personal diplomático español, aunque ha reconocido no saber "con precisión" el papel que jugó el embajador Ramón Santos y ha rechazado hacer una valoración.

"Entendemos que ya tocará, como en todo sistema democrático, rendir explicaciones sobre esto. Nos queremos distanciar un poco en el sentido de que es un debate propio de los grupos parlamentarios y de la política española", ha zanjado, recordando que el asilo obliga a "no tener injerencia en los asuntos internos" de España.

No obstante, ha señalado que al tratarse de la vivienda del embajador, "debemos concluir, salvo prueba en contrario, que habría sido entonces el embajador quien autorizó la entrada de estos funcionarios del oficialismo. A partir de ahí comienzan los interrogantes de cómo se da toda esa situación. Muy opaca, muy dura", ha apuntado.