Icíar Bollaín estrena 'Soy Nevenka' en San Sebastián: "Las víctimas de acoso viven una película de terror"
- La directora ha estado acompañada de los dos protagonistas, Mireia Oriol y Urko Olazabal
- 'Soy Nevenka se estrena en cines el 27 de septiembre
Tras Maixabel (2021), Icíar Bollaín ha vuelto al Festival de San Sebastián con otra historia inspirada en un caso real: Soy Nevenka, en la que narra el infierno por el que pasó Nevenka Fernández, la primera mujer que se atrevió a denunciar a un político por acoso, al alcalde de Ponferrada Ismael Álvarez. Una película que opta a la Concha de Oro, en la que destaca el trabajo de sus protagonistas, Mireia Oriol y Urko Olazabal, y que llegará a los cines este 27 de noviembre.
Por cierto, que la propia Nevenka asisitió anoche a la premiere mundial de la película en San Sebastián, donde fue ovacionada por el público.
“La historia de Nevenka me parece muy impactante, muy potente y muy pertinente en estos momentos –nos comenta Icíar Bollaín-, sobre todo porque fue la primera mujer que denunció a un político por acoso, a su jefe, y ganó, aunque luego socialmente se quedó muy sola”.
Una película que parte del libro Hay algo que no es como me dicen (Alfaguara), de Juan José Millás. “Él fue el primero que contó la historia y el libro fue nuestro punto de partida fue el punto de partida –nos comenta la directora-. Aunque luego hicimos nuestro propio trabajo de campo, yendo a las fuentes, hablando con Nevenka y con todas las personas que la rodearon durante el proceso”.
Aunque Nevenka ganara el juicio, la condena fue la mínima y la joven se vio obligada a irse de España porque no encontró trabajo. “Ella ganó y consiguió una sentencia ratificada por el Tribunal Supremo, lo que es muy importante –afirma Icíar-. El problema es que socialmente no se entiende lo que pasa. Se la mira con desconfianza y se la juzga de una manera muy dura”.
“Mientras que Ismael Alvaréz, que era un alcalde muy popular, recibió el apoyo de su partido y de mucha gente de Ponferrada. Y esa combinación de factores dejó a Nevenka muy indefensa” -añade la directora-.
“El acoso es un proceso muy largo y muy pertinaz"
La película nos muestra cómo, en el año 2000, Nevenka Fernández, una joven de 24 años, entra como concejala de Hacienda en el Ayuntamiento de Ponferrada. Allí sufrirá la persecución implacable del alcalde, Ismael Alvárez. Finalmente, Nevenka se verá obligada a denunciar, aunque sabe que deberá pagar un precio muy alto. Una historia que convirtió a su protagonista en una pionera del movimiento #metoo.
Durante el juicio preguntaron a Nevenka por qué no se marchó cuando empezó el acoso, como si fuera algo fácil. “Esa –nos cuenta Icíar-, es una de las razones por las que también quería hacer la película: poner el foco en lo que es el acoso. Porque solemos entender un acoso como un acto individual, como un ataque… cuando el acoso es un goteo, es un proceso muy largo y muy pertinaz. Y al final se consigue que la persona ya no sea ella misma, que no tenga criterio, que esté anulada e incluso paralizada. Y eso es lo que lo que también queríamos contar en la en la película”.
No han podido rodar en Ponferrada
Icíar no ha podido rodar en Ponferrada, donde sigue Gobernando el Partido Popular. “Como alcalde, Ismael hizo cosas que le valoran mucho y parece ser que sigue teniendo mucho peso para un gobierno afín a él ahora mismo. Y no nos han dado ningún tipo de facilidades para el rodaje”.
Destacar también el lamentable papel que jugaron los medios de comunicación en el caso: “Los medios de comunicación tienen una responsabilidad porque fueron los que comunicaron la historia, pero yo creo que eran el reflejo de una sociedad que no entendía a la víctima, porque era joven y guapa y había tenido una relación con el alcalde”.
“Quizá el acoso no se entendiera en aquella época –continúa Icíar-, pero si te paras a pensar lo que significaba para una chica de esa edad plantarse en su ciudad y denunciar al hombre más poderoso de esa ciudad, fue algo enorme. Y que el titular de los Telediarios de esa época fuera el de “Trifulca sentimental en Ponferrada”. Es bestial. Nevenka también recibió el apoyo de algunos medios, pero creo que en general hubo muy poca comprensión con ella”.
La película está planteada como un thriller
Icíar Bollaín se ha planteado esta historia casi como un thriller: “Había que contarlo in crescendo, con la tensión en aumento constante, porque los acosos tienen mucho de terror psicológico, las víctimas de acoso viven una película de terror y, además, a veces en la viven en soledad, en la incomprensión de los demás. Hemos intentado transmitir al espectador esa angustia. Y creo que también es muy bonito cuando ella le planta cara”.
En cuanto a la situación actual. Icíar Bollaín opina: “Estoy convencida de que hay muchas mujeres en la situación de Nevenka y también muchos hombres que sufren algún tipo de abuso de poder. Afortunadamente creo que también tenemos más comprensión, más protocolos y más empatía. Pero queda mucho camino por recorrer”.
Mireia: “He tenido que aprender a entrar y salir de un personaje”
La de Mireia Oriol será una de las grandes interpretaciones de este año: “Ha sido un trabajo bastante duro, sobre todo las primeras semanas, cuando tuve que aprender por primera vez en mi carrera a entrar y a salir de un personaje. Porque teníamos cada día secuencias tan intensas y tan duras que me iban calando y dejando un poso. Por eso ha sido fundamental poder compartirlo con Urko y con Icíar”.
“Creo –añade la actriz-, que este rodaje ha sacado mis inseguridades y me colocado en un lugar vulnerable que como actriz. Porque creo que el miedo a ser violada, a ser acosada, es algo muy inherente en las mujeres. Y llegué a sorprenderme del miedo que tengo a ser violada en la profundidad de mi ser. Y, de repente, tener que colocarme en esa situación y con ese realismo, con tanta verdad, porque creo que era el único camino para poder contar esto. Ha sido muy duro, pero también me ha permitido aprender mucho como actriz”.
Sobre hasta qué punto se han basado en los personajes reales para su interpretación, Mireia nos comenta: “No queríamos hacer una imitación ni de Nevenka ni de Ismael, pero si fue muy importante para mi poder hablar con ella y sentir cómo había logrado, tras haber sufrido ese trauma y tener que irse de su país, superar ese trauma e incluso convertirlo en algo bonito, en algo que nacía desde el amor y la sanación. También quería compartir su historia con una sociedad que en su momento la rechazó de tal forma”.
Preguntamos a Mireia si cree que a Nevenka no le dejaron otra opción que dimitir e irse de España: “Yo creo que ella tuvo que pensárselo mucho. En la película hay un momento en el que ella dice: “Tengo que pensar muy bien, para poder ordenar esto. Porque creo que dimitir hubiera sido lo fácil. Todos la decían que no lo convirtiera en un escándalo porque la iba a perjudicar. Pero pienso que ella sentía que no había hecho nada, que era inocente, y que dimitió y lo denunció porque realmente tenía la necesidad de hacerlo. Fue un acto de supervivencia. Al final dimitió en el mismo momento que anunció que iba a presentar la denuncia. Fueron momentos muy duros, sobre todo porque la sociedad no la apoyó, pero creo que también aparecieron muchos ángeles a su alrededor”.
Urko: “Me he basado en el perfil psicológico de un maltratador”
Urko también realiza una fabulosa interpretación pasando de ese alcalde campechano a un terrorífico acosador. “Me he basado mucho en lo que es el perfil psicológico de un maltratador. A partir de ahí te das cuenta de que, siguiendo un patrón de conducta, lo primero que hacen es ser encantadores y agasajar a sus futuras víctimas. Al principio parece que, con ese encantamiento, las tienen a su merced. De esa manera, consiguen la confianza de la víctima y pueden influir sobre ella. Pero después, cuando la víctima se niega a seguir siendo agasajada, es cuando intenta recuperar, por las buenas o por las malas, a esa persona que está perdiendo. Y es ahí donde encontramos el perfil más detestable de los acosadores”.
Urko también nos ha hablado sobre el sorprendente papel de los medios de comunicación de la época, que queda reflejado en la película: El discurso que hay en la película sobre los medios de comunicación es algo sorprendente y escandaloso. Con una mirada hacia atrás nos damos cuenta de que vivíamos en una España con una herencia machista que no solo veíamos en televisión, sino que estaba en todas partes. Hasta el punto de que muchos de esos medios tuvieron la idea de poner a la víctima en el punto de mira en vez de al acusado”.
“Hoy en día –añade el actor-, parece que eso quedó atrás y que políticamente es correcto estar al lado de la víctima. Todos estamos de acuerdo en mirar por los ojos de la víctima. Yo creo que esta película habla de eso también, que el acoso es algo que no se conoce, que a veces es difícil de detectar y que hay que verlo desde dentro, para que, como sociedad, podamos avanzar detectando cada caso”.
Además de Mireia Oriol (El arte de volver, Alma) y Urko Olazabal (Premio Goya al mejor actor de reparto por Maixabel), la película tiene un excelente reparto en el que participan también Ricardo Gómez (La ruta), Carlos Serrano (La ley del mar), Lucía Veiga (Rapa), Mabel del Pozo (Los Farad, Cerdita), Luis Moreno (Vergüenza), Javier Gálego (El desorden que dejas), Mercedes del Castillo (Instinto) y Font García (Vida Perfecta, En los márgenes).
Soy Nevenka llegará a los cines este 27 de septiembre.