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El PSOE y sus socios parlamentarios piden al Senado que no permita celebrar una cumbre antiabortista

  • La Mesa del Senado había autorizado una cumbre de una red internacional antiabortista
  • Sanidad se opone a la celebración de la cumbre antiabortista

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El presidente del Senado, Pedro Rollán, en una imagen de hace unos días
El presidente del Senado, Pedro Rollán, en una imagen de hace unos días Jesús Hellín / Europa Press

El PSOE, ERC, Bildu, BNG y Junts han solicitado a la Mesa del Senado que no permita celebrar en una de las salas de la Cámara Alta una cumbre antiabortista organizada por Political Network for Values (PNfV, red política por los valores), una organización internacional de políticos antiabortistas, para el próximo 2 de diciembre.

"Por la libertad y la cultura de la vida" es el título de la cumbre, según ha avanzado en su web PNfV, organización que subraya que la defensa de la vida hay que hacerla "desde el mismo momento de la concepción" y que cita al Senado español como entidad colaboradora en el programa del evento. 

En un comunicado, el PSOE ha anunciado que ha registrado en el Senado un recurso de amparo a la Presidencia para solicitar que no se permita la celebración de la VI Cumbre Transatlántica de la PNfV, al tratarse de un asunto divisivo en la sociedad, que no debe tener lugar en la sede parlamentaria. 

El portavoz adjunto del PSOE en la Cámara Alta, Alfonso Gil Invernón, ha resaltado que se sienten "engañados" por el PP, que con su mayoría absoluta controla la Mesa, y ha retado al presidente de ese partido, Alberto Núñez Feijóo, a decir que tampoco apoya la celebración de la cumbre antiabortista en el Senado, porque si no lo hace estará "dando un altavoz a la ultraderecha".

También ERC y Bildu han pedido que se revoque la autorización porque consideran que "las actividades y mensajes de la organización son incompatibles con los valores de respeto a los derechos LGTBI, y los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y la libertad para decidir plenamente sobre su cuerpo".

Por ello, ambos partidos han registrado un escrito de reconsideración dirigido a la Mesa del Senado sobre la cesión de instalaciones de la cámara para la celebración de la "Cumbre de la Red Política de Valores".

Asimismo el BNG se ha sumado a la petición de que no se permita la cumbre en el Senado y ha presentado un escrito dirigido a la Mesa para "demandarle que anule el permiso concedido", alegando que la organización PNfV es "de probada ideología de extrema derecha y contraria a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. 

Desde la izquierda confederal, Más Madrid, Eivissa i Formentera al Senat, Compromís, Agrupación Socialista Gomera y Geroa Bai, también han exigido a la Mesa del Senado una rectificación teniendo en cuenta que los organizadores argumentan que la homosexualidad es "un trastorno mental" y que se cura con "terapia". "No se puede dar cabida a una entidad que está en contra de los principios y derechos fundamentales de nuestro Estado de Derecho", alertan. 

Junts ha sido la última formación en presentar un escrito dirigido a la Mesa solicitando la "reconsideración" de la autorización a PNfV para celebrar su cumbre en el Senado porque "se opone a los derechos de las mujeres". 

A su juicio, el Senado "no puede legitimar los objetivos de dicha organización, ni normalizar actos que van en contra de la igualdad", pues permitiendo la celebración de la cumbre, la Cámara Alta "participaría activamente de un lavado de imagen injustificable", por lo que cree que "no se debe permitir" que se presente como "entidad colaboradora" del evento promovido por "un grupo que fomenta el odio y la discriminación".

Cumbre de una organización de extrema derecha

La red PNfV está presidida por el fundador del Partido Republicano de Chile, José Antonio Kast, y su presidente de honor es el exministro y exeurodiputado del PP Jaime Mayor Oreja. 

En su Consejo Asesor figuran parlamentarios de Colombia, México, Brasil, Uruguay, Hungría, Polonia, Irlanda, Eslovaquia, Croacia y Kenia, entre otros países, de formaciones de extrema derecha.

Uno de los puntos del decálogo de PNfV es que "la defensa de la vida debe llevarse a cabo desde el mismo momento de la concepción, donde el ser humano se encuentra más vulnerable e indefenso". 

Autorizada en julio por la Mesa

La autorización para ceder una sala a esa organización fue aprobada por la Mesa del Senado el 17 de julio, según figura en el acta de la sesión, junto a otras cesiones de espacios de la sede parlamentaria, como a menudo hace la Cámara Alta a entidades que lo solicitan. 

En la autorización, según el acta, únicamente se añade que se hará "sin que se generen gastos a cargo de la Cámara y sin perjuicio de la posterior fijación de la fecha de celebración del acto", ya que la fecha de diciembre no figuraba en la autorización hecha en julio. Fuentes parlamentarias han indicado que esa autorización se hizo por unanimidad en esa sesión de la Mesa.

En la Mesa del Senado, el PP tiene mayoría absoluta, con cuatro representantes, pero también el PSOE tiene representación, con tres. Eso sí, según aseguran fuentes socialistas ese punto no estaba en el orden del día, ni se debatió ni se votó, por lo que niegan que sus senadores votasen a favor. 

Además, los socialistas alegan que el acta de aquella reunión de Mesa no fue conocida por los miembros del órgano de gobierno hasta la víspera de la reunión del 3 de septiembre, en la que, según remarcan, los senadores del PSOE expresaron en su voto en contra de ese acta por "no compartir su contenido", pero gracias a la mayoría absoluta del PP fue aprobado. 

Sanidad se opone a la cumbre también

Por su parte, la Ministra de Sanidad, Mónica García, ha mostrado su oposición al desarrollo en el Senado de la cumbre en cuestión. "La gente no está preocupada por el problema del aborto en España", ha afirmado la ministra en declaraciones a Radiocable.com, donde ha lamentado que los 'populares' traten nuevamente de meter "fanatismos" y el "ideario de una minoría social" con "calzador" en las instituciones públicas de todos.

"Yo creo que es un ejemplo de filibusterismo más del Partido Popular y de uso torticero del Senado y de las instituciones públicas. Si quieren hacer una cumbre antiabortista, que la hagan en Génova 13, (...) y que no utilicen las instituciones que son de todos para intentar socavar un derecho conquistado de las mujeres y de la sociedad", ha añadido, lamentando que el PP se retrotraiga a "tiempos pretéritos" porque "no tienen nada más que hacer en el Senado".

Asimismo ha rechazado que el debate vuelva a centrarse en "los cuerpos de las mujeres, las vidas de las mujeres, a las decisiones de las mujeres" porque, "hace mucho tiempo, que la sociedad decidió que las mujeres tienen derecho a abortar". Y ese derecho, ha recordado, debe ser "en condiciones de seguridad".

Por lo tanto, es un debate que, a su juicio, "no puede volver". "Quien quiera volverlo a atraer es porque quiere volver a atraer sufrimiento, más sufrimiento sobre las mujeres, y más sufrimiento sobre una sociedad que tiene que hacerse cargo de una realidad, y es la realidad de las interrupciones voluntarias de la embarazada, y que deben hacerse en la sanidad pública" porque es el lugar" más garantista" y de" mayor confianza" para las mujeres.

Finalmente, respecto al borrador de protocolo para el registro de personas objetoras en las interrupciones voluntarias del embarazo, García ha rechazado que se trate de "una lista negra". "Las instituciones, los hospitales se tienen que hacer cargo de los derechos de salud sexual y reproductiva de las mujeres. Y no pueden encogerse de hombros y decir, no, esto no me toca", ha aclarado.