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Barómetro sanitario CIS

La media de espera para ir al médico de cabecera crece hasta los 8,81 días

  • El dato se desprende del último Barómetro sanitario, realizado en julio entre el Ministerio de Sanidad y el CIS
  • Un tercio de la población cree que la sanidad se mantiene con las cotizaciones

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Urgencias del Hospital San Pedro (La Rioja).
Urgencias del Hospital San Pedro (La Rioja). EUROPA PRESS

8,81 días. Es la espera media que asumen los españoles para ver a su médico de cabecera, según la segunda oleada del Barómetro Sanitario 2024. El dato releva una ligera subida, de cerca de medio punto, con respecto al último informe de abril, realizado por el Ministerio de Sanidad y el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). 

Tras entrevistar a más de 2.600 personas durante el mes de julio, un 25% asegura esperar entre uno y tres días para conseguir una cita con atención primaria, algo menos que en el último barómetro. También disminuye ligeramente la cantidad de personas que afirman esperar 11 días o más (21,7%). Sí aumenta el porcentaje en el caso de aquellos pacientes que aguantan entre cinco y diez días (43,8%).

En cuanto a las visitas a un especialista, un tercio de la población tiene que esperar más de tres meses hasta que acude finalmente a la consulta tras ser derivado, cerca de siete puntos menos que hace unos meses. Por ende, aumenta entre aquellos que esperan entre uno y tres meses (42%) y menos de un mes (22%).

Un tercio cree que la sanidad se mantiene con las cotizaciones

El funcionamiento del sistema sanitario público 'aprueba', con un 6,35 sobre 10. En esta ocasión, el barómetro también ha preguntado acerca de la percepción que tiene la población sobre la igualdad en el trato. En general, la mayoría no percibe discriminación por razones socioeconómicas, de edad o nacionalidad, pero un 37,7% sí cree que hay diferencias en los servicios recibidos según la comunidad autónoma de residencia. 

Por otro lado, un 35% de los encuestados señala la capacidad de manejo de las nuevas tecnologías como una posible barrera de acceso en la igualdad de acceso a la sanidad. En este sentido, el Barómetro revela que el 40,1% de la población accede a su historia clínica electrónica, mientras que un 59,8% aún no lo ha hecho. De estos últimos, un 34,5% desconoce que existe esa posibilidad y un 20,1% no sabe usar Internet o no tiene acceso a la red.

Por otro lado, desde 1997, la sanidad pública se financia con los impuestos generales. Un 46,2% de la población cree que es así, pero un 34,8% asegura que sigue manteniéndose a través de las cotizaciones de los trabajadores y un 14,2% que es posible con ambas modalidades.

Las urgencias del 061 y 112 repiten como los servicios mejor valorados

Un 55,8% de los encuestados asevera que el sistema sanitario funciona bien, apenas un punto de diferencia con respecto a la primera oleada. El segmento que más crece es el que cree que funciona, aunque son necesarios algunos cambios (43,7%), y desciende el que considera que funciona mal, que pasa de un 16,2% a un 14,9%.

Una edición más, entre los servicios mejor valorados se encuentran las urgencias del 061 y el 112, con 7,48 sobre 10. Le sigue a cierta distancia el ingreso y la asistencia en los hospitales, con un 7,22. Por debajo del 6 se sitúan a la atención primaria (6,34), las urgencias en atención primaria (6,26) y la atención especializada, que no llega al 6.

Un 19% reconoce haber acudido a un profesional de salud mental

El Barómetro ha decidido realizar más preguntas sobre un tema del que cada vez se tiene más conciencia: la salud mental. Un 19,2% reconoce haber acudido a un profesional en el último año; en más de la mitad de los casos había recurrido a personal sanitario público, un 42,4% dentro del ámbito privado y un 2,4% con ambas modalidades.

Dentro del sistema público, un 22,7% consiguió cita en menos de 30 días, el 44,4% en un plazo entre uno y tres meses, y otro 23,8% tardó más de tres meses para ser atendido en consulta. En general, un 79,8% consideran que la atención fue satisfactoria y un 46,3% apunta a que fue mejor de la esperada.