Decenas de personas siguen acampadas frente al Ayuntamiento de Valencia en protesta por la vivienda

• La acampada arrancó el sábado de manera espontánea tras una manifestación por la vivienda digna
• Una treintena de tiendas de campaña ocupan la plaza del Ayuntamiento por tercera noche consecutiva este lunes

Decenas de personas acampan frente al Ayuntamiento de Valencia en protesta por la vivienda

Varias decenas de personas que participaron en la manifestación desarrollada en la tarde del sábado en Valencia por una vivienda digna, convocada por el movimiento València no està en venda, continúan acampadas frente al Consistorio de la ciudad para proseguir así con su reivindicación.

Por segundo día consecutivo, la Plaza del Ayuntamiento ha amanecido con una treintena de tiendas de campaña, con manifestantes que pretenden "dar continuidad a las demandas de la manifestación de este sábado, que se agrupan en tres ejes: la defensa del territorio, la defensa de la vivienda y en contra de la turistificación".

Los participantes de la acampada dormirán allí este lunes por tercera noche consecutiva. Así lo ha confirmado a EFE una de las portavoces de la acampada, Marta Sanchis, quien ha explicado que se ha decidido esta tarde en la asamblea que cada día celebran sobre las 18.00 horas.

Las 23 tiendas de campaña que se montaron la primera noche, cada una ocupada por dos o tres personas, han aumentado, uniéndose más manifestantes a la protesta, y se han organizado en comisiones de trabajo.

Según informaron este sábado desde València no està en venda, la acampada surgió "de forma autónoma" y espontánea, tras la movilización de esa misma tarde, cuando varias personas instalaron tiendas de campaña en la plaza para exigir el cumplimiento de sus demandas.

Los acampados reciben a lo largo del día numerosas muestras de solidaridad de conocidos o de espontáneos que se acercan y les entregan todo tipo de enseres -productos de higiene, entre otros- y comida.

Las reivindicaciones de los manifestantes

Marta, una de las personas acampadas, ha explicado que con la protesta quieren exigir "la regulación de los alquileres y la paralización de los desahucios", al tiempo que ha hecho alertado de que "el 30% de las casas que se compran son con capital extranjero". "Se pueden hacer las cosas, pero hace falta voluntad política", ha declarado.

Asimismo, ha criticado las medidas anunciadas por el Gobierno, pues, a su juicio, son "parches" que "no llegan a donde realmente tienen que llegar". En este sentido, ha lamentado que "no todo el mundo" puede solicitar las ayudas al alquiler porque "no todo el mundo tiene contratos de alquiler", y ha señalado que estas medidas "lo único que provocan es una subida todavía más grande de los precios".

Otra de las acampadas, Irene, ha reclamado, también, que se declare València como zona tensionada, pues ha afirmado que en aquellos barrios donde "sufren una problemática más grave de la turistificación" se viven "dificultades incluso a nivel de salud", problemas por aumento del sonido y también de salud mental.

Finalmente, sobre los problemas de acceso a la vivienda que tienen los jóvenes en València, Irene ha subrayado que "no es una cuestión que se reduzca a la población joven de esta ciudad".

La acampada arrancó tras una manifestación el pasado sábado, en la que varios miles de manifestantes -unos 15.000 según la Delegación del Gobierno- recorrieron el sábado por la tarde el centro de Valencia para reivindicar el derecho a la vivienda y contra la turistificación de la ciudad bajo el lema 'València s'ofega', que rememora la riada que inundó la ciudad el 14 de octubre de 1957.

Los convocantes reclamaron, entre otras cosas, la creación de un parque de Vivienda de Protección Oficial o la paralización de la venta residencial al capital extranjero. Asimismo, pidieron que se prohíban los apartamentos turísticos y que se deje "de apostar por el turismo como motor económico, y parar la entrada de cruceros y las ampliaciones del puerto y el aeropuerto".