Tierras raras: el petróleo del siglo XXI dominado por China
- Las tierras raras, un elemento imprescindible en la economía verde: "Un generador eólico puede tener 250 kg"
- Fin de Mes, el programa de Daniel Hernández Baldó que se emite de lunes a viernes a las 18:08 en Radio 5
Para ser sinceros, las tierras raras no son ni tierras ni raras. Lo primero se explica rápido: “son óxidos” que se extraen de minerales críticos, dice Ricardo Prego, investigador del Instituto de Investigaciones Marinas del CSIC y autor del libro Las tierras raras (QUE SABEMOS DE?). Lo segundo en realidad tampoco es difícil de desmentir: no son elementos tan raros, los hay en abundancia, pero los explota casi en exclusiva China.
Las tierras raras son, como se ha señalado, unos óxidos “de unos diecisiete elementos de la tabla periódica”. Su descubrimiento data de finales del siglo XVIII, pero el uso comenzó a extenderse a partir de los años 60. “Entraron en nuestra vida para dar color a los televisores en blanco y negro”, dice Prego en Fin de mes, el programa de economía de Radio 5, Todo Noticias.
Pero ahora hablamos mucho más de esos elementos porque el uso está muy extendido. Por ejemplo, “en los imanes corrientes que podemos tener en los motores de las neveras de nuestras casas”, señala Prego. Hasta ahí todo en orden. Lo que hace más cruciales las tierras raras es su condición de elemento imprescindible en la economía verde. “Un generador eólico puede tener 250 kg de tierras raras”, apunta el científico del CSIC y añade: “cada año se usan un 5% más de ellas”.
Según los expertos, desarrollar la economía verde también puede generar problemas al ecosistema. “Las tierras raras tienen un componente contaminante en el proceso y también en los minerales”. Lo más grave es la posibilidad de contaminación radiactiva fruto del desecho de materiales producidos del subsuelo como el torio y el uranio, lo que anula la posibilidad de producción agrícola del entorno. “Se puede hacer un procesado no dañino con el medio ambiente”, dice Prego, “pero incrementa los precios”. El científico recomienda “estudiar cada caso y cada mina”.
Para Ester Boixereu, especialista del Instituto Geológico y Minero de España, en declaraciones a Fin de mes, la minería destinada a la obtención de tierras raras tiene “el mínimo impacto ambiental posible”. Boixereu sugiere que hay que tener en cuenta que cualquier proyecto “tiene informes de impacto ambiental muy rigurosos”.
Situación en España
En España no se extrae ni un solo gramo de estos elementos, a pesar de que contamos con ellos y con los minerales de los que se consiguen. “Los yacimientos de litio se encuentran en el sector oeste de España, la mayoría están entre Cáceres y Salamanca”, dice Boixereu. En los años 80 “se determinó que la zona sur, la zona en la que limitan Castilla-La Mancha y Andalucía, tenía un potencial muy grande”.
El proyecto que más cerca estuvo se situó en el Campo de Montiel, en Ciudad Real. Lo desarrollaba la empresa Quantum Minería y levantó el rechazo de los vecinos de la zona. Finalmente, la justicia lo tumbó, aunque ahora la empresa trata de resucitarlo con cambios.
El dominio de China
Las tierras raras son una prioridad desde que Deng Xiaoping, el autor del giro hacia el socialismo de mercado e impulsor del enorme crecimiento chino, llegó al poder a finales de los 70. “El líder de la reforma dijo aquello de que ‘medio oriente tiene el petróleo, pero nosotros tenemos las tierras raras”, señala en Fin de mes el investigador en economía política internacional de la Universidad Camilo José Cela de Madrid, Juan Vázquez.
La cuestión es que China tiene los elementos en su territorio, pero, como se ha visto en el caso de España, no es suficiente. “Tienen los recursos y han invertido en gran medida en avances tecnológicos”, además “han tenido mano de obra barata y, al principio, una legislación laxa con el medio ambiente”, dice Vázquez.
China además tiene la capacidad de refinar y las tecnologías desarrolladas para intervenir en todo el proceso. Vázquez señala un ejemplo con minerales necesarios para las tierras raras: “el 70% del cobalto mundial sale de la República Democrática del Congo, pero China refina más del 70% y muchas empresas del país asiático están allí controlando el proceso y exportando la materia”.