La DANA se disipa tras dejar inundaciones en Andalucía y Valencia pero ninguna víctima mortal gracias a la prevención

• Lo peor de este fenómeno meteorológico ya ha pasado, según la Aemet, y las medidas preventivas han funcionado
• Sigue la última hora de las inundaciones provocadas por la DANA | Cómo ayudar a las víctimas

La DANA se disipa tras dejar inundaciones en Andalucía y Valencia

La nueva DANA se ha disipado después de dejar inundaciones de distinta intensidad en Andalucía y Valencia, donde ya no hay ninguna zona en alerta roja tras haberse mantenido hasta esta mañana. Lo peor de este fenómeno meteorológico, que ha llegado dos semanas después de la gota fría más devastadora de las últimas décadas, "ya ha pasado", según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), y las medidas de prevención han funcionado, ya que esta vez no ha habido víctimas mortales.

La provincia de Málaga, epicentro del temporal y donde el miércoles se activó el aviso rojo por fuertes lluvias, recupera la normalidad poco a poco. Sin embargo, más de 3.000 desalojados no volverán todavía a sus hogares por prevención y las clases han permanecido suspendidas durante toda la jornada. Tampoco han abierto los centros educativos de otras provincias andaluzas como Cádiz y Sevilla, donde había avisos naranjas que ya han sido desactivados, aunque la alerta amarilla continúa activa en Huelva, tanto en el litoral como en el interior.

En la Comunidad Valenciana, la Aemet ha desactivado los avisos naranjas por precipitaciones, después de que a primera hora de este jueves quitara los avisos rojos. La Generalitat ha adelantado el fin de las restricciones excepcionales y la alerta amarilla solo permanece activa en el litoral sur de Valencia y Alicante.

Lluvias torrenciales y desbordamientos en Andalucía

Los principales incidentes de la jornada han tenido lugar en la localidad gaditana de Jimena de la Frontera, en la comarca del Campo de Gibraltar, donde se han desalojado viviendas y al menos seis personas han tenido que ser rescatadas de tejados por las autoridades tras el desbordamiento del río Guadiaro. También se han desbordado los ríos Benamargosa, Vélez y Guadalhorce en Málaga, lo que ha provocado inundaciones en calles y viviendas anegadas.

Tanto la capital como municipios malagueños como Benamargosa o Almayate han sufrido cierres de carreteras, suspensión del servicio de transportes e incluso cortes de luz y agua como consecuencia de las lluvias torrenciales. En la localidad de Alfarnatejo se han acumulado durante el medio día 36,8 litros por metro cuadrado, mientras que en la depuradora del Atabal durante el mismo periodo ha alcanzado más de 60 litros por metro cuadrado. En Coín, también han caído más de 100 litros por metro cuadrado, según ha informado su alcalde.

Sin embargo, a lo largo de la jornada se ha restablecido la normalidad en la provincia, donde se ha desactivado el Plan de Emergencias Municipal de forma total, pasando a parcial. Los comercios han vuelto a abrir sus puertas y los transportes funcionan con normalidad, incluidos los servicios de alta velocidad, que permanecían suspendidos desde el miércoles por el aviso rojo de la Aemet.

Además, los 180 vecinos de la zona cercana al río Campanillas ya pueden volver a sus hogares. Los habitantes de la ribera del Guadalhorce aún no pueden regresar a sus casas, ya que, según las autoridades, allí no se dan las condiciones suficientes de seguridad.

"Más vale prevenir que curar", ha dicho el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, sobre las medidas preventivas ante algunas quejas provenientes de los rincones donde no ha llovido, pero ha insistido en que se ha hecho por prevenir a la población.

Las localidades granadinas de Almuñécar y Motril se recuperan de las incidencias causadas por las precipitaciones y han comenzado las tareas de limpieza del barro en las calles más afectadas, que se concentran en las inmediaciones de las desembocaduras del río Jate y del río Seco.

Respiran aliviados en Valencia

En Valencia, donde todavía se recuperan de la violenta DANA que dejó hace dos semanas más de 200 muertos, respiran aliviados. La Generalitat ha adelantado de las 23:59 horas a las 12:00 horas el fin de las restricciones excepcionales decretadas el miércoles en 163 municipios ante el aviso por fuertes lluvias. El nivel de alerta se ha reducido y con él, los riesgos de este segundo temporal que ha pasado por la misma zona que la DANA del 29 de octubre, por la que llegaron a recogerse más de 800 litros en 24 horas en varios puntos de la provincia.

Aunque se activó la alerta roja en todo el litoral —ahora continúa activa la amarilla en la costa de Valencia y Castellón— y los ciudadanos han recibido un aviso en sus teléfonos, las lluvias no han llegado a intensidades extremas. Sin embargo, miles de personas siguen desalojadas y esta nueva DANA, que ha puesto en alerta a la población, ha ralentizado los trabajos de limpieza y recuperación.

"A la mínima alerta que nos dan, claro, estamos asustados", aseguraba a TVE una de las vecinas de Paiporta, donde los vecinos llevan dos semanas retirando el barro. "No salí de casa en todo el día", ha afirmado otro vecino, porque tal y como ha lamentado a las cámaras del Telediario un tercer habitante de esta localidad, temen "que se vuelva a repetir otra vez" la catástrofe y más aún ante el colapso de la mayoría de alcantarillas por el lodo.

La mejora de las condiciones meteorológicas, sin embargo, ha permitido una relativa vuelta a la normalidad. Las líneas de Alta Velocidad Madrid-Valencia funcionan de nuevo tras dos semanas suspendidas y han salido los primeros trenes de Madrid con destino Valencia. También ha vuelto a funcionar el tramo a Málaga, que se vio interrumpidos el miércoles y se ha recuperado la conexión entre Barcelona y Valencia con trenes Euromed e Intercity.

Asimismo, han abierto de nuevo algunos tramos de carreteras, como la CV-390, devolviendo la movilidad de la comarca de Los Serranos; o la A-7, entre Quart de Poblet y Torrent, que vuelve a abrir en ambas direcciones. Otras, como la CV-36, desde Picanya hasta el enlace con la A-7; CV-42, en el Raval, la CV-50, en Chiva y la CV-336, en Riba-roja de Túria continúan intransitables.