Enlaces accesibilidad

SpaceX culmina con éxito su sexto lanzamiento de la nave Starship

  • En esta ocasión se decidió no recuperar el cohete propulsor Super Heavy, que cayó sobre el golfo de México
  • El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, asistió a la prueba junto con Elon Musk

Por
Cohete Starship.
Lanzamiento del cohete Starship desde la base de SpaceX ubicada en Boca Chica, cerca a la frontera con México. AP PHOTO / ERIC GAY

La compañía aeroespacial SpaceX ha culminado con éxito la sexta prueba del Starship, el mayor cohete espacial jamás construido, bajo la atenta mirada del consejero delegado de la empresa, Elon Musk, y del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump. El cohete, despegó sobre las 16:00 hora local (22:00 GMT) desde Starbase, la base ubicada en Boca Chica, en Texas, muy cerca a la frontera con México.

A diferencia del quinto lanzamiento, en esta ocasión los ingenieros de SpaceX decidieron no intentar recuperar el cohete propulsor de la nave - conocido en inglés como Super Heavy- sino que lo dejaron caer sobre el golfo de México. Los ingenieros de la compañía aún no han explicado por qué se dio esta diferencia entre este lanzamiento y el anterior, y en las imágenes transmitidas en vivo se observó como el propulsor cayó lentamente sobre el océano, provocando una nube de humo al tocar el agua.

Por su parte, el Starship aterrizó intacto, a pesar de haber perdido parte del material protector que recubría al cohete durante el descenso.

En la quinta misión de prueba, efectuada el pasado 13 de octubre, el 'Super Heavy' fue capturado en una plataforma, con la ayuda de una grúa llamada 'chopsticks' (palillos) para facilitar su descenso.

Servicios privados a la Luna y Marte

El Starship quiere convertirse en el primer servicio privado que llegue a la Luna y Marte y establezca presencias permanentes y colonias en esos planetas, una visión considerada viable por Musk.

De lograr las certificaciones de la NASA, Starship formará parte de la misión Artemis III, la primera en más de medio siglo que devolverá una tripulación a la superficie lunar y que está prevista para 2026.

Tras el lanzamiento, Musk, dueño de SpaceX, se acercó al futuro presidente Trump para explicarle, mirando al cielo, algunos de los detalles de la prueba.

"Me dirijo al Gran Estado de Texas para ver el lanzamiento del objeto más grande jamás lanzado, no solo al espacio, sino simplemente despegando del suelo. ¡Buena suerte a Elon Musk y a los Grandes Patriotas involucrados en este increíble proyecto!", apuntaba unas horas antes el expresidente republicano.

Críticas desde el ecologismo

Varios grupos ambientalistas han criticado los lanzamientos del Starship desde Boca Chica, al igual que la actividad de SpaceX en la región, dada la cercanía a un parque nacional y refugio de vida silvestre donde habitan varias especies en vía de extinción.

En julio de este año, un puñado de organizaciones en defensa del medio ambiente pidieron al Gobierno federal que prohibiera los lanzamientos de cohetes de SpaceX y acusaron a las agencias federales de no haber evaluado adecuadamente el impacto ambiental de la empresa de Musk.

El multimillonario, quien dio apoyo financiero y político a la candidatura del futuro presidente Trump, se ha posicionado en contra de las agencias regulatorias del Gobierno y liderará una iniciativa -encargada por el republicano- para acabar con la "burocracia" federal.