Los países menos desarrollados se levantan de la mesa de negociación en un final agónico de la COP29
- La cumbre de Bakú llega a un bloqueo total más de un día después de su cierre teórico
- "Bakú no se puede convertir en un Copenhague", asegura un negociador, comparándolo con el gran fracaso de 2009
La cumbre del clima se adentra en el fin de semana con un bloqueo total en las negociaciones. Los países menos desarrollados y los pequeños Estados insulares se han levantado de la mesa de negociación este sábado en protesta por un compromiso insuficiente en materia de financiación climática -tema central de esta cumbre- y por considerar que han sido excluidos del proceso.
"No se sienten incluidos en la negociación", ha explicado a RTVE.es la ministra de Ambiente de Colombia, Susana Muhamad, presente en las conversaciones a puerta cerrada. La propuesta en este momento encima de la mesa, apoyada por los países ricos, es que estos donen 300.000 millones de dólares anuales a los menos desarrollados de aquí a 2030 para hacer frente a los efectos del cambio climático, lo que los países del sur ven insuficiente.
"Tenemos un problema, pero espero que podamos llegar a un acuerdo", ha reconocido Muhamad, que ha enfatizado la necesidad de llegar a un acuerdo. "En el detalle hay mucha discusión, pero la gran lucha es la cifra", ha explicado por su parte el negociador de Panamá, Juan Carlos Monterrey.
"Bakú no se puede convertir en un Copenhague"
En la misma línea, ha señalado: "Necesitamos un acuerdo, Bakú no se puede convertir en un Copenhague porque eso sería una herida fatal al multilateralismo climático y también al planeta". Se refiere así al gran fracaso de las cumbres del clima, el de la COP15 celebrada en 2009 en la capital danesa, de donde tendría que haber salido un texto equivalente al Acuerdo de París que se alcanzó seis años después.
"El texto está avanzado en muchos aspectos, pero es el proceso el que está generando insatisfacción. Espero que podamos avanzar, pero es decepcionante", ha afirmado Muhamad, destacando una frustración compartida por muchos negociadores con la Presidencia de la cumbre, en manos de Azerbaiyán.
Monterrey también ha calificado el proceso de negociación de "caótico" y ha lamentado la "falta de transparencia".
Los países en desarrollo reclaman 500.000 millones
La COP29, que se celebra en Bakú (Azerbaiyán), debería haber terminado oficialmente el viernes a las 18:00 hora local (tres horas menos en España) pero la falta de acuerdo ha provocado que la negociación siga agónicamente en las últimas horas.
Por su parte, el G77+China, grupo negociador de países en desarrollo, ha puesto encima de la mesa una cifra mayor, de 500.000 millones de dólares, según el negociador panameño. "Lo que nosotros estaríamos buscando como Panamá es entender qué les haría verse reflejados", ha apuntado.
Antes, los activistas habían denunciado la "intransigencia" de los Estados ricos a la hora de comprometerse a entregar una cantidad suficiente de dinero a los países más vulnerables para adaptarse a los efectos extremos del cambio climático y reducir sus emisiones.
Desde la coalición global de entidades ecologistas Climate Action Network (CAN) han entregado a los negociadores de los países del sur global una carta en la que les muestran su apoyo en estas horas finales de negociación y, al mismo tiempo, les reclamaban precisamente que se levantaran de la mesa si el norte no pone más recursos sobre la mesa. "Un no acuerdo es mejor que un mal acuerdo".