Guterres celebra el acuerdo alcanzado en la COP29 de Bakú aunque esperaba "un resultado más ambicioso"

• "Llegar a un acuerdo en la COP29 era esencial para mantener vivo el límite de calentamiento global de 1,5ºC", ha destacado
• El secretario ejecutivo de la Convención de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático: "Protegerá miles de millones de vidas"

El secretario general de la ONU, António Guterres, en Bakú. Bianca Otero/ZUMA Press Wire/dpa

El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, se ha mostrado satisfecho por el acuerdo financiero alcanzado este domingo entre los países representados en la COP29 de Bakú (Azerbaiyán), por el cual los países ricos se comprometen a pagar 300.000 millones de dólares anuales el mundo en desarrollo para costear la acción climática.

"Llegar a un acuerdo en la COP29 era esencial para mantener vivo el límite de calentamiento global de 1,5ºC", ha señalado en su cuenta oficial de X.

Según Guterres, hubiera sido necesario un resultado más ambicioso, "tanto en materia financiera como de mitigación", para el desafío climático, pero ha considerado que "el acuerdo alcanzado proporciona una base sobre la cual construir".

Redoblar los esfuerzos de cara a la COP30 de Belém (Brasil)

Por su parte, Simon Stiell, el secretario ejecutivo de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC, por sus siglas en inglés), ha expresado la dificultad que ha supuesto alcanzar este acuerdo en la cumbre, pero ha calificado de "póliza de seguro para la humanidad" el nuevo objetivo de financiación conseguido en la capital de Azerbaiyán.

"Este acuerdo mantendrá el auge de las energías limpias y protegerá miles de millones de vidas. Ayudará a todos los países a compartir los enormes beneficios de una acción climática audaz: más empleo, mayor crecimiento, energía más barata y limpia para todos", ha destacado. Sin embargo, Stiell ha advertido de que este tipo de póliza de seguro solo funciona "si las primas se pagan íntegramente y a tiempo".

Por último, ha subrayado que ningún país ha conseguido todo lo que quería y que queda mucho trabajo por delante y, por lo tanto, hay que redoblar los esfuerzos de cara a la COP30 que se celebrará en Belém (Brasil) el próximo año.