La Fiscalía francesa pide 20 años para Dominique Pelicot, la máxima pena posible por violación
- Aunque es la pena máxima, la propia Fiscalía la considera "demasiado poco"
La Fiscalía francesa ha pedido 20 años de cárcel para Dominque Pelicot acusado de violar y drogar a su exesposa, Gisèle Pelicot, y organizar que otros 50 hombres más abusaran de ella durante casi diez años. Aunque es la pena máxima, la propia Fiscalía la considera "demasiado poco".
La fiscal del Tribunal de Apelación de Aviñón (sureste de Francia), Laure Chabaud, ha pedido esa pena "con la mayor convicción", y lo ha justificado por la psicología de Dominique Pelicot, al que ha descrito como un hombre perverso, egocéntrico, perturbado, con múltiples desviaciones sexuales que quiso satisfacer sus deseos sin poner "ningún límite" y sin el consentimiento de la víctima. Por otro lado, para una primera tanda de acusados, que incluye a 21 de los 50 señalados de haber abusado sexualmente de ella, ha solicitado penas de entre 4 y 20 años de prisión.
Este lunes, Día Internacional contra la Violencia contra las Mujeres, la Fiscalía ha insistido en su alegato que la mujer no dio su consentimiento en ningún momento y en que fue reducida a "un objeto" por los agresores. "Gisèle Pelicot fue reducida a un objeto. El consentimiento no estuvo presente ni antes ni durante el acto", ha señalado el fiscal Jean-François Mayet al comienzo de su requisitoria ante el Tribunal de lo Criminal de Aviñón, al sureste de Francia.
Mayet ha denunciado la "degradación humillante" que sufrió Gisèle Pelicot a lo largo de casi 10 años, el tiempo en el que su marido de entonces, violador confeso de 71 años, la drogó con somníferos para dejarla completamente inconsciente e inerte y así poder abusar sexualmente de ella y ofrecerla a decenas de hombres.
El representante del Ministerio Público ha señalado el carácter "extraordinario" de este proceso iniciado el pasado 2 de septiembre, en el que se juzgan unos hechos de "gravedad inimaginable".
20.000 documentos visuales evidencian la "extrema violencia de los crímenes"
Dominique Pelicot, que reconoce las acusaciones, tomó miles de fotos y vídeos de las violaciones, documentos que se han convertido en la prueba clave para condenar a estos hombres, que en su mayoría niegan los hechos.
En total, son 20.000 documentos visuales, recordó el fiscal, que ponen en evidencia la "extrema violencia de los crímenes".
Los hechos que se juzgan se prolongaron entre julio 2011 y octubre de 2020, primero en la región parisina y más tarde en la casa a la que los Pelicot se habían mudado al jubilarse en la localidad de Mazan, cerca de Aviñón.
Dominique Pelicot entraba en contacto con otros hombres en una plataforma en línea y los invitaba a su domicilio, tras administrar a su víctima grandes dosis de ansiolíticos, que la dejaban inconsciente, lo que les permitía abusar de ella sin que guardara ningún recuerdo.
Todo terminó en septiembre de 2020 cuando él fue detenido por grabar bajo las faldas de unas mujeres en un supermercado de Carpentras y al registrar sus archivos informáticos los investigadores descubrieron miles de vídeos y fotos en los que aparecían las violaciones a las que sometió a la víctima.
Dominique Pelicot explicó en su última declaración el pasado martes que el motivo por el que drogó a su entonces mujer para violarla y ofrecerla a numerosos hombres durante diez años fue que quería "someterla sin hacerla sufrir".
"Someter a una mujer insumisa era mi fantasía", indicó este hombre, que está acusado también de la violación y el asesinato de una mujer en 1991 y de otra tentativa de violación con arma blanca en 1999.
Durante el proceso, Gisèle Pelicot aseguró sentirse "completamente destruida" tras descubrir que fue víctima de violaciones sistemáticas durante casi una década. "No sé cómo me voy a levantar. No sé si mi vida dará para entender todo lo que me ha ocurrido", admitió el pasado 23 de octubre.
Gisèle, símbolo del feminismo
Esta mujer de 71 años ya es un auténtico símbolo para el feminismo mundial, tras decidir que este juicio fuera público "para que la vergüenza cambie de bando" y que nunca más sean las víctimas las señaladas por haber sido violadas, sino los agresores.
Este sábado se volvieron a producir nuevas manifestaciones en toda Francia que reunieron a miles de personas en apoyo a Gisèle Pelicot y a todas las víctimas de violencia machista.
En total, 35.000 personas se concentraron en las principales ciudades del país, según la policía, aunque las entidades organizadoras elevaron la cifra a los 100.000 asistentes.
"Gracias a todos vosotros tengo fuerzas para llevar esta lucha hasta el final. Esta lucha que dedico a todas las personas, mujeres y hombres que en el mundo son víctimas de violencia sexual. A todas esas víctimas, quiero decir, mirad a vuestro alrededor, no estáis solos", dijo Gisèle Pelicot en el inicio de este juicio, tras una primera movilización en su apoyo.
El Gobierno francés tiene previsto anunciar este lunes nuevas medidas para combatir las violencias machistas que sufren las mujeres.