Netanyahu acepta el alto el fuego de 60 días con el Líbano: "Si Hizbulá rompe el acuerdo, nosotros atacaremos"
- El gabinete de Netanyahu se ha reunido en Jerusalén para examinar un proyecto de acuerdo de alto el fuego
- Los bombardeos israelíes en Líbano han causado más de 3.700 muertos en el último año
El gabinete de seguridad de Israel ha llegado a un acuerdo de alto el fuego con el Líbano que se prevé que entre en vigor este miércoles a las 10.00 horas local (8GMT). "Vamos a conseguir que los vecinos del norte vuelvan a sus casas gracias a los esfuerzos del Ejército de Israel", ha afirmado el primer ministro, Benjamin Netanyahu, que ha añadido que han "hecho retroceder décadas a Hizbulá". Desde EE.UU., Joe Biden, ha dicho que la tregua está pensada para ser "permanente" y supone un "nuevo comienzo" para Líbano.
Netanyahu, que ha advertido a Hizbulá que si rompe el acuerdo volverán "a atacar", ha aceptado la propuesta de tregua en Líbano de 60 días, pero precisando que Israel mantendrá "libertad de acción" si Hizbulá viola el acuerdo auspiciado por Estados Unidos. Además, ha asegurado que en Siria, Bashar al-Ásad, "está jugando con fuego". El primer ministro israelí también ha recordado que harán todo lo posible para devolver los rehenes en Gaza.
"La duración del alto el fuego dependerá de lo que ocurra en Líbano y nosotros mantendremos total libertad de movimiento", ha afirmado el mandatario israelí en sus declaraciones tras la reunión del gabinete en Jerusalén para examinar un proyecto de acuerdo de alto el fuego.
Líbano, por su parte, ha asegurado que están preparados para tomar el control del sur del país.
Biden dice que la tregua debe ser"permanente"
Biden, que ha aplaudido el acuerdo, ha señalado que ha hablado con los primeros ministros de Israel y de Líbano y ha confirmado que ambos han aceptado el alto el fuego. El mandatario estadounidense ha subrayado que la tregua está pensada para que sea permanente. Asimismo, lo ha definido como un "nuevo comienzo" para el Líbano.
"Según el acuerdo alcanzado hoy, que entrará en vigor mañana a las 4 de la madrugada, hora local, terminarán los combates a lo largo de la frontera entre el Líbano e Israel. Está diseñado para ser un cese permanente de las hostilidades", ha dicho en un mensaje desde la Casa Blanca en el que también ha hablado de la necesidad de un alto el fuego en Gaza.
La propuesta, impulsada por EE.UU. y aceptada por Israel, incluye tres etapas: una tregua seguida del repliegue de las fuerzas de Hizbulá al norte del río Litani, una retirada total de las tropas israelíes del sur del Líbano en un plazo de 60 días y, por último, negociaciones entre Israel y el Líbano sobre la demarcación de su frontera, que en la actualidad es una linde fijada por la ONU tras la guerra de 2006.
Bombardeos en Beirut
Tras las palabras de Netanyahu se han escuchado sirenas antiaéreas en el centro y norte de Israel. Mientras se esperaba el anuncio de la posible tregua, la jornada ha estado marcada por los bombardeos israelíes sobre Beirut a gran escala. Asimismo, el ministro de Defensa del país hebreo, Israel Katz, ha aprobado la continuación de las operaciones militares ofensivas en el frente norte, según ha indicado su portavoz.
Israel también ha emitido este martes por primera vez órdenes de evacuación en el centro de la capital libanesa, donde los ataques han matado al menos a 10 personas. En concreto, el Ejército hebreo ha confirmado bombardeos en Beirut, Sidón, Tiro y Beqaa; mientras las sirenas antiaéreas también se han agudizado en el norte de Israel ante lanzamientos de proyectiles de Hizbulá.
Los bombardeos israelíes en Líbano han causado más de 3.823 muertos en el último año, así como el desplazamiento de 1,2 millones de personas. En Israel, 78 personas han muerto (47 de ellas civiles), mientras que unas 60.000 han sido desplazadas por el intercambio de fuego con Hizbulá.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, había expresado este mismo martes su "seguridad" de que la negociación para un alto el fuego entre Israel y Líbano estaba "en sus últimas etapas", en una rueda de prensa tras una cumbre del G7 en Italia.