La Audiencia Nacional pide a la Eurocámara acreditar que Alvise es eurodiputado, paso previo para imputarle
- Primer paso antes de que el magistrado remita al Supremo la investigación sobre la presunta financiación ilegal de su partido
- Anticorrupción pidió elevar una exposición razonada al Alto Tribunal para que investigue al líder de Se Acabó la Fiesta
El juez de la Audiencia Nacional José Luis Calama ha dado el primer paso para enviar al Tribunal Supremo la investigación sobre presunta financiación irregular de Alvise Pérez al dirigirse al Parlamento Europeo para que acredite su condición de eurodiputado.
Tras la petición de la Fiscalía Anticorrupción este pasado lunes de remitir el caso al Supremo para investigar al líder de Se Acabó la Fiesta (SALF), el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional ha librado un oficio al Parlamento Europeo para que se remita la certificación de la condición de europarlamentario de Alvise y acreditar así su aforamiento ante el Tribunal Supremo.
Tras ello, adoptará una decisión sobre si eleva una exposición razonada para que sea investigado en el Alto Tribunal por recibir, presuntamente, 100.000 euros del empresario Álvaro Romillo para su campaña electoral de los pasados comicios europeos.
Anticorrupción pide elevar la causa al Supremo
La Fiscalía Anticorrupción considera que existen indicios de un delito de financiación irregular de partidos y apoya que el Supremo para que abra una investigación contra el líder de la formación ultra, quien hace unas semanas declinó acudir a declarar de forma voluntaria a la Audiencia Nacional.
Quien sí lo hizo fue Álvaro Romillo, investigado a su vez por una presunta estafa piramidal a través de la plataforma de inversiones Madeira Invest, que ratificó su denuncia ante el juez y afirmó haber entregado el pasado 27 de mayo 100.000 euros a Alvise para su campaña.
El juez Calama decidió investigar la denuncia de este empresario al ver en ella "inicial verosimilitud" e incluso llegó a apuntar a que se podría considerar a Alvise como cooperador necesario o cómplice de la supuesta estafa de Madeira Invest.
Romillo relataba distintos contactos mantenidos con Alvise Pérez con la intención de que el empresario obtuviera la promoción de sus servicios y el eurodiputado "podría financiar con seguridad y holgura su campaña sin persecución estatal".
Según la denuncia, el 27 de mayo comunicó a Alvise que podía recoger en efectivo 100.000 euros, a lo que este último respondió: "100 %. Me posibilitas una parte urgente de la campaña. Mil gracias tío".
Tras conocerse la denuncia, Alvise se declaró "culpable como autónomo" de haber cobrado por su trabajo sin la preceptiva factura, animó a sus seguidores a la insumisión fiscal y se mostró convencido de que se libraría "como siempre" porque detrás de "las calumnias y los mensajes entrecortados no hay nada más que una complementaria de Hacienda".