El ex primer ministro sirio acepta ceder el poder a los rebeldes en Siria, que formarán un Gobierno de transición
- El líder de los rebeldes se ha reunido con Mohammed Jalali para "coordinar la transición de poder"
- DIRECTO: sigue la última hora de la caída del régimen de Bachar al Asad en Siria
El ex primer ministro sirio, Mohammed Jalali, ha declarado a la cadena de televisión Al Arabiya que había aceptado ceder el poder al "Gobierno de Salvación" rebelde en Siria tras la caída el domingo de Bachar Al Asad. El líder de los rebeldes, Abu Mohammad al Golani, se ha reunido este lunes con el exmandatario para "coordinar la transición de poder" en el país, según ha anunciado la coalición de milicias que derrocó al régimen.
Los insurgentes han encargado a Mohamed al Bashir, el presidente del Gobierno de Salvación —la Administración de facto en la provincia septentrional siria de Idlib controlada por el Organismo de Liberación del Levante—, formar un Gobierno para la transición, según ha informado la televisión siria, dirigida ahora por la oposición. El domingo Jalali se mostró dispuesto a colaborar con el "nuevo liderazgo de Siria" y aseguró que no tenía abandonar el país.
"Se va a encargar al presidente del Gobierno de Salvación, Mohamed al Bashir, formar un nuevo Gobierno sirio para gestionar la fase de transición", ha indicado la televisión. El Gobierno de Salvación es una suerte de rama política y civil del Organismo de Liberación del Levante (Hayat Tahrir al Sham o HTS, en árabe) que se creó en Idlib, provincia en el noroeste de Siria y bastión opositor.
Los insurgentes han anunciado una amnistía para los militares del régimen anterior y aseguran que respetarán los derechos individuales, la forma de vestir de las mujeres y que no atentarán contra las minorías
La población de Siria se ha despertado este lunes con un futuro esperanzador e incierto después de que los rebeldes tomaran la capital del país, Damasco, y de que Al Asad huyera a Rusia, culminando 13 años de una guerra dirigida a acabar con más de 50 años de dictadura familiar. La primera jornada tras la caída del régimen también ha estado marcada por las celebraciones, así como por un cierto caos, ya que la falta de autoridad se ha hecho visible con distintos episodios de violencia y saqueos.
El acelerado ritmo de los acontecimientos ha sorprendido y ha generado temor a una mayor inestabilidad regional acrecentada desde hace más de un año por la guerra en Gaza, los ataques de Israel a Líbano y las tensiones entre Israel e Irán. Naciones Unidas calcula que 16 millones de sirios se encuentran actualmente en situación de necesidad de ayuda humanitaria y ha instado a la comunidad internacional a aumentar la financiación para la cooperación de cara a "abrir nuevas instalaciones de refugio, saneamiento y alimentación".
Manifestantes muertos por disparos de kurdos, según la televisión siria
Al menos diez civiles han muerto y otros 22 resultaron heridos en la ciudad de Deir Al Zur, en el este de Siria, por disparos de combatientes de la alianza liderada por kurdos Fuerzas de Siria Democrática (FSD) contra manifestantes que pedían su salida de esa ciudad, según ha informado la televisión oficial Syria TV, ahora controlada por la oposición insurgente.
El medio, que cita a "fuentes privadas", ha mostrado imágenes de centenares de personas coreando consignas en favor de la salida de FSD de Deir Al Zur, y de que la urbe sea controlada por el Mando de Operaciones Militares, de la alianza de facciones lideradas por el Organismo de Liberación del Levante (HTS, en árabe) que derrocó al régimen del ya expresidente Bachar al Asad.
"Dios es grande, Dios es grande (...) que salgan esas bandas de las FSD", se escuchaba en el vídeo mostrado por Syria TV.
Por otro lado, al menos 12 miembros de una misma familia, entre ellos seis niños, han muerto en un ataque con un dron lanzado por Turquía contra una vivienda en las afueras de la ciudad de Ain Isa, en el norte de Siria, controlada por los kurdosirios, según han informado las fuerzas kurdas. Hasta el momento, se desconocen más detalles sobre este ataque y Turquía no ha reaccionado ante esta información.
Este ataque se produce en medio de la ofensiva que los rebeldes sirios apoyados por Turquía están realizando en el norte de Siria contra las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada liderada por kurdos.
Por su parte, el Ejército de Estados Unidos ha bombardeado 75 objetivos del Estado Islámico (EI) en Siria, en un momento en el que Washington teme que el grupo terrorista aproveche el vacío de poder tras la caída de Al Asad para reorganizarse. EE.UU. mantiene 900 soldados en el país como parte de la coalición internacional creada en 2014 para combatir al EI, tras la proclamación de un "califato" por parte de este grupo, que llegó a controlar vastas zonas de Siria e Irak, imponiendo su estricta interpretación de la ley islámica o sharía.
La presencia militar de Israel en el sur, "limitada y temporal"
El ministro israelí de Exteriores, Gideon Saar, ha asegurado que la presencia de tropas israelíes en la zona desmilitarizada en territorio sirio es "limitada y temporal", un paso necesario por razones de seguridad ante la confusión que reina en Siria. "Enfatizo que es un paso muy limitado y temporal, que hemos tenido que dar por razones de seguridad", ha indicado el jefe de la diplomacia israelí.
Saar ha explicado que Israel ha intervenido porque grupos insurgentes violaron el acuerdo de retirada de tropas que firmó con Siria en 1974 de la llamada "zona de amortiguación" y atacaron unidades, puestos de observación cerca de la frontera y representaron "una amenaza para nuestras comunidades en los Altos del Golán y en el Estado de Israel".
La ONU, sin embargo, ha advertido de que el avance de las tropas israelíes hacia Siria constituye "una violación" del acuerdo de retirada de 1974. La Fuerza de las Naciones Unidas de Observación de la Separación (FNUOS) "ha informado a sus homólogos israelíes de que estas acciones constituirían una violación del acuerdo de separación de 1974", ha dicho Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general, António Guterres.
En una carta al Consejo de Seguridad de la ONU, el portavoz israelí, Danny Danon, ha comunicado que Israel ha tomado "medidas limitadas y medidas temporales" en una franja desmilitarizada fronteriza con Siria para contrarrestar cualquier amenaza. "Israel no está interviniendo en el conflicto en curso entre grupos armados sirios; nuestras acciones se centran únicamente en salvaguardar nuestra seguridad", afirma la nota.
El Ejército israelí también ha anunciado el levantamiento de las medidas impuestas el domingo en varias localidades drusas de los Altos del Golán ocupados, junto a la frontera siria. "Como parte de los cambios, las escuelas y los jardines de infancia reanudarán sus actividades educativas habituales", ha señalado el comunicado oficial de las IDF.
Desde Rusia, el Kremlin ha asegurado que todavía tiene que negociar el futuro de sus bases militares en Siria con las nuevas autoridades del país. "Es prematuro hablar de ellos. En todo caso, será objeto de discusión con quienes estén en el poder en Siria", ha dicho el portavoz presidencial, Dimitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.
Preocupación por las armas químicas
La Administración estadounidense se ha mostrado preocupada por el vacío de poder que pueda crearse tras la caída de Al Asad y ha asegurado que está trabajando para destruir las armas químicas del régimen sirio para evitar que caigan en manos equivocadas.
Según ha explicado un alto funcionario estadounidense a la prensa, los servicios de Inteligencia tienen localizado ese inventario de armas y creen que seguirá seguro. “Estamos tomando medidas muy prudentes. Hacemos todo lo posible para garantizar que estos materiales no estén disponibles para nadie y permanezcan protegidos”, ha declarado.
"Queremos asegurarnos de que el cloro y sustancias aún más peligrosas sean destruidas. Existen varios esfuerzos en este sentido con nuestros socios regionales", ha detallado el funcionario.
En la misma línea se ha pronunciado el ministro de Exteriores israelí, que ha asegurado que el Ejército de Israel ha atacado "sistemas de armas estratégicas del régimen, incluidos depósitos de armas químicas y de misiles de largo alcance, para que no cayeran en manos de los extremistas". Las operaciones militares de Israel en Siria también han incluido ataques a aeropuertos militares de Damasco.
Durante los 13 años de guerra civil siria, el agente químico más utilizado ha sido el cloro, presente en el 91,5 % de los ataques, junto con el sarín y el gas mostaza. Antes de que se llevaran a cabo los ataques más mortales, el entonces presidente estadounidense, Barack Obama, advirtió a Al Asad de que el uso de armas químicas sería una "línea roja" que provocaría una intervención militar de Estados Unidos.
Sin embargo, aunque Al Asad cruzó esa "línea roja", no hubo intervención militar y Obama negoció con Rusia para que forzara a Al Asad a destruir sus arsenales de armas químicas. Sin embargo, ese proceso no se realizó en su totalidad, según Washington, que cree que el Gobierno de Al Asad violó el acuerdo y mantuvo parte de su arsenal químico.
Los talibanes felicitan a los líderes islamistas
El Ministerio de Relaciones Exteriores talibán, que gobierna 'de facto' Afganistán desde 2021, ha felicitado en un comunicado a la dirección del islamista Organismo de Liberación del Levante y al pueblo de Siria en general, y ha elogiado la operación de los últimos días "que resultó en la eliminación del factor de conflicto y de la inestabilidad, así como en la caída de Damasco bajo el liderazgo de HTS".
Los talibanes han expresado también "esperanza en que las fases restantes de la revolución se gestionen de una manera que asegure un sistema pacífico, unificado y estable". Los fundamentalistas esperan que la transición en Siria "establezca las bases para un Gobierno islámico soberano, en línea con las aspiraciones del pueblo sirio".
De manera más específica, los talibanes afganos esperan que los actores extranjeros involucrados en la guerra de Siria adopten políticas de "compromiso activo y cooperación" con el nuevo liderazgo de Damasco.