El campo se moviliza contra el acuerdo de Mercosur: "Las reglas del juego tienen que ser para todos iguales"

• Trabajadores del sector han protestado en Valladolid y Pamplona y piden medidas para mejorar su rentabilidad
• Asaja y COAG han convocado una manifestación el 16 de diciembre frente al Ministerio de Agricultura

Varios tractores en las calles de Valladolid durante las protestas de agricultores de este martes. EFE/ R. García

El campo vuelve a movilizarse en las calles tras el acuerdo ratificado entre la Unión Europea (UE) y los países de Mercosur (Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay) el pasado 6 de diciembre. Se trata de un pacto comercial que implicará crear la zona libre de aranceles más grande del mundo. Sin embargo, los agricultores españoles no ven con buenos ojos la medida y han salido a protestar en varias ciudades del país porque consideran que este pacto fomenta una "competencia desleal" que les perjudica frente a países terceros donde no hay tantas restricciones.

Más de 200 tractores y decenas de agricultores y ganaderos de las nueve provincias de Castilla y León han recorrido este martes las calles de Valladolid. "Seguimos igual que el año pasado, las normativas nos están ahogando, los mercados lo ratifican y desde Europa nos están lapidando", ha denunciado Carlos Duque, portavoz de la Unión de Asociaciones del Sector Primario Independientes (UNASPI).

Duque, además, ha señalado que el acuerdo de Mercosur supone "una competencia desleal" al permitir el uso de cultivos transgénicos y tener costes laborales más bajos. Por tanto, ha reclamado "precios justos y una normativa justa". "Lo que queremos es abaratar el precio de la alimentación, porque se va a poner por las nubes como sigan con estas normativas", ha zanjado.

Este descontento también se ha percibido en Pamplona, donde más de 50 tractores de la asociación Semilla y Belarra han protagonizado movilizaciones impulsadas por la Unión Nacional de Asociaciones del Sector Primario Independientes (Unaspi).

Alberto Alecha, portavoz de los agricultores y ganaderos, ha explicado que, tras las protestas de la pasada primavera, han dejado "un tiempo de reflexión" y ahora han vuelto para recordar a los políticos y a la sociedad que están luchando "no solo por la supervivencia de la vida en el campo, sino por la soberanía alimentaria". Lo que demanda el sector agrario, ha subrayado, es "que se nos permita ser competitivos respecto a lo que se produce fuera de Europa".

Cabe recordar que este rechazo se ha apreciado fuera de las fronteras españolas y, de hecho, Francia ha estado liderando la postura en contra porque considera que podría afectar negativamente a los productores agrícolas comunitarios.

Por su parte, el comisario europeo de Agricultura, Christophe Hansen, ha afirmado este lunes que el pacto de Mercosur beneficia al sector agrícola y no se trata de un pacto en el que "todo sea blanco o negro". Además, ha defendido que el sector lácteo y de los quesos "se beneficiarán enormemente". Ha abogado por escuchar las preocupaciones de la comunidad agrícola: "Eso es algo que siempre nos tomaremos muy en serio. No obstante, creo que el acuerdo tiene muchas cláusulas y mecanismos de salvaguarda".

Los agricultores, convocados a protestar el próximo 16 de diciembre

Entretanto, las organizaciones agrarias Asaja y COAG han convocado a los agricultores a una protesta el próximo 16 de diciembre frente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en Madrid.

El presidente de Asaja, Pedro Barato, no califica el acuerdo de Mercosur de "caótico", pero ha señalado que les exige "la ley del embudo". "Me quitan fitosanitarios, me quitan fertilizantes y me imponen determinadas cláusulas que otros no tienen y, por lo tanto, el acuerdo no puede seguir adelante por esa reciprocidad que no tenemos", ha argumentado en una entrevista en RNE.

Por ello, aunque aboga por el libre comercio, señala que "las reglas del juego y la forma de producir más allá del Atlántico son totalmente distintas a las de aquí", lo que les sitúa en una situación de desventaja competitiva frente a ellos.

También ha criticado que los partidos políticos españoles no han defendido en Europa hasta ahora las cláusulas espejo, que son aquellas con las que se busca aplicar los requisitos para producir que hay dentro de Europa también a los países terceros que no son comunitarios. "Las reglas del juego tienen que ser para todos iguales", señala.

Dentro del arco político, ERC y EH Bildu han solicitado la comparecencia del ministro de Agricultura, Luis Planas, en el Congreso y Senado sobre el acuerdo comercial entre la UE y Mercosur. Piden a Planas que explique cuál va a ser la posición del Gobierno respecto a este pacto.

Efectos en la carne de vacuno, el azúcar y el arroz

Además, las organizaciones agrarias y cooperativas europeas (Copa-Cogeca) también señalaron a comienzos de diciembre que el acuerdo de Mercosur tendrá "profundas consecuencias para la agricultura familiar en toda Europa".

En un comunicado, reconocían que es necesario que la UE profundice en las relaciones comerciales en el contexto geopolítico actual, pero que esto "no debe hacerse a cualquier precio". Entre los sectores más sensibles al pacto de Mercosur están el de la carne de vacuno, las aves de corral, el azúcar, el etanol y el arroz, que enfrentarán "mayores riesgos de saturación del mercado y pérdida de ingresos debido a la afluencia de productos de bajo costo de los países del Mercosur".

El acuerdo de Mercosur, que se negocia desde hace un cuarto de siglo, eliminaría aranceles para el comercio entre los países de la UE y Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, con una población combinada de más de 700 millones de personas, lo que le convertiría en el tratado de asociación de mayor alcance del mundo.

Cuando el acuerdo sea ratificado y entre en vigor, eliminaría los aranceles que los países del Mercosur imponen hoy a vehículos, maquinaria, tecnología de información y comunicaciones, textiles, chocolate o vino, entre otros productos europeos.