Carmen Chaplin: "La idea de que mi abuelo naciera en un campamento gitano es muy romántica"
- Llega a los cines el documental Chaplin: Espíritu gitano, dirigido por su nieta y protagonizado por su hijo Michael
- Cuenta con la participación de RTVE y se estrena este 13 de diciembre
¿Eran gitanos los padres de Charlot?, esta es la interesante pregunta a la que intenta responder el documental Chaplin: Espíritu gitano, dirigido por la nieta del famoso cineasta, Carmen Chaplin, y protagonizado por su hijo Michael (segundo de los ocho hijos que el actor tuvo con Oona O'Neill). Una estupenda película que cuenta con la participación de RTVE y la colaboración de estrellas como el actor Johnny Depp, el director y músico Emir Kusturica, la creadora multidisciplinar Lita Cabellut o el bailaor Farruquito. Y que tras su paso por el Festival de San Sebastián (donde consiguió el premio del cine vasco) y su nominación a los Premios Forqué a mejor documental, llega a los cines este 13 de diciembre.
Un documental en el que somos testigos de como Michael recorre varios países europeos en busca de esos orígenes gitanos de Charlot y que cuenta con un acceso sin precedentes al legado de Chaplin, ya que cuenta con la participación de su familia y está construido a partir de entrevistas íntimas, extractos de filmes, películas caseras y contribuciones de renombrados artistas romaníes contemporáneos.
"Charlie estaba orgulloso de sus raíces gitanas"
Carmen nos comenta que: “La idea de que mi abuelo naciera en una caravana de un poblado gitano es muy romántica. Cuando el FBI lo investigó (por la Caza de Brujas del Macartismo), nunca encontraron su certificado de nacimiento ni pudieron demostrar dónde había nacido. Nosotros tampoco, pero cabe la posibilidad de que así fuera. Por eso nos apasiona esa idea tan romántica y novelesca. Naciera donde naciera, Charlie estaba orgulloso de esas raíces gitanas”.
“Además –añade Carmen-, rodando el documental hemos descubierto una cosa que ni el propio Charle sabía, que su padre también era de origen gitano”.
Una misteriosa carta que Charlie Chaplin nunca enseñó a nadie
Carmen Chaplin nos ha contado que el origen de la película fue: “Una carta que descubrió mi padre, y que un hombre llamado Jack Hill había escrito a mi abuelo después de que publicara su biografía. En esa carta, que Charlie no enseñó nunca a nadie, le decía que era un mentiroso porque no nació en Londres, sino en el asentamiento romaní de Black Patch, a las afueras de Birmingham. “Tú eres un gitano”, le decía”.
“Charlie recibía miles de cartas, pero la única que guardó, en su mesilla de noche y bajo llave, fue esta. Y cuando mi padre la descubrió, muchos años después de la muerte de mi abuelo, se quedó muy intrigado. A mi padre le fascinó la idea de nuestros orígenes gitanos”.
“Y decidimos rodar un documental en el que mi padre iría a buscar esos orígenes gitanos –añade la directora-. Lo primero que hicimos fue decidir desde qué ángulo íbamos a rodar la película. Entonces me documenté mucho sobre Charlie y su madre. Y también he querido indagar en la relación que mi padre tenía con mi abuelo. Y poco a poco todo fue encajando. Lo más difícil fue visionar la gran cantidad de películas caseras que acumuló mi abuelo. Era muchísima documentación y nos costó ordenarlo todo”.
Charlie Chaplin tuvo una relación complicada con su hijo Michael
En el documental vemos que Chaplin se sentía un poco decepcionado de que su hijo Michael no siguiera sus pasos en el mundo del espectáculo, pese a que aparecieron juntos en Un rey en Nueva York (1957), cuando Michael apenas era un chaval. “Eran de generaciones muy diferentes –asegura Carmen-. Charlie creció en la era victoriana, en la más absoluta pobreza, Tuvo que buscarse la vida desde los cinco años porque su madre tenía muchos problemas de salud. Eso hizo que, desde muy pequeño tuviera esa enorme fuerza y resistencia. Y que, al mismo tiempo, intentará ayudar a la gente pobre, cambiar las cosas. Tenía un corazón enorme”.
“Pero mi padre nació en la riqueza en los años 50 –continúa Carmen-. Era un hombre muy introvertido al que le gustaba mucho leer. Y Charlie quiso endurecerlo. Pensaba que, para enfrentarse al mundo debía cambiar, endurecerse. Se querían mucho, pero no se encontraban. Pero creo que darle ese papel a Michael en Un rey en Nueva York fue un acto de amor. Una forma de demostrarle cuanto lo quería”.
Charlie Chaplin rodó durante años numerosas imágenes familiares que Carmen también ha utilizado en este documental: “He visto muchísimas grabaciones caseras para el documental. Pero al final saqué lo esencial para la película. Mi perspectiva nunca fue: Voy a enseñarte algo que nunca se ha visto”, sino “Voy a mostrarte estas imágenes desde una perspectiva completamente novedosa”.
Preguntamos a Carmen qué ha descubierto en esta investigación sobre su abuelo: “Creo que he podido conocerlo con mayor profundidad. Y sobre todo me ha sorprendido cómo le afectó la enfermedad de su madre y hasta qué punto ella le inspiró. Y eso me ha servido también para comprender mejor a mi padre”.
La música, en general, y la música romaní, en particular, también son muy importantes en el documental, en el que Michael se entrevista con otro gran melómano, Emir Kusturica. “Charlie colaboró muchísimo con el músico Eric James (El Chico, El Circo…) -asegura Carmen-. Mi abuelo nunca supo componer música, pero era autodidacta y tocaba el violín, el piano y el acordeón. Eric le dijo en una ocasión que por qué no aprendía a escribir música. A lo que Charlie respondió: "Escribo música cuando toco el piano o el violín, pero si supiese cómo escribir las notas, creo que perdería esa espontaneidad, esa intuición”.
En cuanto a los recuerdos que tiene de su abuelo, Carmen Chaplin nos comenta: “Aún recuerdo las reuniones familiares y celebrar las Navidades y la Pascua a la manera francesa, con los huevos de chocolate. Crecí en una granja con mis padres que no era demasiado glamurosa. Era muy sencilla. Y a veces íbamos a visitar a mi abuelo. Solía ser para esas grandes fiestas y yo no sabía quién era realmente mi abuelo, solo recuerdo que la gente lo admiraba mucho, pero no sabía por qué”.
Además de dirigirlo, la propia Carmen ha escrito el guion de este documental (con la colaboración de Isaki Lacuesta) que es una producción entre España, Francia, Reino Unido y Países Bajos.