Sanidad prepara una reforma para reducir el copago farmacéutico a las rentas más bajas y subirlo a las más altas
- El borrador de la legislación farmacéutica prevé crear nuevos tramos, según el nivel de renta
- Los cambios recaen, sobre todo, en la población activa
El Ministerio de Sanidad trabaja en un anteproyecto de ley para reestructurar el copago farmacéutico, es decir, lo que los ciudadanos pagan por los medicamentos con receta. Planea crear nuevos tramos, subir la aportación de las rentas más altas y establecer topes máximos de aportación para las más bajas.
El borrador de la reforma de la legislación farmacéutica prevé crear nuevos tramos, según el nivel de renta, para hacerlo más progresivo.
Es una de las principales novedades del anteproyecto de Ley de los Medicamentos y Productos Sanitarios que el Ministerio de Sanidad quiere llevar al Consejo de Ministros a principios de año y que supondrá un ahorro para la población de hasta 150 millones de euros anuales.
De los tres tramos actuales, a seis
Los cambios recaen, sobre todo, en la población activa. De los tres tramos actuales, pasaría a seis. Además, se establecen topes máximos de aportación.
Por ejemplo, las rentas más bajas, de menos de 9.000 euros, no pagarán más de 8,23 euros al mes en medicamentos. Con los nuevos tramos, quienes cobren más de 35.000 euros anuales pagarán un 5% más que hasta ahora.
Los tramos en el sistema de copago de fármacos
Ahora, los tramos de renta para el copago, que han permanecido invariables desde 2012, son tres: rentas inferiores a 18.000 euros, que pagan el 40%; las de 18.000 a 100.000, que abonan la mitad; y más de 100.000, que desembolsan el 60%.
La reforma propone crear nuevos tramos de rentas bajas: de hasta 9.000 euros y de 9.000 a 18.000 euros, que tendrán que contribuir con el 40%; y de 18.000 a 35.000, en cuyo caso pagarán el 50%.
Por primera vez, se introducen límites de aportación mensual, que será de 8,27 euros en el primero; de 18,52 euros en el segundo; y de 61,75 euros en el tercero.
A partir de los 35.000 no habrá un máximo de aportación mensual: los que ingresen de 35.000 a 60.000 tendrán que abonar el 55% de su medicación; los de 60.000 a 100.000, el 60% y, a partir de esa cifra, el 60,5%.
Nuevo tramo entre pensionistas
También se plantean cambios para los pensionistas, que por norma general abonan el 10% del precio. De tres tramos pasarían a cuatro. Los jubilados que cobren más de 60.000 euros tendrán que pagar entre el 60 y 65% del precio del medicamento.
Con la reforma, seguirán así excepto los que estén en el nuevo tramo de 60.000 a 100.000 euros, que tendrán que costearse el 60% del precio hasta los 40,14 euros mensuales.
Hay grupos que estarán exentos de pago: los afectados por síndrome tóxico, personas con discapacidad, los perceptores de rentas mínimas o menores de edad con un grado de discapacidad igual o superior al 33 %, entre otros.
El anteproyecto marca que se debe prescribir, como regla general, el principio activo, es decir, los medicamentos genéricos. Actualmente, el precio de referencia es el del fármaco de menor precio; Sanidad quiere establecer una horquilla para que los que estén fuera del precio de referencia no queden excluidos de la financiación.
Todavía es un borrador muy preliminar, dicen desde el Ministerio, que abre la puerta también a regular la prescripción por parte de enfermeras y fisioterapeutas.