El príncipe Andrés, acusado de mantener contacto por negocios con un supuesto espía chino
- Yang Tengbo impulsaba la actividad de inversiones, propiedad del príncipe
- Desde la embajada de China en Londres niegan que Yang sea un espía
El príncipe Andrés de York, hermano de Carlos III, se ha visto envuelto en un nuevo escándalo porque se han relacionado sus negocios con Yang Tengbo, un supuesto espía chino que fue expulsado del país por suponer "una amenaza para la seguridad nacional". Yang impulsaba la actividad de la empresa de inversiones Pitch @ Palace, organización sin ánimo de lucro en el Reino Unido, que era propiedad del príncipe y con la que se procuraba los mayores beneficios económicos posibles.
Mientras que el príncipe Andrés de York se enriquecía, el supuesto espía chino —en apariencia empresario— obtenía todo acceso a un gran número de contactos entre la gente con más poder del Reino Unido.
Yang afirmó que no había hecho "nada malo o ilegal"
Desde la embajada de China en Londres niegan que Yang sea un espía y el propio acusado de espionaje señaló que no estaba implicado en actividades de investigación y que no había hecho "nada malo o ilegal". Por su parte, el príncipe Andrés rechaza haber tratado jamás con él ningún "asunto de naturaleza sensible".
Carlos III retiró hace un mes la asignación económica de un millón de libras anuales a su hermano Andrés. A comienzos de 2022, la reina Isabel II ya apartó a su tercero hijo de la familia real británica por otro escándalo, que lo vinculaba con el proxeneta estadounidense Jeffrey Epstein.
Mientras este escándalo afecta a la familia real británica, el Gobierno de Keir Starmer se debate entre si alzar la voz y tomar represalias contra China, o guardar silencio e ignorarlo para no perjudicar así las relaciones económicas con el gigante asiático en un momento en el que tanto las necesitan.