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Ábalos denuncia a la Guardia Civil por "interceptar correspondencia privada" a un aforado

  • El exministro de Transportes ha hecho el anuncio en el Congreso: "Hemos normalizado cosas intolerables"
  • El Supremo pidió el este miércoles el suplicatorio al Congreso para dejarle sin inmunidad parlamentaria

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Ábalos denuncia a la UCO ante la Fiscalía por "interceptar" su correspondencia siendo aforado

El exministro de Transportes y exdirigente socialista José Luis Ábalos ha denunciado a la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil ante la Fiscalía General del Estado por "interceptar correspondencia privada" a un aforado y ha subrayado que con este hecho "de suma gravedad" se vulneró su derecho fundamental al secreto de las comunicaciones.

Este movimiento llega un día después de que el Supremo haya elevado al Congreso el suplicatorio para poder investigarlo y juzgarlo, dado que hasta que se dé ese paso tiene inmunidad.

Ábalos ha señalado en una rueda de prensa en el Congreso que la Guardia Civil, en un dispositivo montado frente a su casa, requisó y abrió un sobre que iba dirigido a él porque llevaba su nombre en la parte frontal y que, por su condición de aforado al ser diputado, la Benemérita podría haber incurrido en un delito.

"Se estableció un operativo para mirar la documentación que contenía el sobre y, después, Joseba García -hermano de Koldo- se dirigió hasta mi domicilio. Allí, la guardia civil tomó fotos de él con el sobre y, una vez salió de mi casa, la unidad de seguimiento no se fue detrás de Joseba García, que estaba siendo investigado, sino que siguió en la puerta de mi casa y me vigiló hasta que me subí a mi vehículo", ha desvelado Ábalos

"Lo que me preocupa es que presuntamente se haya cometido un delito por interceptación privada a un aforado, saben que soy diputado. Todo el operativo se montó para interceptar la documentación, otra cosa es que esa documentación sea de acceso público, algo que fue decepcionante", ha insistido el exministro al ser cuestionado sobre el contenido de esa carta.

Al hilo de esta cuestión, ha explicado que su denuncia la ha presentado ante la Fiscalía porque es el órgano encargado de "promover la acción de la justicia en defensa de la legalidad, de los derechos de los ciudadanos y del interés público" y espera que se "tome nota" de la importancia, que a su juicio, tiene esta situación.

Aún así, ha avanzado también que se "reserva" otras actuaciones judiciales para los posibles indicios que puedan ir apareciendo a lo largo de la causa.

"Hemos normalizado cosas intolerables"

Ábalos ha explicado que ese operativo de la guardia civil se montó tras la escucha de una conversación entre su exasesor, Koldo García, y el subsecretario de Estado de Interior: "Hemos normalizado cosas intolerables".

"Si hubiese por mi parte una autorización o por un mandato del juez o, incluso, hubiese sido convalidado por el juez, pero nada de esto ha ocurrido. Por eso he presentado esta denuncia ante el Fiscal General del Estado", ha reflexionado el exministro y aún aforado por ser diputado del Grupo Mixto tras su expulsión del PSOE.

Ábalos ha continuado con su argumentación haciendo referencia al caso que afecta directamente al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, imputado por el Tribunal Supremo por revelación de secretos en el caso del novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

"Fíjense el revuelo que hay por un correo, ahora, imagínense que a un particular le hubiesen hecho vigilancia sin autorización judicial, estaríamos ante otro escándalo, algo bastante más grave por la trascendencia que tiene" ha ironizado el exdirigente socialista.

Descarta la implicación de Marlaska

"Esto no es un hallazgo casual de una investigación o un simple daño colateral, tenía un objetivo muy claro", ha sostenido, ya que, en palabras de Ábalos, la investigación de los agentes está "liderada y dirigida" por un responsable.

Cuestionado por si cree que el actual ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, pudo estar al frente de dicha investigación, Ábalos lo ha descartado de manera rotunda porque "no es de esa sensibilidad" y además de ministro es juez y "sabe lo que es la defensa de la justicia y las libertades".

Lo único que le pide a Marlaska es que no cierre “apresuradamente” las cosas y que dé respuesta a la pregunta parlamentaria que registró sobre este asunto para conocer desde cuándo fue investigado y que lleve a cabo una auditoria de fuentes de datos porque "cuesta muy poco" saber si se le ha investigado.

Insiste en su inocencia

Antes de su rueda de prensa, el exministro de Transportes ha pedido que se respete la presunción de inocencia porque es un "principio básico" y ha vuelto a negar haberse enriquecido con las mordidas que se achacan a la trama de las mascarillas.

"Afortunadamente, estamos en un Estado de derecho y la presunción de inocencia es un principio básico que deberíais respetar, ya sé que el circo os va, pero tendríais que respetar algo que nos ha costado mucho conseguir en esta democracia", ha dicho Ábalos en los pasillos del Congreso al ser preguntado por la decisión del Tribunal Supremo.

El exdirigente socialista ha dicho que suplicatorio no es una sorpresa porque se sabía "desde el principio" que el Supremo acabaría solicitándolo y ha insistido en que "no" se ha enriquecido.

El Supremo envía la petición de suplicatorio al Congreso

El Tribunal Supremo ya ha enviado formalmente la petición de suplicatorio para levantar la inmunidad del exministro, como instó el miércoles el juez que le investiga, de modo que su causa ha quedado en suspenso en lo que se refiere a él hasta que el Congreso dé una respuesta.

El magistrado Leopoldo Puente acordó solicitar el suplicatorio al Congreso de los Diputados para investigar a Ábalos por cuatro delitos y este jueves la Sala de lo Penal del Supremo ha dado curso formalmente a su petición.

Porque es la Sala de lo Penal el órgano que tiene que remitir el suplicatorio a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, por conducto de la presidenta del Tribunal Supremo, Isabel Perelló.

En su auto, los magistrados recuerdan que la ley prohíbe que los diputados y senadores sean inculpados o procesados sin la previa autorización de la respectiva Cámara (el suplicatorio).

Tras leer la exposición razonada del juez Leopoldo Puente, activan el trámite para conseguir la autorización del Congreso y así "formalizar" la "inculpación" contra Ábalos como posible autor de delitos como integración en organización criminal, tráfico de influencias, cohecho y malversación en el denominado caso Koldo.