El turismo se resiente en Belén por segundo año: poca clientela y negocios cerrados
- Cada día, los negocios pierden un millón y medio de dólares
- En 2024, Belén ha recibido un número pequeño de visitantes, apenas el 1% de los que visitaban la ciudad antes de la guerra
Los casi 80 hoteles que hay en Belén han echado el cierre desde el estallido de la guerra entre Israel y Hamás en Gaza, que implica que cada día pierdan un millón y medio de dólares. El hotel Belén, uno de los más grandes de la ciudad, cuenta con 220 habitaciones, y antes de que se iniciara la guerra, trabajaban en él unos 100 empleados.
"El turismo es un negocio muy sensible", señala el dueño del hotel, Elias Alalarja. "Es el primero en caer cuando hay problemas políticos o, por ejemplo, con cosas como la pandemia", añade, "y es el último en recuperarse".
Los negocios tienen pérdidas millonarias
En 2024, Belén ha recibido un número muy pequeño de visitantes, apenas el 1% de los turistas que visitaban la ciudad antes de la guerra. Por ello, los negocios tienen pérdidas millonarias y el Ministerio de Turismo trata de cambiar de estrategia. No solo llaman a los cristianos a visitar la ciudad, sino también a los propalestinos.
Majed Ishaq, del Ministerio de Turismo de Palestina, cree que "ese apoyo se traducirá en turismo para Palestina", porque así irán "a mostrar su solidaridad" y "a ayudar a nuestra economía". Pero Ishaq incide en que lo más importante, desde su punto de vista, es que el apoyo sanará su narrativa.
Por su parte, Mahmoud tiene un puesto de postales en una plaza de Belén. Desde que comenzó la guerra, no tiene clientes, por lo que cada día sale a buscarlos por la ciudad. Cuenta a RTVE que ha tenido que vender su coche para así dar de comer a su familia. No obstante, no todos los días son malos, porque Mahmoud reconoce que ha tenido "el mejor día en meses", ha vendido "como 130 sheckels" -unos 40 euros-, aunque expresa que con eso no puede vivir.
Negociaciones para un alto el fuego en Gaza
La guerra palestino-israelí persiste, pero llegan horas decisivas para un posible acuerdo que establecería un alto el fuego en Gaza, que contempla la liberación de parte de los rehenes. Hamás ve buenas condiciones, aunque la última palabra la tiene Israel y su primer ministro, Benjamín Netanyahu. Los familiares de los retenidos piden un acuerdo ya, aunque los ministros ultraderechistas indican que "pactar ahora sería una rendición".
En Yemen, Israel ha atacado puertos y la capital, lo que ha causado destrucciones en instalaciones eléctricas y petroleras, y una docena de muertos. Los hutíes, que apoyan a Hamás en Gaza, habían disparado dos misiles al centro de Israel, que han sido interceptados, aunque los restos de uno han dañado una escuela próxima a Tel Aviv.