'La luz que imaginamos', la amistad de tres mujeres de Mumbai es una de las películas del año
- Hablamos con su directora, la India Payal Capadia
- Premiada en Cannes y San Sebastián, y nominada a dos Globos de Oro, llega a los cines este 1 de enero
La luz que imaginamos, de la directora india Payal Capadia (A Night of Knowing Nothing, 2021), es una de las grandes películas de este 2024. Ganó el Gran Premio del Jurado en Cannes (fue la primera película India en competir en ese festival en 30 años) y el Premio TVE "Otra mirada", en San Sebastián. Además, está nominada a dos Globos de Oro (película de habla no inglesa y dirección) y ha sido elegida mejor película extranjera por los críticos de Nueva York, Los Angeles y Chicago. Narra la amistad de tres mujeres (dos enfermeras y una cocinera) que trabajan en un hospital de Mumbai (Bombay), y llega a los cines este 1 de enero. Hemos hablado con su directora, Payal Capadia.
“Quería hacer una película sobre las contradicciones de la sociedad india –nos comenta-. Por ejemplo, que la independencia económica de algunas mujeres no les sirva para poder elegir o decidir por sí mismas. Eso es algo que he crecido viendo en las mujeres que me rodeaban y que quería plasmar en la película”.
Pero, sobre todo la película es la historia de amistad de tres mujeres. “Si –asegura Payal Capadia-. Quería proponer una nueva idea de la familia. Porque la familia siempre está muy definida por la sociedad. Pero la amistad no. La amistad la eliges tú y también decides como quieres llevarla”.
“Y cuando vas del campo a la ciudad, tus amigos nuevos se convierten en tu familia -continúa-. Eso es lo que pasa en la película y me gusta mucho. Dependes de tus amigos, de tus amigas… Y ellos puedan aceptarte cómo eres, sin tener que fingir”.
Dos enfermeras y la cocinera de un hospital
Las protagonistas de la película son dos enfermeras que comparten piso en Mumbai. La rutina de Prabha (Kani Kusruti )se ve alterada cuando recibe un regalo inesperado de su marido, que trabaja en Alemania. Mientras, su compañera de piso, Anu (Divya Prabha), intenta en vano encontrar un lugar en la ciudad para intimar con su novio. Y Parvaty (Chhaya Kadam), es una viuda que trabaja como cocinera del hospital, y cuando se jubila la echan de la casa en la que ha vivido toda su vida porque no tiene papeles que lo demuestren.
“Quería que fueran mujeres cuidadoras –asegura la directora-. Con profesiones que tienen mucho que ver con entregarte a otras personas. Sobre todo, en el caso de las dos enfermeras”.
Un viaje físico y espiritual
La película también narra el viaje físico y espiritual de las protagonistas, de las lluviosas calles de Mumbai hasta un pueblo costero que se convertirá en un remanso de paz. “Me gusta mucho jugar con lo externo y lo interno, lo subjetivo y lo objetivo, con las emociones y, digamos, la historia en sí. Eso es lo que me gusta hacer".
"Pero también -añade-, quería una película donde sintiéramos el tiempo de dos formas distintas. La primera sería lo cotidiano: el trabajo, la rutina, el tren… cuando las protagonistas están en Munbai y no tienen ni un momento libre”.
“Mientras que la segunda manera de sentir ese tiempo –continúa-, serían esos dos días libres que se toman de vacaciones en el campo, al lado del mar. En el segundo caso el tiempo parece pasar más despacio y las protagonistas tienen la oportunidad de reflexionar sobre sus vidas”.
Pero esa orilla del mar a la que llegan no simboliza que alcancen la paz. “No exactamente –nos comenta Payal Capadia-. No quería que el campo y el mar pareciesen demasiado románticos, porque en la India el campo puede ser muy violento y el mar, el agua, también”.
“Lo que buscaba era el contraste entre esa lluvia, esa agua que cae constantemente en Munbai y el agua de la superficie del mar, que se extiende hasta el horizonte y nos parece más grande que la vida”.
“La luz es algo que me obsesiona”
La luz es una de las protagonistas de la película que tiene una fotografía realmente prodigiosa. “La luz es algo que me obsesiona –nos confiesa Payal Capadia-. Con esa luz quería transmitir dos sensaciones, dos estaciones. En Bombay el clima es tropical y prácticamente solo tenemos dos estaciones: el Monzón, que es la estación húmeda, y la seca. Allí nunca hace frío”.
“Durante el Monzón, durante la época de lluvia, la luz es muy azulada, de un gris azulado. Y nunca puedes saber qué hora es, porque la luz es siempre la misma”.
“Pero para el campo quería algo más duro, más nítido, más naranja. Porque la luz también influye mucho en nuestros estados de ánimo. Tiene mucho que ver con los sentimientos y fue una parte fundamental de la puesta en escena de la película y para ayudar a transmitir lo que sienten las protagonistas”.
Tres actrices maravillosas
Destacar a las tres protagonistas que son realmente maravillosas. “Aunque no sean estrellas de Bollywood, son tres actrices bastante conocidas en el cine independiente indio”, nos comenta la directora”.
“Lo mejor es que preparamos la película todas juntas, ensayando las escenas como si se tratara de una obra de teatro. De esa forma todo el mundo contribuyó al resultado final. Incluso el director de fotografía que presenció esos ensayos”.
“Ha sido un auténtico regalo contar con actrices tan generosas. Se metieron tanto en sus personajes que podemos decir que casi han sido cocreadoras de los mismos”, concluye la directora.
“En la India los matrimonios concertados son la norma”
La película también habla de los matrimonios concertados, una tradición que está lejos de desaparecer, como nos comenta Payal Capadia: “En la India los matrimonios concertados son la norma. Todo el mundo se casa así, incluso si tienes un novio o una novia. Y si tu futuro esposo o esposa no pertenece a tu casta, a tu religión, tus padres jamás van a ser felices”.
“Si quieres casarte por amor tendrás que abandonar tu familia, hacerte a la idea de que ya no tienes familia -continúa-. A veces, cuando tienes un niño de una relación, la familia entra en razón y te dejan casarte con el padre, pero es muy complicado”.
“Normalmente –añade la directora-, cuando empiezas a salir con alguien tienes que casarte con él o con ella, porque es así, sigue siendo así. Poco a poco hay un pequeño porcentaje de gente que intenta evitar esto y poder amar libremente, pero sigue siendo enormemente complicado”.
“Y quedarte soltera tampoco es fácil, porque no está bien visto–concluye-. Todo el mundo te preguntará por qué no te buscas un buen hombre. La vida en la India no es nada fácil para las mujeres solteras”.
“Cada vez hay más mujeres directoras en la India”
En cuanto a la situación de las mujeres en el cine Indio, que es el primer productor de películas del mundo, Payal Capadia nos comenta: “Cada vez somos más mujeres directoras, pero todavía no somos suficientes”.
“Hay actrices famosas que intentan empezar a producir sus propias películas y que las dirijan otras mujeres. Pero también son minoría”
“En general, una mujer lo tiene muy complicado para trabajar en el cine, da igual en qué departamento sea. Ya sea cámara, montadora, directora de fotografía… para una mujer es muy difícil entrar en el mundo del cine”, concluye Payal Capadia.
La luz que imaginamos es una de las películas más bellas de este 2024 y llega a los cines este 1 de enero.