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Hipotecas, impuestos y pensiones: ¿qué sube y qué baja en 2025?

  • El nuevo año trae recortes en algunas cuotas de los autónomos
  • La tendencia a la baja del euríbor reducirá las hipotecas variables en los próximos meses

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Cambio en los precios: ¿Qué sube y qué baja en 2025?

Inflación, vivienda, pensiones, carburantes... Son muchos los elementos que han afectado al bolsillo de los hogares en los últimos meses y que seguirán haciéndolo con la llegada del nuevo año.

Aunque el foco sigue puesto en el IPC, el precio de la vivienda y los alquileres han ido adquiriendo relevancia a nivel económico y social. A esto se suman la evolución de la electricidad, los carburantes y el euríbor, con su efecto en las hipotecas. ¿Cuál será la tendencia de todos estos elementos en 2025?

Evolución de la inflación

La inflación ha sido, en general, el tema que ha ocupado el foco económico a lo largo de 2024. El IPC arrancó el año marcando el 3,4% en enero y subió al 3,6% en mayo, su máximo anual. Con junio llegó cierto alivio y desde entonces encadenó cuatro meses a la baja hasta colocarse en el 1,5% en septiembre, su valor más bajo en tres años y medio. No obstante, volvió a repuntar en octubre y luego se ha situado en el 2,8% en diciembre, según el dato avanzado del INE.

Por tanto, habrá que ver cómo evoluciona en los primeros meses de 2025 y qué ocurre con los alimentos y la energía, todo ello coincidiendo con la conocida cuesta de enero.

El precio de la vivienda, en escalada

La vivienda ha ocupado un lugar destacado entre los temas económicos de 2024, ya sea por la compraventa o por los alquileres.

Tomando los datos disponibles del INE, el precio de la vivienda libre ha ido subiendo de forma constante a lo largo del año. En el primer trimestre de 2024 se incrementó un 6,3% con respecto al mismo periodo del año anterior, una cifra que fue creciendo hasta el 8,1% en el tercer trimestre. La vivienda de segunda mano en el tercer trimestre subió un 7,9%, algo que se notó más en la de obra nueva, con un alza del 9,8%.

Aparte de la compraventa, la tensión del mercado del alquiler se ha traducido en un descontento social que se expresó con una manifestación en Madrid el pasado mes de octubre, donde miles de personas reclamaban medidas para contener los precios.

La vivienda seguirá siendo, probablemente, uno de los temas económicos más debatidos en 2025. Teniendo en cuenta que la demanda va in crescendo en un mercado que, según los expertos, muestra una escasez de oferta, podría seguir encareciéndose a lo largo de este año, tanto en la compraventa como en los alquileres. Entretanto, el INE ha anunciado que aplicará un nuevo índice para actualizar los contratos de alquiler y así evitar subidas desmesuradas.

Alivio del euríbor y las hipotecas variables

Dentro de la vivienda también se encuentra el mercado hipotecario, cuyo pulso es diferente. El euríbor a un año —el índice más utilizado en España para calcular hipotecas variables— lleva cayendo de forma consecutiva desde marzo de 2024. Consiguió bajar del 3% en septiembre y finalmente ha cerrado en el 2,43% en diciembre. Esto ha ido, mes a mes, reduciendo la cuota de muchos hogares que han ido renovando sus contratos.

¿Y qué ocurrirá en 2025? Los analistas prevén que siga a la baja, ya que está descontando un recorte de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE). Lo que decida esta entidad determinará su evolución y algunos expertos pronostican que el euríbor pueda colocarse por debajo del 2% antes de junio de 2025. Si esto se cumple, seguirá aliviando el bolsillo de quienes tengan una hipoteca variable.

Subida del salario mínimo

Otro de los temas económicos de este año, esta vez dentro de lo laboral, será la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Todo apunta a que el SMI—actualmente de 1.134 euros mensuales en 14 pagas— se incrementará en 2025, pero aún no se sabe cuánto. La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, apuesta por elevarlo, al menos, tanto como la inflación, mientras que los sindicatos han expresado su preferencia por un rango del 5% al 6%, similar a la del año pasado. Teniendo en cuenta la media del 2,8% del IPC en los últimos 12 meses, el SMI se quedaría en 1.166 euros brutos mensuales si se opta por subirlo en la misma medida que la inflación.

Incremento de las pensiones

Con la llegada de 2025, las pensiones contributivas suben un 2,8%, lo que se traducirá aproximadamente en 40 euros de media cada mes y unos 560 euros al año. Se aplicará a quienes cobren una pensión de jubilación, de viudedad, de orfandad, de incapacidad permanente o en favor de cargas familiares. Según el Gobierno, beneficiará a 12 millones de personas.

Por su parte, las pensiones no contributivas y el Ingreso Mínimo Vital (IMV) se incrementan un 9%. También suben un 6% las pensiones mínimas, un porcentaje que llega hasta el 9,1% en el caso de aquellas con cónyuge a cargo y de viudedad con cargas familiares.

Se mantiene el nuevo subsidio por desempleo

En 2025 también seguirá vigente la nueva reforma del subsidio por desempleo que entró en vigor en noviembre y que amplía la cuantía percibida durante los seis primeros meses —570 euros al mes—, la rebaja en los seis meses siguientes —540 euros—, y sigue haciendo lo mismo el resto del tiempo que dure el subsidio —480 euros—.

Algunas cuotas de autónomos bajan

El sistema de cuotas aprobado en 2022 se seguirá aplicando en 2025, pero algunos autónomos notarán ciertos cambios. Con este mecanismo, los trabajadores por cuenta propia declaran en función de sus rendimientos netos, que se distribuyen en 15 tramos.

Concretamente, aquellos con ingresos de 670 euros a 1.300 euros pagarán algo menos que en 2024, mientras que la cuota de los que ganen de 1.300 a 1.700 euros será la misma. A partir de 1.700 euros, las cuotas aumentarán.

Luz y bombona de butano

La energía es otra de las cuestiones que seguirán determinando la economía doméstica.

El precio mayorista de la luz marcó un mínimo en abril de 13,6 euros de media y se mantuvo por debajo de los 60 euros en los primeros seis meses de 2024. Sin embargo, siguió subiendo y ha terminado superando los 100 euros en la recta final de 2024. Esto se debe a la baja contribución de la energía eólica y la nuclear a la producción eléctrica y, por tanto, habrá que ver si esta situación se mantiene en los primeros meses de 2025.

Mientras tanto, los descuentos del bono social térmico seguirán vigentes hasta el próximo 30 de junio. Aunque su cuantía irá bajando a medida que avanzan los meses, los hogares vulnerables seguirán beneficiándose de este mecanismo. Por otro lado, con la entrada del año el IVA de la luz sube del 10% al 21%. Esto, según la OCU, podría encarecer la factura de enero de algunos hogares.

Otro elemento energético importante es el gas. La bombona de butano de 12,5 kilos cuesta actualmente 16,61 euros, según la última revisión de noviembre, cuando ya subió un 4,27%. Lleva varios meses al alza, principalmente por la subida del coste de los fletes, la cotización de sus materias primas o el cambio de euro a dólar. Se prevé que vuelva a subir en 2025, con un límite máximo del 5%, por lo que la bombona podría superar los 17 euros tras la revisión de este mes de enero.

Alimentos

El IVA de los alimentos básicos vuelve al 4%, mientras que el de la pasta y los aceites de semilla también pasa al 10%. En el caso del aceite de oliva, el gravamen también se coloca en el 4%, en lugar del 10% que soportaba hasta ahora.

Carburantes y peajes

La gasolina de 95 y el diésel entran en 2025 con una ligera tendencia al alza que lleva arrastrando desde el pasado mes de septiembre, pero también con precios algo inferiores a los de hace un año. Esto lo notarán los conductores que hayan decidido viajar por carretera en estas fiestas. Su evolución en los próximos meses dependerá de varios factores, entre ellos las reservas de crudo y cuestiones geopolíticas a nivel mundial.

Por su parte, en 2025 las tarifas de peaje suben de base un 2% para los vehículos que no tengan dispositivo para el cobro electrónico del peaje, una cifra que llega hasta el 11,09% en el caso de vehículos que sí lo tengan. El incremento medio será así del 5,09%, según la disposición publicada en el BOE por el Ministerio de Transportes [ver PDF]. Se aplicará a las carreteras de peajes gestionadas por el Estado a través del SEITT. A partir de 2026, el incremento será del 2% para todos los vehículos.

El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha actualizado las tarifas de los peajes de las autopistas de titularidad estatal bajo concesión administrativa para 2025, que a partir de este 1 de enero subirán entre un 3,84 % y un 5,45 %, en función de las condiciones específicas de cada concesión.

En una nota enviada este martes, el departamento que dirige Óscar Puente explica que la actualización de las tarifas en la AP-51, AP-61, AP-6, AP-53, AP-66, AP-7 Alicante-Cartagena, AP-7 Málaga-Guadiaro, AP-68, AP-71, AP-9 y AP-46 se ha aprobado a través de una orden ministerial.

En el caso de las autopistas de peaje bajo concesión administrativa, el incremento autorizado responde, fundamentalmente, al crecimiento del índice de precios al consumo (IPC), tal como contempla la ley, y a las medidas extraordinarias y temporales aprobadas a finales de 2022 para limitar el alza de los peajes al 4 % en 2023.

Se mantienen las ayudas al transporte público

Las ayudas al transporte público seguirán vigentes con las mismas condiciones durante seis meses más, hasta el 30 de junio de 2025. Estas incluyen la gratuidad de los abonos de Cercanías, Rodalies y Media Distancia, además de las líneas de autobús estatal. A esto se añaden descuentos en títulos multiviaje y abonos mensuales del transporte público urbano y metropolitano.

¿Y qué ocurrirá después? A partir del 1 de julio, los descuentos vigentes hasta ahora cambiarán ligeramente y se mantendrán otras medidas como una rebaja del 50% al 70% en los abonos para jóvenes de 15 a 26 años, transporte público gratuito para menores de 15 años o un abono único de Cercanías y Rodalies por 20 euros al mes para todas las zonas de España.

Subidas en telefonía

Con el nuevo año también se encarecen algunos servicios de telefonía, móvil y televisión de pago. Vodafone aplicará una subida de 1,5 euros de media al mes, Orange lo hará entre 2 y 6 euros mensuales, una cantidad que será de 3 euros de media en el caso de Telefónica. En el caso de Simyo, las nuevas contrataciones subirán entre 2 y 3 euros al mes.