Una discoteca de Torremolinos prohíbe la entrada a "maricones" en su cartel promocional
- El Ayuntamiento de Torremolinos denunciará por delito de odio un club privado de la localidad
- La limitación del derecho de admisión no puede discriminar por orientación sexual, según la legislación
La localidad de Torremolinos (Málaga), reconocida internacionalmente como lugar de celebración de la diversidad sexual, se enfrenta a un caso de homofobia que ha indignado a buena parte de la ciudadanía y sus representantes. Una discoteca, que se presenta como "club privado marroquí de lujo", se ha promocionado en redes sociales con un reglamento que incluye, de forma explícita, la prohibición de acceso a los "maricones".
El reglamento, difundido en el perfil oficial del club en Instagram, establece una serie de normas, entre las que figuran la prohibición de "peleas, drogas, gorras, chanclas y maricones". Además, el cartel advierte de que "la dirección se reserva el derecho de acceso" y subraya que cualquier "comportamiento irresponsable o agresivo" será motivo de expulsión inmediata.
La cuenta del establecimiento figura como privada en la red social tras estallar la polémica, por lo que quienes no sean seguidores del perfil no pueden visualizar las publicaciones.
Una respuesta contundente desde el Ayuntamiento
La alcaldesa de Torremolinos, Margarita del Cid (Partido Popular), ha condenado rotundamente la actitud del establecimiento, llamado Casa Fátima Ino y ubicado en la céntrica calle de la Cruz. A través de sus redes sociales, Del Cid ha manifestado su rechazo. "El odio y la homofobia no tienen cabida aquí", ha asegurado. También, ha anunciado que el Ayuntamiento tomará medidas para impedir la apertura del local y cualquier evento promovido por este club. "Los únicos que sobran son ellos", ha escrito en un mensaje, acompañado de la etiqueta #LGTBI.
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Este viernes, la alcaldesa ha anunciado que el Ayuntamiento de Torremolinos denunciará por delito de odio a los promotores del evento: "Torremolinos es un prisma de color y de diversidad, es la ciudad donde todo el mundo puede ser lo que quiera ser y este episodio tan desagradable nos recuerda que no debemos dejar de reivindicar y defender la libertad y los derechos humanos".
La denuncia la presentará la regidora en representación del consistorio y también a título personal, por delito de injurias y de odio por los insultos en redes sociales vertidos hacia ella por la cuenta del club.
El local no disponía de ningún permiso ni licencia de actividad comercial u ocasional, según ha informado, por lo que se hubiera tratado de una fiesta ilegal. "La buena noticia es que eso no se va a producir en Torremolinos bajo ningún concepto; la mala noticia para ellos es que los vamos a denunciar por delito de odio y vamos a llegar hasta donde haga falta para desterrar estas actitudes homófobas", ha destacado.
La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha calificado el cartel de "intolerable" y "ataque directo a la igualdad". Ha recordado que se trata de una práctica ilegal y, por tanto, "una prohibición nula desde el punto de vista jurídico".
La polémica ha adquirido mayor relevancia al tener lugar en una localidad consolidada como uno de los destinos favoritos del turismo LGTBI en Europa. Torremolinos acoge cada año el Pride, que reúne a miles de personas de todo el mundo por la diversidad sexual.
La indignación ha inundado también las redes sociales, que han compartido masivamente el cartel de la discoteca para condenar su mensaje.
El derecho de admisión en España
España cuenta con legislación que prohíbe la discriminación por orientación sexual. La ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI contempla en su artículo 25 medidas en el ámbito del ocio y se refiere a "la correcta aplicación del derecho de admisión" para evitar que discrimine "por razón de orientación sexual, identidad sexual, expresión de género o características sexuales".
Aunque la dirección de un local puede limitar el derecho de admisión, deben existir razones objetivas que lo justifiquen. De no ser así, podría contravenir un derecho fundamental, recogido en la Constitución Española, que, en su artículo 14, prohíbe la discriminación por sexo, orientación sexual o nacionalidad, entre otras.