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Banco Sabadell regresará a Cataluña siete años después y en plena opa del BBVA

  • La entidad se marchó a Alicante en 2017 ante una posible declaración unilateral de independencia

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Banco Sabadell regresa a Cataluña siete años después y en plena opa de BBVA
Banco Sabadell regresa a Cataluña siete años después y en plena opa de BBVA EFE/Toni Albir

El Banco Sabadell volverá a tener su sede social en Cataluña siete años después de su marcha y en un momento clave por la opa de BBVA. La entidad financiera se trasladará de Alicante a San Cugat del Vallés (Barcelona), según han confirmado fuentes a RTVE y ha avanzado ABC.

La decisión está pendiente de su aprobación por parte del consejo de administración de la entidad, sin una fecha prevista. Este movimiento se produce en un contexto marcado por la oferta pública de adquisición (opa) que BBVA quiere lanzar sobre Banco Sabadell.

En el plano político, también coincide en el tiempo con la presencia del socialista Salvador Illa en la presidencia de la Generalitat, a la que accedió el pasado verano de 2024, y en el marco de las negociaciones del Gobierno con los partidos independentistas catalanes, incluido el trámite de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

Por lo pronto, el president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha recibido por parte del presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, y su consejero delegado, César González Bueno, la garantía de que el compromiso de la entidad con la Comunidad Valenciana y su tejido económico "sigue intacto" aunque su sede vuelva a Cataluña.

Según señalan a EFE y Europa Press fuentes de Presidencia de la Generalitat, Mazón ha conversado esta tarde tanto con Oliu como con González Bueno, quienes le han informado de la decisión de la entidad.

El Consell ha señalado que "no puede más que respetar la decisión de la empresa en el ejercicio de su libertad para fijar su sede donde considere". "La prioridad absoluta para el Consell es garantizar el mantenimiento del empleo y el negocio de esta entidad financiera en nuestro territorio, así como el flujo del crédito a consumidores, pymes e industrias y así se le ha requerido a los representantes de Banco Sabadell", han señalado las fuentes.

Siete años fuera de Cataluña

En pleno 'procés' y tras la celebración del referéndum de autodeterminación en octubre 2017, el consejo de administración de Banco Sabadell acordó trasladarse de Cataluña a Alicante para garantizar la seguridad jurídica ante una posible declaración unilateral de independencia.

Para ello se ayudó del decreto ley aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy, que permitía a las empresas acordar el cambio de sede social sin someter esa decisión a la junta de accionistas.

Se decantó por Alicante, descartando otras opciones como Madrid o Asturias, por ser la ciudad donde tenía su sede la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), adjudicada a Sabadell al precio simbólico de un euro a finales de 2011.

La posibilidad de regresar a Cataluña ha sido en los últimos años una pregunta recurrente en las ruedas de prensa y comparecencias que han ofrecido los dirigentes del banco, que hasta el momento siempre han rehusado hablar de avances en esa dirección

De culminarse este traslado, se sumaría a la empresa Molins, antes Cementos Molins, que el pasado mes de diciembre acordó la vuelta de su sede social a Cataluña, y Agbar, que hizo su anuncio en 2018, aunque ya en aquel momento era propietaria solo de los negocios catalanes de concesión de la gestión de aguas del grupo. A ella, le han seguido algunas otras como Laboratorios Ordesa o Red Points.

La patronal autonómica valenciana (CEV) admite que, aunque respeta la autonomía de las empresas, le disgusta la decisión del Banco Sabadell y advierte de que supone "una pérdida significativa" para la Comunidad Valenciana. "Durante los años en los que el Banco Sabadell ha tenido su sede en nuestra región, ha contribuido de manera importante al desarrollo económico local", según el presidente de la Confederación Empresarial, Salvador Navarro.

Y advierte: "Esta decisión, aunque legítima, no nos gusta, e implica un desafío para nuestra economía, al tiempo que subraya la necesidad de seguir trabajando para ofrecer un entorno aún más competitivo y atractivo para la inversión empresarial".