Rusia e Irán, aliados por obligación
- La guerra de Ucrania ha reforzado la cooperación entre dos países que históricamente no han mantenido buenas relaciones
- Guerra Ucrania - Rusia, en directo
Hace unos días se reunieron en Moscú los presidente de los dos países más sancionados del mundo. Vladimir Putin y Masoud Pezeshkian firmaron en el Kremlin un acuerdo de asociación estratégica para reforzar los lazos entre Rusia e Irán y apuntalar una alianza que se ha intensificado como consecuencia de la guerra de Ucrania. ¿Por qué se necesitan Irán y Rusia? ¿Qué armamento recibe el Kremlin del régimen iraní? Son algunos de los temas que analizamos en el nuevo capítulo del pódcast 'Diario de Ucrania' con Juan Carlos Pastor, profesor de la Universidad Complutense, doctorando en Relaciones Internacionales y coautor del libro 'La política exterior de Irán', editado por Catarata.
Un acuerdo para enfrentarse a un nuevo ciclo geopolítico
Además de las sanciones, Rusia e Irán comparten un claro un sentimiento antioccidental y acaban de sufrir una inesperada derrota en Siria. "Están unidos por la necesidad de reforzar la multipolaridad. Llevan años trabajando por reducir la polaridad de Estados Unidos e intentando construir espacios que les permitan no someterse a las reglas del juego de Occidente. Por eso, considero que este acuerdo sigue más bien una lógica de enfrentarse a un nuevo ciclo geopolítico", explica Pastor.
No es casual que la firma del acuerdo se produjera tres días antes de la toma de posesión de Donald Trump como presidente de Estados Unidos y semanas después del derrocamiento de Bachar al Asad. "Era un aliado tanto de Rusia como de Irán y su caída ha afectado a los intereses estratégicos de ambos, abunda Pastor, que cree que Moscú y Teherán encaran ese nuevo ciclo geopolítico en una situación peor que hace dos o tres años.
La ayuda de Irán en Ucrania
El acuerdo no incluye una cláusula de asistencia mutua en caso de agresión. Es decir, que Rusia e Irán no estarían obligados a defenderse el uno al otro, como sí contempla el acuerdo que Putin firmó con Corea del Norte hace unos meses. Durante la firma ni Putin ni Pezeshkian hablaron de Ucrania. "Hay una diferencia entre la respuesta política de Irán hacia el conflicto ucraniano y la respuesta militar. A la hora de hacer declaraciones, el régimen iraní ha sido más vago, ya que uno de los principales de su Constitución es la defensa de la integridad territorial. Por lo tanto, que tu aliado más cercano invada otro país, pues va en contra de tus principios", subraya Pastor.
Sin embargo, el apoyo iraní a Moscú en Ucrania es más que evidente. Los drones Shahed fabricados en Irán han sido fundamentales para que Rusia haya podido atacar sin cesar las infraestructuras energéticas ucranianas. "Moscú se aprovecha de que Irán tiene una industria militar sobre la que pesan muchísimas sanciones y eso hace que sea mucho más barata de adquirir. Un ejemplo son esos drones Shahed. Su coste de producción es comparativamente mucho menor que los drones que Ucrania recibe de Estados Unidos".
Unas relaciones históricamente malas
Aunque ahora parezca lo contrario, Rusia e Irán nos han sido siempre tan buenos aliados. "Sus relaciones han sido históricamente negativas. El punto de inflexión fue a partir del año 2010 con la guerra en Siria, y más recientemente la guerra de Ucrania, que les ha convertido en aliados por obligación. Irán necesita a Rusia para mantener cierto poder en Oriente Medio y ahora mismo Rusia necesita Irán para abastecerse en su guerra con Ucrania", explica el experto.
Una de las grandes incógnitas es cómo responderá Trump a esta alianza entre Rusia y uno de los países con los que peor se lleva Estados Unidos. "Putin no ha ocultado que tiene una relación estrecha con Vladimir Putin. Es posible que Irán pueda beneficiarse de este entendimiento y evitar convertirse en el principal objetivo a abatir por Estados Unidos. Pero es difícil vaticinar algo, porque las decisiones de Trump van a ser impredecibles", concluye.