Sánchez acepta que se debata la proposición de Junts de una cuestión de confianza pero no la ve "necesaria"
- La proposición no de ley está en estudio después de que la mesa del Congreso aplazase la decisión sobre su tramitación
- Sánchez ha sido muy claro sobre si se someterá a una cuestión de confianza: "No veo la necesidad de hacerlo"
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha aceptado que se debata la proposición no de ley planteada por Junts para que se someta a una cuestión de confianza en el Congreso, aunque "no lo ve necesario". Esta decisión la ha tomado a cambio del apoyo de los independentistas para sacar adelante su paquete de medidas sociales que decayó la semana pasada, tras el voto negativo de los de Puigdemont y el PP a la ley ómnibus.
Sin embargo, esa tramitación no implica que finalmente Sánchez se someta a ese debate en el Congreso, cuya convocatoria corresponde únicamente al jefe del Ejecutivo.
"Efectivamente, hemos llegado a un acuerdo. Lo que se reconoce es lo que se dice la Constitución, previa deliberación del Consejo de Ministros", ha asegurado Sánchez en la rueda de prensa posterior, precisamente, al Consejo de Ministros.
Cuestionado sobre si estaría dispuesto a someterse a esa cuestión de confianza, Sánchez ha sido muy claro: "No veo la necesidad de hacerlo".
El pasado 16 de enero, la Mesa del Congreso de los Diputados decidió seguir analizando la proposición no de ley de Junts y descartó así tomar ninguna decisión sobre su admisión a trámite.
La iniciativa planteada por Junts surgió a finales de año, cuando el expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont anunciaba que su partido había registrado en el Congreso una iniciativa parlamentaria para pedir a Pedro Sánchez que se sometiese a una cuestión de confianza.
"Hoy Sánchez sigue demostrando que no es de fiar", advertía Puigdemont en una rueda de prensa desde Bruselas para evaluar el primer año de acuerdo entre su partido y el PSOE para la investidura de Sánchez.
Carles Puigdemont anunciaba la proposición no de ley en una rueda de prensa en el Press Club de Bruselas en la que valoró el primer año del acuerdo con el PSOE para investir a Sánchez presidente del Gobierno, tras una reunión de la cúpula de Junts.
"No ha hecho lo suficiente para merecer nuestra confianza", afirmaba Puigdemont. "Ha llegado el momento de un punto de inflexión o de dejarlo correr para no hacer perder el tiempo ni la paciencia a nadie", avisaba el expresidente de la Generalitat.
Un acuerdo que desatasca las negociaciones
Con este acuerdo, Junts "levanta" además la suspensión de las negociaciones sectoriales con el PSOE que anunció hace unas semanas el expresidente catalán Carles Puigdemont, según ha informado la formación independentista en un comunicado.
El Gobierno había retrasado este martes la reunión del Consejo de Ministros para apurar hasta el último minuto sus negociaciones con Junts, que finalmente han culminado en un acuerdo que zanja el tira y afloja que habían protagonizado ambas partes en los últimos días.
Según Junts, el acuerdo incluye la aprobación de la revalorización de las pensiones, el mantenimiento de las bonificaciones para el transporte público, las ayudas relativas a la dana y medidas para combatir las ocupaciones delincuenciales".
En este apartado, añade Junts, "se prevén medidas para proteger a las familias vulnerables, así como medidas para garantizar el cobro del alquiler a los propietarios y el pago de los desperfectos ocasionados por los okupas o por los morosos en las viviendas".
Quedan fuera de este decreto, según detalla el comunicado, "todas las medidas tributarias, que se negociarán más adelante", así como las medidas relativas a las ayudas a empresas electro intensivas, las medidas para suavizar el impacto contable del impuesto a los bancos y las subvenciones a empresas sin el balance previo pertinente.
Tampoco incluye, según el partido de Carles Puigdemont, "la perpetuación de unos anticipos para la financiación autonómica sin pactar una redistribución diferente de los objetivos de déficit y sin haber abierto una negociación seria sobre el concierto económico de Cataluña".
El decreto tampoco incorpora -añade el comunicado- la modificación de la ley de la sociedad de la información o del servicio postal, que según Junts "suponían la vulneración de las competencias de Cataluña".