EE.UU. ofrece indemnizaciones a los trabajadores federales si renuncian antes del 6 de febrero
- Hay más de dos millones de estos empleados, de los que se espera que entre el 5% y el 10% dimita
- Los sindicatos aseguran que será "un caos" y que la oferta "no debe considerarse voluntaria"
La Administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ofrecido indemnizaciones a los dos millones de trabajadores federales si renuncian antes del 6 de febrero, según un correo al que ha tenido acceso Reuters y como ha informado a EFE este martes la Oficina de Administración de Personal.
Un alto funcionario del Gobierno ha dicho a la cadena NBC News que esperan que entre el 5% y el 10% de la fuerza laboral federal de EE.UU. renuncie, lo que, según estiman, podría generar alrededor de 100.000 millones de dólares en ahorros.
Quienes acepten esta "dimisión diferida" podrán acceder a un paquete de indemnización de aproximadamente ocho meses de salario y beneficios.
De acuerdo con Axios, los trabajadores recibirán detalles sobre esta opción más tarde este martes y la oferta se aplica a todos los empleados federales de tiempo completo, excepto al personal militar, a los componentes del Servicio Postal y a quienes trabajan en la aplicación de la ley de inmigración o en la seguridad nacional.
Sindicatos dicen que será un "caos"
El sindicato de empleados federales más grande, la Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales (AFGE), ha dicho en un comunicado que estas indemnizaciones tendrán consecuencias no deseadas que causarán caos para los estadounidenses.
"La cantidad de funcionarios públicos no ha cambiado significativamente desde 1970, pero ahora hay más estadounidenses que dependen de los servicios gubernamentales. Purgar al gobierno federal de funcionarios públicos de carrera dedicados tendrá consecuencias enormes e imprevistas que causarán caos para los estadounidenses que dependen de un gobierno federal que funcione", ha dicho el presidente nacional de AFGE, Everett Kelley.
Según la AFGE, la oferta "no debe considerarse voluntaria". "Entre la oleada de decretos y políticas antiobreras, está claro que el objetivo de Trump es convertir al gobierno federal en un entorno tóxico en el que los trabajadores no puedan quedarse ni siquiera si lo desean", ha escrito en X.
En su primer día como mandatario, Trump firmó órdenes ejecutivas que exigen el regreso a tiempo completo al trabajo presencial -al menos cuatro días a la semana- para los empleados del gobierno y que congelan la contratación de trabajadores federales.
También firmó una orden que desmantela algunas de las iniciativas de diversidad, equidad e inclusión del expresidente Biden dentro del gobierno federal.