Mueren al menos 30 personas en una estampida en un festival religioso en la India
- Los partidos de la oposición culpan a la "mala gestión" de las autoridades
- El festival hindú Kumbh Mela es la mayor reunión humana del planeta y se espera que acoja a 450 millones de peregrinos
Al menos 30 personas han fallecido y 90 han resultado heridas en la madrugada de este miércoles en la India durante una estampida en un multitudinario festival hindú. El festival Kumbh Mela, que comienza en la ciudad de Prayagraj, en el estado de Uttar Pradesh, es la mayor reunión humana del planeta y reúne a millones de peregrinos que quieren cumplir el ritual de sumergirse en las aguas de los ríos sagrados para el hinduismo, el Ganges y el Yamuna.
Un funcionario del Hospital SRN de Prayagraj, donde han sido trasladados algunos de los heridos, ha indicado que los fallecidos habrían sufrido ataques cardíacos. El primer ministro indio, Narendra Modi, ha ofrecido sus condolencias a quienes han perdido a sus familiares. Por el momento, 25 cadáveres han sido identificados y al menos 36 heridos están siendo atendidos en hospitales cercanos.
Varios asistentes coinciden en que la multitud ha aparecido de repente y la gente ha empezado a empujarse entre ella por la falta de espacio. "Algunas personas que nos empujaron se reían mientras les suplicamos que fueran amables con los niños", ha señalado una mujer en una declaración recogida en video por la agencia india PTI. Otro asistente ha asegurado ante las cámaras del canal local ABP que "había muchas mujeres y niños que se habían quedado para bañarse aquí. De repente, llegó una multitud y la gente empezó a atropellarse. La Policía no interfirió y dejó que ocurriera (...) Madres, hermanas e hijos han muerto ¿A qué vinieron y con qué se van?".
"Vimos gente cayendo, tumbados unos sobre otros y aplastando a otros para encontrar un lugar seguro. Según avanzábamos había ropa, cuerpos de personas, y sus pertenencias esparcidas por todas partes", ha contado a Reuters Shweta Tripathi, residente de Sant Kabir Nagar, en Uttar Pradesh. "Todo sucedió tan rápido que no pudo procesarlo y empecé a llorar. No creo que vuelva nunca más", ha añadido.
La estampida se ha producido en una de las rutas que dirige a las multitudes de devotos hacia el ghat (escalinata para facilitar el baño en el río) de Sangam, lugar en el que confluyen los ríos Ganges y Yamuna y por donde, según la tradición, pasa también el mítico río Sarasvati. Según las creencias hinduistas, un baño en sus aguas purifica los pecados de los fieles, rompe el ciclo de reencarnaciones y los conduce a la liberación espiritual.
Otro asistente al festival, Abhishek Kumar, ha declarado al canal de noticias ABP que "no había absolutamente ninguna coordinación" entre las personas que regresaban de bañarse y las que corrían hacia río. "Algunas de las mujeres de nuestro grupo eran mayores y tropezaron y se cayeron. La gente les pasó por encima en su prisa por salir", ha asegurado y ha lamentado que tardaron más de una hora en llegar al hospital improvisado cerca del lugar del festival por la multitud. "Por lo que pudimos ver, las mujeres que trajimos aquí no respiraban, pero no lo sabemos con seguridad. Simplemente las levantamos sobre nuestros hombros y corrimos", ha añadido.
La oposición culpa a "la mala gestión"
Las autoridades han estimado la llegada al festival de unos 400 millones de personas. Hasta el pasado martes, 200 millones ya habían acudido al festival, que comenzó hace dos semanas, y 57 millones se habrían bañado en el río sagrado tan solo durante durante este miércoles hasta las 16.00 (hora local). Las autoridades esperaban que un récord de 100 millones de personas se congregaran en el municipio temporal de Prayagraj este miércoles, y habían desplegado personal médico y de seguridad adicional junto con tecnología basada en software de inteligencia artificial para controlar a la multitud. La Policía había instalado numerosas barreras de metal o madera para delimitar las rutas en un sentido u otro, pero es habitual ver a grandes cantidades de personas subidas a estas barreras, en algunas casos muy endebles, especialmente cuando la multitud es mayor.
Después de la estampida, se ha desplegado la Fuerza de Acción Rápida (RAF), una unidad especial de policía convocada durante la crisis, para controlar la situación. Los "baños sagrados" también han sido regulados de cerca, con los devotos saliendo primero y los ascetas comenzando sus procesiones solo después de que se redujera el número de devotos. Tras el suceso, las autoridades locales han pedido a los peregrinos que eviten acercarse hasta Sangam. "Báñense en el ghat más cercano del río Ganges, no intenten ir hacia Sangam", ha afirmado Adityanath en un comunicado.
Los partidos de la oposición han culpado de la estampida a lo que llamaron la "mala gestión" del Gobierno y la "cultura VIP". "La cultura VIP debe ser frenada y el Gobierno debe tomar mejores medidas para satisfacer las necesidades de los devotos comunes", ha declarado en X Rahul Gandhi, líder del principal partido de la oposición en el Congreso, y se ha referido a los políticos y celebridades que reciben un trato diferente.
Entre los asistentes se encontraban el ministro de Defensa, Rajnath Singh, el ministro del Interior, Amit Shah, el presidente del Grupo Adani, Gautam Adani, y celebridades como Chris Martin, de Coldplay, que según los medios locales llegó a Prayagraj el pasado martes. Se esperaba que Modri visitara el festival en febrero.
Hasta 100 millones de peregrinos en un día
El Kumbh Mela es la mayor congregación humana y se espera que este año acoja a 450 millones de visitantes entre el 13 de enero y el 26 de febrero. Según datos de la organización, 50 millones de personas lo visitaron este lunes, en vísperas de la jornada más importante.
Este 29 de enero se celebra la fecha de Mauni Amavasya, que está considerada la jornada más favorable para sumergirse en las aguas sagradas, ante lo que las autoridades preveían la llegada de hasta 100 millones de peregrinos a lo largo del día.
De cumplirse esta previsión, al menos 70.000 personas por minuto deberán entrar y salir del agua para que nadie se quede sin su baño sagrado.
Tanto Modi como el jefe de Gobierno de Uttar Pradesh, Yogi Adityanath, habían prometido una impecable organización para este colosal festival que se celebra cada doce años, en base a cálculos astronómicos. Con una inversión cercana a los 1.000 millones de dólares, para erigir una inmensa ciudad temporal que acogiera a los peregrinos, el Gobierno regional confiaba en evitar incidentes como la fatídica estampida que tuvo lugar en 2013 en la estación de tren de Prayagraj en la que murieron 36 personas.