Moeve desarrollará 30 plantas de biometano en España con una inversión de 600 millones
- El anuncio llega un día después de que Repsol comunicara que invertirá más de 800 millones de euros para generar metanol
- La empresa espera recortar un 55% sus emisiones de CO2 hacia el año 2030
Moeve, antes Cepsa, desarrollará 30 plantas de biometano en España. La empresa ha anunciado este jueves un plan de inversión de 600 millones de euros para la construcción, junto con sus socios, de unas 30 nuevas plantas de biometano para 2030 que proyecta en toda España, aunque sitúa a Andalucía, Cataluña y Galicia entre las regiones con más potencial.
El anuncio se conoce justo un día después de que otra compañía del sector, Repsol, comunicara que invertirá más de 800 millones de euros en una planta, pionera en Europa, para generar metanol renovable en Tarragona. Estos anuncios han coincidido con la caída de la continuidad del impuesto extraordinario a las energéticas tras el rechazo del Congreso.
En su caso, Moeve aspira a producir biometano a partir de residuos agrícolas y ganaderos, y gestionar una cartera de proyectos de 4 teravatios hora (TWh) en 2030.
Producción de energía suficiente para 568.000 hogares
La producción total, equivalente a la energía suficiente para 568.000 hogares, supondrá la revalorización de 10 millones de toneladas anuales de residuos y evitará la emisión de 728.000 toneladas de CO2 al año, similar a la plantación de 48,5 millones de árboles.
Para el desarrollo de estas plantas, Moeve está cerrando acuerdos con socios como la madrileña Kira Ventures y la alemana PreZero, y negocia nuevas alianzas. De hecho, acaba de firmar una con la asturiana InproEner para desarrollar cinco plantas de biometano en España, que se espera que estén operativas entre 2028 y 2029.
Cada instalación producirá alrededor de 50 gigavatios hora (GWh) al año, sumando hasta 250 GWh anuales de biometano.
La utilización de este gas renovable, en lugar de fósil, permitirá a Moeve reducir las emisiones de CO2 de sus parques energéticos, plantas químicas, las de sus clientes y socios estratégicos industriales, además de constituir un vector complementario para la producción de hidrógeno verde e impulsar la movilidad sostenible.
El director de Biocombustibles de Moeve, Matteo Vaglio, señaló que el biometano es "una apuesta clave" del grupo para descarbonizar su actividad y la de sus clientes, "ya que permite ser utilizado de inmediato en las industrias y redes de transporte existentes, facilitando así su integración en el mercado energético actual, al tiempo que impulsa el desarrollo económico y social de zonas rurales".
El Biometano como vía hacia la descarbonización
Estos planes para aumentar la producción de biometano favorecen la estrategia de descarbonización de la energética, que tiene una hoja de ruta establecida para recortar en 2030 un 55% sus emisiones de CO2 respecto a 2019 y aspira a ser neutra en carbono antes de 2050. En cuanto la intensidad de carbono de su energía vendida, el objetivo es reducirla entre un 15% y un 20% en 2030.
Durante su ciclo de vida, el biometano reduce más del 90% de las emisiones de CO2 en comparación con el gas natural convencional. El biogás se produce mediante un proceso natural de descomposición (digestión anaerobia) de residuos orgánicos biodegradables agrícolas, ganaderos e industriales.
Posteriormente, tras su depuración mediante un proceso tecnológico denominado 'upgrading', se convierte en biometano. Las plantas de producción de biometano contribuyen al desarrollo económico sostenible del mundo rural, impulsando dos sectores clave para la economía española, como el agrícola y el ganadero.
Además, las plantas de biometano son una alternativa sostenible al tratamiento de residuos, ya que permiten revalorizarlos para la producción de energía renovable y para la producción de subproductos como abonos o fertilizantes sostenibles que pueden utilizarse en las tierras de cultivo de la zona.