El TSJC rechaza investigar la querella de Puigdemont contra el juez Aguirre por la instrucción de la trama rusa del 'procés'
- El expresidente catalán acusaba al juez de prevaricación y malversación por su instrucción del caso Volhov
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha rechazado investigar la querella que presentó el expresidente catalán Carles Puigdemont contra el juez Joaquín Aguirre, al que acusaba de prevaricación y malversación de caudales públicos por su instrucción del caso Volhov sobre las supuestas conexiones del 'procés' en Rusia.
En un auto al que ha tenido acceso RTVE.es, la sala civil y penal del TSJC, de acuerdo con el criterio de la Fiscalía, considera que no hay indicios para admitir a trámite la querella que Puigdemont interpuso contra el juez, ya jubilado, por su decisión de investigarle por la supuesta trama rusa del 'procés', pese a que la Audiencia de Barcelona había frenado la instrucción del caso.
El TSJC inadmite la querella de Puigdemont "por no ser los hechos descritos en ella indiciariamente constitutivos de ninguno de los delitos a que la misma se refiere o de cualquier otro, denegando, por tanto, la adopción de las medidas cautelares y la práctica de las diligencias de investigación que se solicitan por los querellantes".
Previo a resolver que no admite la querella, el TSJC indica que la Sala de lo Civil y Penal es competente para resolver sobre supuestos delitos cometidos por sus jueces en el "ejercicio de sus respectivas funciones", aunque en la actualidad el querellado está ya jubilado, pero en el momento de la denuncia "era magistrado en activo".
Por su parte, la Fiscalía ya había informado sobre la inadmisión de la querella por "no resultar acreditado, ni de forma indiciaria, que los hechos atribuidos en el escrito de querella al querellado conformen los delitos de prevaricación judicial dolosa o culposa y de malversación de caudales públicos, ni ningún otro tipificado en el Código Penal.
La querella de Puigdemont
Para la defensa de Puigdemont, el juez le había imputado "sorpresivamente" unos hechos relativos a la "injerencia rusa", "desobedeciendo lo decidido por la Audiencia Provincial de Barcelona", en el que estimaba el recurso de los letrados y porque las dos últimas prórrogas no estaban debidamente justificadas. Asimismo subraya que el juez tenía como "verdadero objeto frustrar de manera perversa la aplicación en favor de los querellantes de la amnistía".
Tras abrir la nueva pieza para sortear la decisión de la Audiencia, Aguirre remitió una exposición razonada al Tribunal Supremo en la que, una vez rechazó amnistiar a Puigdemont, pedía que se le investigara por un delito de traición junto al diputado de Junts en el Parlament Francesc Dalmases y al expresidente catalán Artur Mas, entre otros, por las supuestas conexiones en Rusia para el procés.
Las defensas recurrieron esa nueva pieza separada y, el pasado mes de diciembre, la Audiencia de Barcelona la anuló en un duro auto en el que reprendía al juez por el "claro y flagrante incumplimiento" de la resolución en la que, el pasado mes de mayo, le ordenó zanjar la investigación sobre la supuesta injerencia rusa en el 'procés'.
En su auto, el TSJC argumenta que las "irregularidades procesales" que pudieran existir en la nueva pieza separada abierta por el juez para investigar a Puigdemont no son suficientes para constituir un delito de prevaricación, dado que no supuso una "desobediencia palmaria" de lo ordenado por la Audiencia de Barcelona ni se basó en una resolución injusta.
Para la sala, la prevaricación solo ocurre "cuando la resolución del juez excede del contenido de la autorización legal o cuando este decide motivado por consideraciones ajenas al ordenamiento jurídico", sin que pueda encuadrarse en ese delito un "error susceptible de ser corregido mediante el sistema de recursos".
Reconoce la sala que algunas de las expresiones utilizadas por el magistrado en la resolución que abría la nueva pieza separada sobre la llamada "trama rusa" podrían "ser reprobadas, por desafortunadas y extravagantes, además de innecesarias", pero por sí solas no constituyen un delito de prevaricación judicial.
El tribunal afea al juez el "caos y retraso" en su investigación
El Tribunal afea al juez el "caos y retraso" en su investigación por las supuestas conexiones del 'procés' con el Kremlin, por lo que cree que su decisión de abrir una nueva pieza separada pudo estar motivada por su "repentina preocupación por reordenar y reubicar" todas aquellas diligencias que tuvieran algún "objeto común".
En ese sentido, el TSJC se distancia de la Audiencia de Barcelona al avalar la decisión de Aguirre de reactivar la investigación sobre la injerencia rusa, con la amnistía ya en vigor, porque a su parecer basó su nueva pieza en diligencias procedentes de otras, "todas ellas válidas", sin que su objeto coincidiera con el de las demás.
Eso sí, la sala precisa que su análisis sobre la nueva pieza de la trama rusa no sustituye -"no nos estaría permitido"- la resolución de la Audiencia de Barcelona de declararla nula, dado que este es "el único tribunal legitimado par decidir sobre el alcance y significado" de sus decisiones.