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Cientos de personas consiguen aplazar hasta el 4 de febrero el desahucio previsto en la casa Orsola de Barcelona

  • Josep Torrent, de 49 años, que será el primer desalojado, es profesor y lleva 22 viviendo en la finca
  • La comitiva judicial ha llegado a las 10:30 a la vivienda para proceder al desahucio, pero no han podido acceder

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Cientos de vecinos y activistas se concentran frente a la Casa Orsola
Cientos de vecinos y activistas se concentran frente a la Casa Orsola EFE/Quique García

El desahucio previsto este viernes en la casa Orsola de Barcelona ha sido aplazado al 4 de febrero después de que cientos de vecinos se hayan concentrado este viernes desde primera hora en Barcelona para apoyar al inquilino Josep Torrent.

Como estaba previsto, a las 10:30 horas ha llegado la comitiva judicial para proceder al desahucio, pero no han podido acceder a la vivienda debido al gran número personas concentradas, que pasado la noche en el interior del edificio y en la calle, acampados.

En una gran pancarta colgada de la fachada del edificio puede leerse: "No se podrán desahuciar, defendemos la casa Orsola".

Torrent, de 49 años, es profesor y lleva 22 viviendo en la casa Orsola, un símbolo de la crisis de la vivienda después de que en 2021 la empresa inversora Lioness Inversiones adquiriera sus dos fincas y anunciara a los vecinos que debían abandonar sus viviendas cuando finalizaran sus contratos.

Tres años después, Torrent es el primer vecino del inmueble que se enfrenta a un desahucio, y denuncia que la propiedad quiere echar a todos los inquilinos para hacer alquileres de temporada, subiendo los alquileres de los 700 euros que él pagaba a los más de 2.000 que pagan los nuevos vecinos.

El Ayuntamiento defiende su gestión

El Ayuntamiento de Barcelona ha explicado que en las fincas se encuentran 27 viviendas que en el momento de la compra de la finca se encontraban en diferentes regímenes de alquiler y otras vacías.

Asimismo, ha defendido su papel un día después de acceder a mediar con la propiedad y los vecinos, algo que el Sindicato de Inquilinos ha tildado de "sorprendente"

El sindicato ha asegurado que "por mucho que gesticule a última hora, el Ayuntamiento de Barcelona también es culpable".

"El papel del Ayuntamiento ha sido el de estudio y acompañamiento de los vecinos para evaluar la existencia de situaciones de vulnerabilidad que pudieran ser susceptibles de alquiler social por parte de la propiedad", ha asegurado el ayuntamiento en un comunicado, incidiendo en que el servicio municipal de vivienda está haciendo un seguimiento del caso y que Servicios Sociales también está trabajando en ello por si fuera necesario un realojo temporal.

Illa ve la vivienda como un "factor de desigualdad"

El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha lamentado que el acceso a la vivienda es "uno de los principales factores de desigualdad al incrementarse su precio muy por encima de la renta disponible de los ciudadanos" y lo ha ejemplificado con la Casa Orsola.

"Tenemos hoy un recordatorio muy desgarrador muy cerca de aquí", ha dicho en la Escola Industrial de Barcelona, ubicada en el mismo barrio que Casa Orsola, durante una conferencia para presentar el plan del Govern para recuperar el liderazgo económico de Cataluña, que incluye una inversión de 18.500 millones de euros.

Illa ha asegurado que escuchará a los ciudadanos y dará respuesta al problema de la vivienda y ha defendido la aprobación del régimen sancionador que impone multas de hasta 900.000 euros para los que incumplan el tope del alquiler: "En Cataluña la ley se cumple".