Hamás aplaza la liberación de rehenes del sábado entre acusaciones mutuas con Israel de "violar" el alto el fuego
- Acusa a Israel de no cumplir los términos del acuerdo
- Israel ordena al Ejército prepararse para cualquier escenario
El grupo islamista Hamás ha anunciado que aplaza la próxima liberación de rehenes, prevista para este sábado 15 de febrero, al acusar a Israel de "violaciones" del acuerdo de alto el fuego. Israel ha respondido que son los islamistas los que están vulnerando lo pactado al retrasar la entrega de cautivos y ha ordenado a su Ejército "prepararse para cualquier escenario".
Abu Obeida, portavoz de las Brigadas al Qasam, el brazo armado de Hamás, ha argumentado su decisión en un comunicado: "En consecuencia, la entrega de los prisioneros sionistas, cuya liberación estaba prevista para el próximo sábado 15 de febrero, se pospondrá hasta nuevo aviso".
Mientras, las fuerzas de defensa israelíes han decidido "elevar el nivel de preparación" y "reforzar significativamente la zona con fuerzas adicionales para misiones defensivas", según han señalado en una publicación en su cuenta de X. Por su parte, los mediadores que han negociado el alto el fuego temen su "colapso".
Aun así, Hamás ha asegurado que "la puerta sigue abierta para el intercambio" de rehenes israelíes por palestinos, siempre que Israel cumpla con los plazos y los requisitos pactados en el acuerdo de tregua. "Hamás ha hecho este anuncio intencionalmente cinco días antes de la entrega programada de prisioneros, lo que da a los mediadores tiempo suficiente para presionar a la ocupación (israelí) para que cumpla con sus obligaciones", ha informado el grupo islamista en un comunicado oficial.
Según Abu Obeida, Israel no ha cumplido con sus obligaciones del actual acuerdo de alto el fuego y acusa a su Ejército de obstruir el flujo de ayuda humanitaria en Gaza y de cometer ataques contra los palestinos que regresan al norte del enclave.
El ministro israelí de Defensa, Israel Katz, ha sido el primero en responder a Hamás y ha tildado la medida de "una completa violación del acuerdo". Antes del anuncio de Hamás, la delegación israelí que negociaba en Doha la segunda fase del acuerdo, que debe incluir el fin de la guerra, había regresado. Sin embargo, no se ha aclarado si se debe a escollos en las conversaciones o para consultas. "No permitiremos que se vuelva a la realidad del 7 de octubre", ha matizado Katz.
El portavoz del ala militar de Hamás ha explicado que el grupo "ha estado monitoreando las violaciones del enemigo y su incumplimiento de los términos". Pone como ejemplo el retraso en la fecha en la que los gazatíes pudieron regresar al norte del enclave, lo que debería haber sucedido el día 7 del acuerdo, pero que Israel retrasó cinco días hasta la liberación de la rehén Arbel Yehud, el 30 de enero. "La resistencia ha cumplido con todas sus obligaciones", ha subrayado Obeida, que urgió a Israel a asumir nuevos compromisos "retroactivamente" para salvar el acuerdo.
Por su parte, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha amenazado a Hamás con romper el alto el fuego y desatar "el infierno" si no libera a los rehenes antes del sábado a mediodía. "Por lo que a mi respecta, si no devuelven a todos los rehenes antes del sábado a las 12 -un tiempo apropiado-, todo está permitido y dejaremos que se desate el infierno", ha asegurado
Ataques, muertos y bombardeos pese al alto el fuego
Hamás ha destacado, como principal motivo para aplazar la liberación de rehenes, los ataques y bombardeos que se han seguido produciendo en la Franja de Gaza y que han matado al menos a una treintena de personas desde la entrada en vigor del acuerdo. También esgrime la lenta entrada de "suministros de socorro", como cientos de miles de tiendas que deberían haber llegado a la población desplazada.
Al menos tres gazatíes han muerto en las últimas 24 horas por disparos del Ejército israelí, según la Defensa Civil de la Franja, que además ha acusado al Ejército de abrir fuego contra sus equipos de rescate cuando se aproximaron a la llamada "zona de amortiguación", el área fronteriza de la que Israel debe retirarse. El Ejército ha defendido que abrió fuego contra un grupo de palestinos, que llegaron a estar a unos 300 metros de la divisoria, a la altura de la localidad israelí de Nahal Oz.
Desde la entrada en vigor del acuerdo el 19 de enero, se han llevado a cabo cinco canjes en los que se han liberado 21 rehenes vivos —incluidos cinco tailandeses— a cambio de más de 800 presos palestinos. En las seis semanas que debe durar esta primera fase de alto el fuego, las partes se han comprometido a liberar 33 rehenes de las milicias palestinas, entre ellos ocho muertos, por unos 1.900 prisioneros palestinos.
Este pasado sábado, los islamistas pusieron en libertad a tres hombres civiles —Eli Sharabi, Ohad Ben Ami y Or Levy— muy delgados, y con su salud visiblemente deteriorada. Tras los primeros chequeos médicos, se les diagnosticó "desnutrición severa". El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, amenazó ese mismo día con represalias por el estado en el que salieron los tres cautivos, los primeros que se ven tan demacrados.
Preocupación entre las familias de los rehenes
El Foro de las Familias de los Rehenes, ante la sorpresiva medida de Hamás, ha solicitado "urgentemente" ayuda a los países mediadores para restablecer e implementar el acuerdo existente, y a Israel que no se desvincule de lo pactado.
"La evidencia reciente de las personas liberadas, y condiciones impactantes de los rehenes liberados el sábado pasado, no dejan lugar a dudas: el tiempo es esencial y todos los rehenes deben ser rescatados urgentemente de esta horrible situación", ha destacado el Foro.
Por su parte, la Oficina del Primer Ministro ha informado a todas las familias sobre la decisión de Hamás. "Se les comunicó que el Estado de Israel insiste en el cumplimiento del acuerdo en su totalidad y considera con seriedad cualquier violación", ha indicado.
Plan de Trump
El anuncio de Hamás sobre el retraso en un nuevo canje de rehenes por presos se produce cuando todavía el mundo está asimilando el plan de Donald Trump para el futuro de la Gaza de postguerra. El mandatario estadounidense anunció la semana pasada por sorpresa su plan, que propugna el desplazamiento de los palestinos de Gaza a otros países como Jordania o Egipto, para impulsar la construcción de la 'Riviera de Oriente Próximo' en el enclave.
Trump ha aclarado este lunes que, según este plan, los palestinos desplazados a otros países no tendrán derecho a regresar al enclave. "No, no podrían", responde el presidente preguntado al respecto en una entrevista con la cadena Fox, que se emitirá este lunes y de la que se han adelantado algunos fragmentos.
El estadounidense aseguró la semana pasada que Israel entregará a EE.UU. el control de la Franja cuando termine la guerra, y que los palestinos deberán reasentarse en otros países, lo que provocó una amplia condena internacional, especialmente del mundo árabe, ya que el desplazamiento forzado es un crimen de lesa humanidad. Muchos lo ven también como un plan de limpieza étnica.