Por RAFAEL MUÑOZ
La diseñadora rompe por completo con la idea de la colección de primavera-verano, y se olvida de lo artesano y el reciclaje eco para centrarse en una propuesta más comercial y ¿más pequeña que la anterior, cosas de la crisis y el adelanto de la pasarela madrileña.
Su idea ECO de la vida y la moda sigue presente, y utiliza solo polipiel para sus prendas. Con este material hace tops irregulares que llegan hasta el suelo asimétricamente, vestidos de cortes geométricos y detalles en prendas de lana.
Con lana, 95% virgen, teje vestidos de aire futurista, tricotando tradición y vanguardia sin caer en lo obvio. Vemos negros, y otros neutros dominando la pasarela, y tan solo un verde menta soft se cuela en alguna camiseta o en el forro de una chaqueta.
Los pantalones llevan pinzas que se abren y no llegan a rozar el alto de las botas. Vemos otros vestidos de algodón con corte capa y patrones japonesesy otros de gran versatilidad que pueden llevarse a cualquier hora del día cambiando los complementos.
Los bolsos son del francés Eric Gallais, y¿hay que tomar nota.
Tras una baja por maternidad María Barros regresa a la pasarela y lo hace con una colección de líneas típicamente femeninas que se retuercen sobre el cuerpo. Dice que el círculo es su inspiración, y no vemos círculos sobre la pasarela.
Lo que vemos es una colección de día y otra de noche.Una hecha con lanas y otra con sedas, una tintada con tonos neutros y otra con verdes y granates joya.
Si el día es tranquilo y comedido, la noche es fantasiosa y recargada. Una colección que parte el círculo inspirador en dos mitades que no logran unirse.
La diseñadora Sara Coleman rompe por completo con la idea de la colección de primavera-verano, y se olvida de lo artesano y el reciclaje eco para centrarse en una propuesta más comercial, con una geometría estelar. María Barros regresa a la pasarela y lo hace con una colección de líneas típicamente femeninas que se retuercen sobre el cuerpo. Dice que el círculo es su inspiración, (4/02/2012)