Hay desfiles y desfiles. Unos venden fantasía y otros venden ropa. Sita Murt vende ropa y la ropa de sus desfiles va directamente las tiendas. Una suerte en estos tiempos.
En su colección de líneas sencillas destaca el jersey-vestido en punto de diferentes tonos de marrón con patchwork de distintas texturas trabajadas de forma tradicional, y destacan los minivestidos de punto liso con hombros de distinto tricotado que proyectan un efecto tridimensional.
El marrón en todas sus versiones, desde un crudo a un chocolate, se deja seducir por toques flúor en un contraste divertido, una idea que llega a los zapatos.Los vemos en tonos visón y café con el tacón salmón o amarillo, y con cremallera en el talón.
El toque sofísticado lo llevan los jerseys en punto mimoso que llevan bordadas cuentas en azul marino o en oro. Otra de las piezas clave es la chaqueta-abrigo que lleva la bufanda a juego, en el mismo tono y en el mismo tejido.
Los destellos ácidos de la lima llegan también a los vestidos lenceros en plata. Casi todas las prendas, que no son de punto, tienen un toque veraniego, en seda y con estampados sencillos, y es que, dice Sita, la temporada abarca de septiembre a marzo.
El estilismo es perfecto y la está muy colección cuidada. Un buen trabajo que, como he dicho, irá directo a las tiendas, y de ahí al armario de mujeres que entienden la moda como una forma natural de vestir.