Miles de personas, espoleadas por el presidente Recep Tayyip Erdogan, salieron a las calles y lograron frenar el golpe, después de que los golpistas se hicieran con algunas infraestructuras clave. El respaldo de Barack Obama también fue decisivo.
- Así hemos contado en vivo el intento de golpe de Estado en Turquía, por José A. Carpio.