JESÚS JIMÉNEZ
La piel que habito, es un arriesgado salto al vacío de Pedro Almodóvar que se ha saldado con un gran éxito internacional, una nominación al Globo de Oro a la mejor película de habla no inglesa y 16 candidaturas a los Goya, incluidos mejor Película, director, guión, música y actores principales.
No es fácil describir este cóctel de obsesiones, amores imposibles y, sobre todo, venganza. Una especie de revisión del mito de Frankenstein de Mary Shelley, con el que Almodóvar se la juega, olvidando su filmografía anterior para explorar nuevos territorios.
Y es que Almodóvar apuesta por una historia que no es suya, la novela Tarántula(Ediciones B), de Thierry Jonquet; un Thrillerelegante y siniestro que fascina al manchego desde hace más de una década.
“La novela la leí en 2000 y empecé a trabajar en ella en 2001”, asegura Pedro.
Una historia enfermiza que mezcla el terror y la ciencia ficción y que Almodóvar lleva aún más allá añadiendo intriga, violencia, sexo y destellos humorísticos.
Almodóvarempieza de cero, prescindiendo de sus chicas, y haciendo una película claustrofóbica. Ambientada en una mansión tan aséptica como inquietante, donde cada puerta puede esconder un misterio o una prisionera, o ambas cosas, como es el caso del personaje interpretado por Elena Anaya.
“Vera es un monumento a la supervivencia. Y eso es algo que comparte con todos los personajes femeninos que he escrito hasta ahora. Nunca barajé a Penélope Cruz para el papel. Hice cástings, probé a varias actrices y Elena, desde el primer momento, demostró que era la actriz ideal. Y no me equivoqué”, asegura el manchego.
“Elena es una actriz y una mujer muy valiente, sin ningún tipo de prejuicio y superdotada para las escenas más tensas físicamente hablando. Esto la hace dura como un marine a la hora de trabajar. Pero lo más maravilloso de ella es que a esta capacidad se unen una vulnerabilidad, una fragilidad y una emotividad fuera de lo común”.
Cada nuevo giro de guión nos ofrece una sorpresa que no esperamos. De hecho es sorprendente que una película de este tipo sea tan luminosa, huyendo de las sombras, con una sorprendente fotografía de José Luis Alcaine, que crea una intrigante atmósfera resaltada por la excelente banda sonora de Alberto Iglesias.
La piel que habito es el celebrado reencuentro de Pedro Almodóvar con Antonio Banderas, con el que no trabajaba desde hace 20 años, concretamente desde Átame (1990). La química entre los dos no ha disminuido durante estos años y Banderas es consciente de que debe mucho a Pedro en su carrera internacional.
Su personaje es muy complejo, un científico que descuida a su esposa y su hija por su carrera, y que está obsesionado en arreglar los errores del pasado a cualquier precio, sin darse cuenta de que únicamente comete nuevos errores.
Un misterioso personaje que economiza gestos y se expresa con su penetrante e inquietante mirada, de forma que casi nunca sabemos lo que está pensando.
Mejor película El Deseo D.A. S.L.U. (Agustín Almodóvar y Esther García)
Mejor dirección Pedro Almodóvar
Mejor guión adaptado Pedro Almodóvar
Mejor música original Alberto Iglesias
Mejor interpretación masculina protagonista Antonio Banderas
Mejor interpretación femenina protagonista Elena Anaya
Mejor actor revelación Jan Cornet
Mejor actriz revelación Blanca Suárez
Mejor dirección de producción Toni Novella
Mejor dirección de fotografía José Luis Alcaine
Mejor montaje José Salcedo
Mejor dirección artística Antxón Gómez
Mejor diseño de vestuario Paco Delgado
Mejor maquillaje y/o peluquería Karmele Soler, David Martí, Manolo Carretero
Mejor sonido Iván Marín, Marc Orts, Pelayo Gutiérrez
Mejores efectos especiales Reyes Abades, Eduardo Díaz