De niño fantaseaba con ser 'catcher' de béisbol y jugar en las rutilantes ligas estadounidenses. Hoy, convertido en presidente de Venezuela, Hugo Sánchez Frías conduce su país hacia lo que él llama 'socialismo del siglo XXI': una revolución que comenzó en las urnas y de la que depende, según sus propias palabras, "la salvación de este planeta".

Ex coronel golpista y polémico hasta el extremo, muchos ven en él un caudillo en potencia. Pero desde que ganó sus primeras elecciones, en 1998, su popularidad no ha dejado de crecer, gracias, en buena medida, a las importantes medidas sociales que ha puesto en marcha para los pobres. La fórmula patentada por Chávez, apoyada en las nacionalizaciones, los 'petrodólares' y una buena dosis del populismo, parece destinada a perpetuarse en el poder.

El golpe de 1992

Hijo de maestros y criado por su abuela, Hugo Chávez descubrió pronto su verdadera vocación: la militar. A los 21 años se gradúa como subteniente en la Academia Militar de Venezuela. Antes, el joven Chávez se había licenciado en Ciencias y Artes Militares por la rama de Ingeniería. 

En esta época, se empapa de la vida del que será su máximo referente político: Simón Bolívar. En 1982, funda, junto a dos capitanes, el Movimiento de Liberación Bolivariano-200. Es el comienzo de una carrera imparable hacia una meta: el Palacio de Miraflores.

El primer asalto al poder tardaría diez años en llegar: en 1992, apoyado por cuatro comandates, encabeza un fallido golpe de estado contra el Gobierno de Carlos Andrés Pérez. La intentona se salda con 17 militares muertos y cincuenta heridos. Chávez, que pasará dos años a la sombra, se ve obligado a renunciar "por ahora" a sus pretensiones.

El ascenso al poder

Tras su paso por la cárcel, Hugo Chávez decide cambiar de estrategia: funda el Movimiento V República y se mete de lleno en la lucha política. En 1998, arropado por varias formaciones de izquierda, se presenta a las elecciones presidenciales. Su éxito es arrollador: un 56,2% de los votos le convierten en el presidente más joven de Venezuela.

Una década después, Chávez sigue abonado al triunfo: ha ganado todas los comicios a los que se ha presentado. Su único revés ha sido el 'no' a la reforma constitucional en el referendum de diciembre de 2007. El presidente venezolano ha salido incluso airoso de un golpe cívico-militar que intentó derrocarle en 2002.

Nacionalizaciones y políticas sociales

Nada más llegar al poder, Chávez puso en marcha una política de nacionalizaciones destinada a recuperar las principales industrias del país. El pulso con las multinacionales alcanza su punto álgido en 2007, cuando el presidente venezolano nacionaliza por decreto los últimos pozos de petróleo que celebraba así en su programa 'Aló Presidente': "Termina así la nefasta apertura petrolera. Este es el último espacio que nos faltaba por recuperar".

Gracias a los petrodólares, la economía venezolana se ha transformado en una de las más prósperas de la región. Esta bonanza ha permitido a Chávez poner en marcha políticas sociales de hondo calado, como sus famosas 'misiones': viviendas, escuelas, dispensarios y becas para los más pobres, que se han convertido en el núcleo duro de su electorado. 

 Enemigos y aliados

Estados Unidos se ha convertido en el gran caballo de batalla de Chávez. Para el líder bolivariano, George Bush es la reencarnación misma del mal. "Ayer estuvo el diablo aquí, en este mismo lugar. ¡Huele a azufre todavía en esta mesa donde me ha tocado hablar!", dijo en la sede de la ONU en 2006.

También ha tenido sonoros encontronazos diplomáticos con el presidente colombiano, Álvaro Uribe, a quien, según dice "no quiere ni ver". Y con el Rey, quien le dedicó el ya celebérrimo "¿Por qué no te callas?" en la última Cumbre Iberoamericana.

Pero Hugo Chávez también tiene aliados: el cuarteto formado por los hermanos Castro (Cuba), Evo Morales (Bolivia), Daniel Ortega (Nicaragua) y  Rafael Correa (Ecuador) son sus más firmes defensores.

Otras perlas 'dialécticas'

• "El Rey [Juan Carlos I] es tan jefe de Estado como soy yo y no me puede callar. Sólo que yo he sido elegido tres veces con un 63%".

• A Bush: "¡Eres un burro, mr. Danger! ¡Un cobarde, un alcohólico! ¡Eres de lo peor que ha habido en este planeta!".

• Aznar "es de la calaña de Adolf Hitler, un verdadero fascista de la extrema derecha mundial. Un lacayo de Bush, un tipo que da asco y lástima".